Capítulo uno

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KyungSoo sostenía entre sus manos la hoja que indicaba los resultados de su última prueba de examen. Sentía su cuerpo temblar pero no por miedo sino por la emoción tan grande que embargaba su cuerpo. Aquella hoja le confirmaba lo que tanto había sospechado durante algunas semanas y además, le anunciaba la mejor noticia de su vida.

GCH: Positivo (Embarazo)

—Dios mío —dijo liberando un jadeo y sosteniendo su pecho con una mano—. Oh Dios, tengo que decirle, tengo que decirle, tengo que... ¿Y ahora cómo se lo digo?

JongIn llegaría para la cena, se lo había dicho el día anterior, debido a que tenía un almuerzo con sus compañeros de trabajo. KyungSoo, por su parte, trabajaba como independiente, era fotógrafo, así que no tenía que ir a ninguna oficina, su centro de trabajo era su casa la mayor parte del tiempo.

Al pelinegro se le ocurrió que podría hacer una cena romántica, de esas que llevaban velas en la mesa y un buen vino en una cubeta de hielo. Sí, podría hacer eso para darle la gran noticia a su marido. Quería que JongIn fuera el segundo en saberlo porque él era el padre, debía ser así, por lo que mantendría la boca cerrada hasta hacerlo.

Así que, KyungSoo se puso manos a la obra y salió de su casa para ir al supermercado a comprar los ingredientes de la cena.

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¿Por qué no habían puesto el lote de carne de lomo? KyungSoo se quejó con el administrador al no encontrar su parte favorita, es decir, eran las diez de la mañana y no podía ser posible que no encontrara su parte favorita. Estaba comenzando a enojarse mucho, muchísimo.

—Por favor, señor, estaremos colocando el lote ahora mismo —explicaba el hombre, intentando calmar al bajito que cada vez se ponía más rojo de la rabia—. Intente calmarse, por favor.

—¡¿Está diciendo que estoy alterado?! —dijo completamente alterado.

El señor lo miró espantado, KyungSoo había sido muy agresivo con el hombre, y cuando se dio cuenta de ello retrocedió. ¿Por qué estaba de tan mal humor?

—L-Lo siento... Esperaré.

KyungSoo se quedó de pie junto a la sección de carnes, esperando por su pedido con los brazos cruzados. Se puso a pensar en la razón por la que había reaccionado de esa forma, ¿qué demonios le pasaba? Él no era así, su forma de ser era calmada y paciente, pero había explotado sin razón por un poco de carne. ¿Acaso era parte del cambio hormonal por el que estaba pasando? Tenía lógica pensar de esa forma, pero le comenzaba a asustar.

Por su lado pasó una pareja con su bebé, quien se puso a llorar y su madre la cargó para calmarla, pero no funcionó, así que la mujer se la pasó a su esposo y el hombre comenzó a darle pequeños besitos por la cara, además de deshacerse en mimos con ella. La bebé detuve su llanto y se rio. KyungSoo sonrió enternecido por la linda escena protagonizada por esa familia. Siempre anheló tener eso con su esposo, y ahora estaba cada vez más cerca de tenerlo. Acarició su vientre plano con el deseo de que los meses pasaran volando.

—Aquí tiene, señor. —El administrador llamó su atención, entregándole dos paquetes de carne, uno de ellos tenía un sticker—. Le estamos dando uno gratis por los inconvenientes. Nos disculpamos por los problemas causados.

—Oh... —KyungSoo tomó los paquetes con duda—, no es necesario... Esto es mucha carne, solo somos dos.

—Un embarazado debería alimentarse bien —dijo sonriéndole amablemente.

KyungSoo tiene algo que decir  ❝καιѕοο⁀➷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora