|Capítulo 79|

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No es tu culpa

- ¿Porfis papi? - Kookie seguía diciendo mientras hacía pucheros, quería subirse a la cama elástica que habían comprado recién, ya había jugado mucho rato y Jin no podía cuidar más, tenía trabajo que hacer.

-Cariño ya dije que no podías, papi no puede cuidarte y no quiero que te pase nada- Jin decía aún con el pequeño entre sus brazos, Kookie hizo un pucherito mientras sus ojitos empezabas a brillar, vaya que era demasiado difícil para Jin resistirse a esos ojitos.

-¿Prometes que tendrás cuidado?- Jin dijo acariciando las mejillitas de un Kookie ahora sonriente, la ventana de su oficina daba al patio trasero así que lo podría ver desde ahí, no habría problemas, ¿verdad?

-Promesa, papito- Kookie dijo y se levantó de las piernas de Jin para ir de nuevo al trampolín, Jin sonrió y fue hacia dentro en su oficina.

El mayor se sentó y después de ver unos segundos como Kookie brincaba, regresó su vista al computador.

...

Algunos minutos después Jin escuchó un gritito de Kookie, alzó la vista y abrió los ojos desmesuradamente, alcanzó a ver como Kookie se caía del trampolín, parecía que estaba queriendo bajarse, pero pisó mal y cayó de cabecita.

-¡Mi amor!- Jin dijo a penas salió al patio trasero y sus ojos se llenaron de lágrimas gracias a la culpabilidad que sintió, su pequeño estaba con la carita roja y tocaba su cabecita, de donde se alcanzaba a ver que salía un poco de sangre.

Jin no esperó más y corrió hacia Kookie, el cual ya había empezado a llorar, Jin llamó a una ambulancia y dio los datos rápidamente para luego abrazar y tratar de calmar a Kookie, quien lloraba más por el susto de ver su sangre que por el dolor.

-Auchis papi Jin- Kookie decía entre lágrimas mientras se apegaba al pecho del mayor, al cual le importaba poco si se manchaba de sangre, solo ponía su mano encima para tratar de frenar la hemorragia.

-Papi lo sabe mi amor, papi lo sabe. Perdóname- Jin dijo con ojos aguados, la culpabilidad lo estaba atacando como nunca, no debió dejar solo a su bebé.

Jin escuchó las sirenas y corrió a abrir la puerta para que los paramédicos entren. Revisaron a Kookie y pusieron gasas en su lastimado, lo metieron a la ambulancia con rapidez que pudieron, pues Kookie no quería que nadie lo toque.

...

-Ven rápido, amor- Jin dijo desde su teléfono a Nam, estaba hablando entre lágrimas dentro de la ambulancia, Kookie estaba bien y reaccionaba a todos los estímulos, pero realmente se estaba llevando el susto de su vida.

-Llegaré pronto cariño, por favor respira y trata de calmarte- Nam dijo asustado desde el otro lado, Jin no podía contener su llanto y eso hacía que Kookie se asuste aún más.

La ambulancia llegó al hospital que Jin había pedido y lo bajaron hasta la sala de emergencias.

-Señor disculpe, pero usted no puede pasar, es un área esterilizada- Una enfermera dijo y Jin juró que vio rojo.

-Señorita ese es mi pequeño y voy a pasar con él, está asustado y no quiero que lo esté aún más mientras está rodeado de gente que no conoce- Jin dijo ignorando las lágrimas que seguían saliendo de sus ojos.

-Señor entiendo su preocupación, pero no puede entrar a la sala, tendrán que poner algunos puntos y no es seguro, además debe calmarse por favor- La chica dijo y Jin ya iba a entrar sin importarle que pase, pero unos brazos en su cintura lo detuvieron.

-Cariño deja a los doctores hacer su trabajo. Hey, mírame- Nam dijo volteando a Jin, el cual lo miró aún molesto.

-Tranquilo amor, dijiste que Kookie estaba bien, dejemos que lo curen y podremos verlo apenas acaben, tranquilo- Nam dijo abrazándolo y Jin se soltó a llorar en su hombro.

Kookie en ageplayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora