Hola, soy Susan Christine Alice Roxanne Lola Elizabeth Tiffany, pero para resumirlo SCARLET y soy estudiante de preparatoria, cuento con 16 años y mi vida es horrible.
Me vestí para ir a la preparatoria, me puse una falda que me llegaba a media nalga, una sudadera color morada, medias negras, converse morados y peiné mi hermoso cabello que no necesitaba ni arreglarlo porque solito era perfecto.
—Buenos días cariño.— Me saludó mi madre mientras me daba mi almuerzo para irme a la escuela.
—Hola madre.— Lo tomé y me fui de mi casa.
La verdad, es que era tan dificil ser yo, nadie sufre tanto como yo, yo soy la mas fuerte porque yo aguanto toda una vida de mierda, yo, yo, yo yo.
Cuando llegué a la escuela, me encontré en el pasillo con Amber Debrah Ashlee Rasputina, quien era la rubia plástica de ahí.
—Miren nada más, es la rarita, supongo que tengo que molestarte sin razón aparente sólo para hacer tu vida más fea y así puedas simpatizar con los lectores.
—Así es.
Y sin previo aviso, me empujó a lo que caí de una forma tan sensual y dramática.
Claro que nadie se atrevió a intervenir, ni los profesores, ni mis amigos ni nadie, porque si no, mi vida no sería Darks.
Después de una desastroza humillación pública corrí hacia fuera del instituto en donde en la parte trasera, casualmente había un bosque tetríco y oscuro que decía que no podíamos pasar.
Obvio yo corrí hacía ese lugar.
Lloraba en un árbol cuando depronto escuché algo, como pasos que se dirigían hacia mi.
—¿Quíen anda ahí?— Pregunté en vez de salir corriendo del miedo, claro, yo soy tan valiente.
—Soy yo, el amor de tu vida.— Y de la nada, un tipo con capucha blanca saltaba desde arriba de uno de los árboles.
—¿Justin Bieber? ¿Los miembros de One Directio? ¿Sebastian-sama?
—No, niña idiota, soy Jeff The Killer.
Y mientras decía esto se quitó la capucha y vi a la persona más sexy del mundo.
Era de piel blanca, ojos entre blanco y azulado, cabello medio largo negro y estaba cubierto de sandre, a demás lo más caracteristico era su sonrisa enorme.
Se acercó a centimetros de mi, poniendo su cuchillo en mi garganta.
—N-No puedo matarte, tu eres especial y perfecta; creo que te amo.— Me dijo dejando caer su cuchillo.
Yo no estaba asustada, me mantenía con mi cara de retrasada sin saber que decir hasta que el se fue corriendo sin antes levantar su cuchillo.
Recogí el arma, la guardé y me fui a casa.
Claro que nadie en la escuela se iba a preguntar en donde estaba y me valía saltarme las clases, a parte mi madre ni mi padre preguntarían porque llegué tan temprano a casa.
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Jeff The Killer y la Mary Sue.
Humor¿Hart@ de todas esas historias de amor con Mary Sues? ¡Pues me vale! Esta es otra de esas tontas historias de amor con Jeff The Killer. Se busca hacer reir al lector o lectora, ¡No te lo puedes perder! Faltas de ortografía, amor tonto, una protagoni...