Apuesta. [EDITANDO]

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Karol.

Había pasado un mes desde que Ruggero y yo nos separamos. No estaba siendo nada fácil para ninguno de los dos, realmente estábamos sufriendo y mucho.

No tenía ánimos de salir, en todo este mes me aleje de Caro, Agus, Valentina y Mike, me sentía tremendamente traicionada por ellos, ellos sabían la verdad y jamas dijeron nada.

Y que decir de Ruggero, lo he evitado a toda costa, no lo quiero cerca de mi y aunque el  intentó acercarse yo no se lo permití.

Ahora el Ruggero que he visto en los últimos días ya no lo conozco.

Estaba sentada en mi sofá tomando tequila, normalmente no suelo ahogar mis penas en el alcohol pero ya no hallaba como sentirme mejor, este dolor me esta consumiendo por dentro.

Saturno de Pablo Alboran, comenzó a sonar, suspire y comencé a cantar...

- Vuelves en cada sueño que tengo, caigo de nuevo en tu red, se que tarda un tiempo curarme de ti de una vez.- cerré los ojos y las lagrimas comenzaron a caer.

Las imágenes de todo lo que a sucedido en este mes vienen a mi mente como gotas de lluvia.

Flashback.

Me quede sentada después de que se fue, algo en mi se instalo, no sabía con exactitud que era, pero el sentimiento me ahogaba de poco a poco.

Mi celular sonó distrayéndome de mis pensamientos.

- Karol.- la voz preocupada de Caro sonó, un tremendo sentimiento de enojo comenzó a invadirme.

- Que sucede?.- intente contestar lo mas normal que pude pero entre mi enojo y las lagrimas no podía ser así.

- Ya hablaron.- confirmó.

- Siempre lo supiste.- los sollozos se hicieron presentes.- Eras mi amiga Caro.

- Karol yo...

- No quiero hablar contigo, ni con nadie.- le colgué.

De inmediato el celular comenzó a sonar y desvié la llamada.

Esa tarde no quise ir a trabajar, no me sentía bien.

Esa noche no dormí absolutamente nada, cada vez que lograba cerrar los ojos el venía a mi mente y ese sentimiento instalado en mi, me atormentaba una y otra vez.

Al otro día de mala gana fui a clases.

Llegando al colegio todos estaban afuera esperándome. Podía sentir sus miradas en mi y yo simplemente decidí ignorarlos.

- Karol!.- la voz de Mike me llamo pero pase de largo lo mas rápido que pude.

Entre al colegio y fui a mi casillero. Estúpido casillero.

Entre al aula y enseguida Esteban se acerco a mi.

- Bonita, que tienes?.- se sentó frente a mi.

- Hola Esteban como estas?.- ignore su pregunta.

- Sabes que puedes contar conmigo, cierto?.- tomo mis manos y pude ver en sus ojos la preocupación.

- Lo se, solo que.- suspire, tenia que admitirlo.- Ruggero y yo terminamos.

Su cara fue de sorpresa.

- Que sucedió?.- pregunto con cautela.

- Nada, solo que todos tenían la razón.- admití.- No debí confiar en el.