Necesito escribir para sacarte de mi cabeza.
Es injusto que siga pensándote.
Aunque hubiera querido que así fuera,
ya no te puedo tener en mi vida.
Y no quiero,
o al menos eso quiero creer.
Ya tengo un mundo que no eres tú,
pero tu te caminas por el y me miras,
y te sueño.
Te sueño en sueños que muy a mi pesar,
son hermosos.
Quisiera poder decir que no eres más que un esqueleto,
muy en lo profundo de un armario de recuerdos.
Quisiera poder decir que no te pienso
y si te llego a pensar no es porque te quiera.
Quisiera poder asegurar que creo que no vale la pena
otro buen corazón roto por intentar estar contigo.
Quisiera poder decir que no sonrío en mis adentros
cuando te paseas por mi mundo.
Quisiera no poder creer que me puedes querer.
Quisiera poder mentirme tan bien.
Mi mundo está lleno de todo lo que podría necesitar,
pero de alguna manera aun siento que me faltas,
no te quiero cerca.
Me gusta fantasear con que si te llegas a acercar demasiado a mi vida,
te sacaría de inmediato,
pero sé que es probable que deje mi vida a un lado por tenerte.
O bueno, por dejarte tenerme.
Por escuchar tu voz en algo distinto de los recuerdos y los sueños.
Por ver tus ojos en algo distinto de sueños y fotos.
Me gustaría poder convencerme de que no fuiste (y nunca serás)
más que una alucinación onírica,
producto de algún sueño ebrio o de alguna fiebre paranoica.
Entonces cada vez que te veo pasar
no sería más que un truco de mi mente insana,
y creer eso tiene sentido.
Mucho más sentido que creer que
después de tanto tiempo y lágrimas,
y teniendo un mundo ya hecho sin ti,
sigo creyendo que tendré un final feliz a tu lado.

ESTÁS LEYENDO
131115
RandomEste es el tipo de cosas que escribes en el proceso de enloquecer por alguien. Viernes trece, cualquier cosa puede pasar.