01 - Decepción, alcohol y malos deseos.

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Un día antes.
Haeri

-¡Haeri! -exclamó su jefa haciendo que ella presté atención, estaba muy distraída -. Lleva esto a mi cuarto.

Haeri era mánager de una actriz famosa. La persona más insoportable del mundo. En pocas palabras ella era su esclava.

-¡Lo siento Jessie! -se disculpó agrarrando el bolso que le entregó-. Ahora mismo lo llevo.

Ser mánager implicaba para ella hacer todos su recados, hasta los más inútiles.

-Una cosa más -agregó Jessie -. Llama al director de mi agencia, cancela mis sesiones de fotos de hoy --ordenó mientras se sacaba el maquillaje -. Cuando termines, tómate el día libre

Ella adivinó inmediatamente que Jessie se vería con su novio, era un artista famoso de un grupo de pop. Su relación era secreta, por eso cada vez que él se iba se disfraza a del personal de limpieza. Si todos se enteraban de su relación tirarían mucho odio a Jessie, entonces no le convenía revelar el secreto.

Haeri agradeció emocionada. Salió del departamento de su jefa y fue directo a él centro comercial.

Era el día de su aniversario con Jeremie, estaba tan emocionada. Busco el regalo perfecto hasta encontrar lo que más le gustaba a él. Estaba en la vidriera de la librería. Era uno de los cómics más antiguos y único en su colección. Fue a la caja para comprar y buscó los billetes en su billetera. Ha estado ahorrando por más de seis meses.

-Señorita ¿Le gustaría aprovechar nuestra promoción? -ella afirmó con la mirada con ilusión -. Con la compra de este cómic podrás llevarte de regalo una de estas novelas -señaló los libros

Ella observó con cuidado cada uno de los libros, hasta que en la esquina estaba escindido un libro llamado "Perfect love" era una de las primeras novelas que leyó desde chica, sin duda alguna llevaría ese.

Llevaba en manos su obsequio mientras esperaba el autobús que la llevaría hasta su apartamento. Estaba emocionada, sonriente, sería una de las mejores sorpresas que le daría a su amado. El autobús por fin llegó, ella se subió sonriente, afamada por la ilusión de ver a él chico que tanto quería feliz.

Subió al elevador, tocó el botón para subir al piso diez. El elevador subió, mientras iba avanzando sacó el regalo de su mochila. Estaba enfrente de la puerta, puso la contraseña y la puerta se abrió. Entró, se cambió los zapatos y fue para la sala de estar.

No estaba nadie, el apartamento estaba vacío. Él aún no había llegado del trabajo, Haeri entró, quería preparar una comida para hacer la sorpresa aún mas grata.

Sacó todos los ingredientes de la alacena. Abrió el refrigerador. Quería prepararle spagetti, era lo que a él mas le gustaba. Terminó de cocinar, preparó la mesa de manera tan especial, sonreía mientras ponía los platos, un arreglo de flores y las copas. También sacó una botella de vino que estaba guardado en uno de los cajones. Todo estaba arreglado perfectamente, iba a ser la mejor cena de aniversario. Ella sacó una fotografía cuando notó que faltaba algo, las servilletas. Estaban guardadas en una de las habitaciones.

Fue hasta ella hasta que escuchó que la puerta se abrió, fue emocionada a recibirlo, agarró su regalo. Hasta que una sorpresa inesperada surgió.

Era él, su novio, besando a otra chica frente a la puerta. El regalo de Haeri cayó al suelo, los amantes voltearon a mirarla, él se sorprendió.

-No puede ser -afirmó Haeri mientras estaba mirándolos perpleja en su actitud -. ¿Jisoo? ¿Desde cuándo?

-Haeri... Te podemos explicar -respondió Jeremie

-¿Que van a explicar? -respondió molesta mientras trataba de no empezar a enloquecer-. ¿Qué me han estado engañando mientras estuve preparando todo esto?

Ella enloqueció.

Estiró del mantel y dejó caer todo al suelo con ira. Cayó todo al suelo, los platos servidos con comida, el vino que hizo que todo se manchara su alrededor. Las copas que se rompieron y las flores junto con ellas. Todo estaba roto, perdido, machado como su corazón que se había roto inquebrantablemente.

-Trabajé día y noche, fueron los meses más torturantes que sufrí -seguía indignada -. ¿Y así mes están pagando? ¿Creen que eso fue divertido ? ¡Se burlaron de mi y de mks sentimientos!

-Haeri... -contestó Jisoo.

-¡No te atrevas a decir mi nombre! -interrumpió -. ¡Eres mi prima! ¿Y me mentiste todo este tiempo?

Haeri estaba llorando, desconsolada. Iba camino a su casa después de haber enloquecido. Ella solo lloraba, sin decir nada. Recordaba cuando eran felices, pero ¿En que se convirtió todo? En un horrible momento, acababa de sufrir la peor decepción del mundo.

Entró a una tienda de autoservicio, caminaba con desánimo. Abrió el refrigerador y sacó más de quince latas de cerveza. Era lo único que quería en ese momento. Pará una chica de veintitres años, el alcohol era una de las mejores soluciones a sus problemas.

Llegó a su casa, con la bolsa llena de cervezas en mano. Sólo quería olvidar todo, quería borrar ese sentimiento de sentirse horrible, la persona más horrible del mundo.

Subió las escaleras de su casa. Ella vivía en el segundo piso de una casa que rentaba. Era el segundo piso de la azotea. Entró a su humilde hogar. Se sentó en su cuarto, sacó las latas de cerveza y comenzó a dar sus primeros tragos. Revisó su mochila, encontró aquel libro que le regalaron en la librería.

Sonreía mientras leía párrafo tras párrafo, Jaehyun, el chico perfecto. Amaba tanto a Eun Soo, eran la pareja perfecta. Continuaba leyendo y olvidando su remordimiento mientras seguía tomando.

Jaehyun era a tentó en todo momento. Le ayudaba cada vez que podía, le defendía Cúando esta a en peligro, cuando hacía frío le daba su saco, era el novio ideal. Por su parte Eun Soo no sentía nada por el, era una chica sin corazón que solo usaba a Jae como su títere, pero el era ingenuo, lo único que quería era hacerla feliz sin importar lo que ella sienta o no por él.

Ella quería alguien así, quien la quiera como él lo hacía con ella. Un amor incondicional, sin importar nada.

-Deseo tanto que Jaehyung estuviese aquí -afirmó tomando su sexta lata-. ¿Quién no quisiera un novio como este personaje? Si él fuera real... Sería feliz, por fin tendría al chico más amable in encantador a mi lado, alguien me amaría sin importar qué. No me dejaría por otra persona, estaría a mi lado en todo momento.

En ese momento deseo con una exactitud profunda que él fuera la persona que esté a su lado. Tener un novio como Jaehyun y ser ella la protagonista.

Salió de su habitación mientras detrás de ella salía un espectro brillante haciendo que el libro saliera volando hasta la sala. De aquel espectro brillante de forma redonda salió alguien, una persona apareciendo en el mundo real. Era él, Jaehyun estaba saliendo de aquel espectro, en el momento en que salió se desmayó cayendo en la cama de Haeri.

Era algo inexplicable, el momento en que la realidad y la ficción se juntaban haciendo que algo imposible surgiese. Un personaje ficticio se volvió un personaje real

No Soy Ficticio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora