LA FUERZA QUE NOS ATRAE

CAPITULO 1:

JULY:

¡Buenos días chicos y chicas, hoy se esperan 40 grados en la sombra en las calurosas calles de Boston, con las temperaturas más altas de este mes de agosto. ¡Preparados para pasar calor! Y felicidades a todos los nuevos universitarios que estaba tascando la autopista 245 a la universidad de Boston. ¡Esperemos que tengáis aire acondicionado en el coche¡ ¡Y FELIZ INICIO DE ....CUR...SO!

Golpe la radio hasta que por fin se callo, Estoy segura de que yo me hubiera reído de esas personas sino fuera una de ellas, no llevaría ni dos horas fuera de mi casa y ya quería volver pero esto era de locos con todas las cosas que llevo en el coche casi no puedo entrar yo, había perdido mi móvil entre la montaña de cosas hacia rato y no me apetecía buscarlo ahora mismo.

Alguien volvió a pitar detrás de mi llevaba en este atasco cerca de una hora y estaba a punto de sacarles el dedo a cualquier que tuviera las agallas de volver a pitar.

Piiiiiiiiiiiiii.

-Ohhhh, ¿¡Que narices le pasa?!.

Nadie se estaba moviendo, yo no podía saltar los coches. Mire hacia atrás y solo vi una parte de un gran todoterreno negro, por un momento pensé en dar marcha atrás pero estoy segura de que ese coche se comería a mi Allison, mi pequeño coche, y eso no lo puedo permitir.

No tengo dinero para arréglelo después.

Los minutos pasaron y el capullo del todoterreno no paraba de pitar, baje la ventanilla y le saque el dedo, me rio para mi misma mientras el gilipollas para. 

Los minutos pasan mientras disfruto del silencio y por fin los coches se mueven.

Volví a encender el coche, y empecé a conducir , varios coches se me habían adelantado una vez que salimos de la autopista para entrar a la siguiente salida, estaba tranquila, relajada y había bajado las ventanillas para que algo de aire pudiera entrar en mi pequeño coche, estaba empapada en sudor y sabia que mi camiseta de tirantes pronto iría a la basura . Me pare frente al semáforo en rojo, por  el retrovisor pude ver como una gran mancha negra aparecía detrás de mi corriendo a gran velocidad.

-No ira a ...- El coche se acercaba cada vez mas a mi como si ni siquiera pudiera verme a mi o al semáforo.

5 metros... Esta demasiado cerca.

Gire repentinamente el volante del coche, mi motor hizo un ruido pero giro rapidamente hacia la derecha entrando en el pequeño terraplén y llenándose de barro.

¡El coche paro en seco frente al semáforo!

Suspire de alivio esperando a que alguien bajara pero no lo hicieron, al contrario una vez que el semáforo volvió a estar en verde el coche siguió y me dejo en medio de la nada.

Mientras respiraba fuertemente intentando calmarme Me di la vuelta y miré como el parachoques se caía de mi embarrado coche.

Genial... 

Volví a subirme y arranque el coche.

No encendía.

-1, 2, 3...

Lo volví a intentarlo.

-No puede ser.

Nada.

Una última vez... del coche empezó a salir un humo blanco. 

Nada.

Y así es que yo, Willow Baker , acabé tirada en un lado del arcén con un coche estropeado, sudando a mares y con un nuevo enemigo.