Un nuevo comienzo

¡Al fin regresaron!

Tras varias horas en tren los hermanos llegaron a Resembool, no habian avisado a nadie de su visita para dar una sorpresa. Tras el largo camino los rubios llegaron hasta la puerta.

El primero en recibiros fue Den, el perro de Winry, al cual le costo reconocer a Alphonse pero despues se lanzo a lamerle, ante los constantes y alegres ladridos del perro, Winry fue a ver que sucedia y al ver a los chicos se lanzo a abrazarles.

-Me alegro tanto de que hayais vuelto, de que esteis bien... De que tengais al fin vuestros cuerpos-decia sonriente la ojiazul con los ojos llenos de lagrimas de alegria, cumpliendose asi la promesa que Ed le habia hecho.

-Nosotros tambien nos alegramos mucho de verte-dijo Ed mientras se levantaba del suelo.

-Ey, ¿me ayudan?-dijo Al desde el suelo.

Ed le ayudo a levantarse y le paso la muleta.

-Pasen-la chica agarro sus maletas y las dejo en el salon.

-Hola enano, ¿¡Alphonse?!-dijo sorprendida la anciana al verles.

-Soy yo-dijo sonriente el rubio.

-Lo lograsteis-alcanzo a decir la anciana.

Se acercaba la hora del almuerzo y con ella una larguisima ronda de preguntas.

-¡A comer!-exclamo la rubia mientras servia la comida.

-¡Ya vamos!-le contestaron ambos desde la planta superior.

Cuando todos ya estaban sentados y comiendo tranquilamente Winry decidio comenzar ella las preguntas.

-¿Cómo lo lograsteis? Deciais que era imposible sin la piedra filosofal.

-Es una larga historia-dijo el menor- ¿Quieres contarla tú, Ed?

-Claro-el rubio sonrio y comenzo a relatar- Durante el golpe de estado tuvimos que pelear contra Father, el destruyo mi brazo y Al que estaba absolutamente destruido se le ocurrio la brillante idea-dijo en tono ironico- de sacrificarse a cambio de que yo recuperase el brazo, osea el mismo intercambio que realice aquella noche...-en ese instante fue interrumpido.

-¿¡Que hiciste QUÉ?!-le recrimino Winry a Alphonse.

-Ed estaba herido, mejor dicho atrapado, sin el brazo no podia transmutar y liberarse, de no haberlo hecho Father lo hubiese matado-trató de explicarse el rubio.

-¿Puedo continuar?-comento el chico de ojos dorados por la interrupcion.

-Adelante, aún no respondiste a la pregunta-le contestó Pinako.

-Bueno-continuo- Después de vencer a Father no se me ocurria la forma de traer a Al, Ling y Lan Fan me ofrecieron usar la piedra filosofal y nuestro padre se ofrecio como intercambio, rechaze ambas opciones ya que nos prometimos no utilizar las vidas de nadie...

-¿Y entonces?-interrumpio de nuevo curiosa la rubia.

-Entonces se me ocurrio la manera, dibuje el circulo de la transmutacion humana con algunos cambios y me coloqué en el centro para no perder nada, llegue a ese extraño lugar al abrir la puerta y ejecute mi plan, sacrifiqué mi portal y con el mi habilidad alquimica a cambio de recuperar a Al-dijo con orgullo el chico.

-¿Entonces nunca más podrás transmutar?-dijo algo acongojada la muchacha, sabia cuanto le importaba eso al chico.

-¿Y qué hay de tu pierna?-preguntó la anciana.

-No la recuperé-dijo dando un toque en su automail.

-Si, me siento mal por eso, mi hermano sacrifico sus poderes y aun asi no pudo recuperar todo su cuerpo-dijo Alphonse agachando la cabeza.

-No digas eso, tonto, sabes que me hubiese quedado ahi adentro con tal de sacarte-el muchacho esbozo una leve sonrisa- además si hubiese recuperado mi pierna Winry se sentiria inutil-dijo al tiempo que soltaba una gran risotada.

Cuando todos terminaron de almorzar Winry trajo el postre, habia preparado pastel.

-Que rico-dijo Ed al probarlo.

-Esta delicioso, cocinas muy bien-dijo con una gran sonrisa Al.

-Gracias, me alegra que os guste.

El pastel se agoto rapisisimo y despues de un largo dia todos se fueron a dormir.

-Al fin regresaron-dijo la rubia antes de dormirse.