Un Día Más

Prologo

- No te puedes sentar a esperar a que simplemente las cosas pasen- le reclamaba a Sebastian, mientras el ignoraba cada una mis palabras, como era de costumbre.

- Solo fue un accidente- repetía una y otra vez el puberto, como si le fuera creer.

- ¿En serio? entonces, hipotéticamente por accidente, te acostaste con una chica y la embarazaste- el sonrió y asintió. Que cínico- ¡PERO ACASO ESTAS LOCO! cosas como esas no pasan por accidente.

- ¿Qué vamos a hacer?- dijo este, ahora mas preocupado- ella no quiere tener el bebe y yo no quiero que aborte.

Debo admitirlo este chico por lo menos se hace responsable de sus errores y eso es algo que admiro.

- Pero apenas tienes 16 ¿como piensas cuidar de ese bebe?

-No lo se- dijo el chico bajando la cabeza ahora si preocupado.

- Demosla en adopción- este levanto su cabeza y en su cara solo veía horror.

- Estas loca, ese bebe, sea niño o niña, tiene un padre y aunque tu no me apoyes yo buscare la manera de hacerme cargo de el.

- Pero ni siquiera tienes trabajo o donde ir.

- Apenas tiene 3 meses, es mucho lo que puedo conseguir en los seis meses restantes. - este chico con cada palabra me sorprende mas, pero eso no quiere decir que le voy a dar todo mi apoyo, aunque lo ayudare un poco.

- Dile que lo tenga, nosotros cuidaremos de ese bebe, no dejaremos que le falte nada- el asiente y luego me abraza. Niños, ¿cuando aprenderán a cuidarse?

Seis meses después.

Narra Sebastian.

Ay pequeña, creo que nunca había amado hasta el día de hoy que te tengo en mis brazos, puede que tu madre no este contigo, pero te prometo que haré todo lo que este a mi alcance y que nunca te falte nada, mi pequeña Aria, eres tan pequeña que tengo miedo de lastimarte.

No te prometo que seré el mejor padre del mundo, pues también soy muy joven, pero con la ayuda de tu abuela, se que saldremos adelante y lo llegaremos muy lejos, mi pequeña.