Capítulo I

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¿Nunca has sentido que tocas fondo  cuando menos te lo esperas ¡Pum! Vuelves a la superficie? Eso me ha pasado infinidad de veces, aunque al principio sientas que todo estará bien llega un punto en el que te darás cuenta que dentro de ti nacerán varias dudas, para luego volver volver a tocar fondo. Y así será este circulo vicioso hasta que decidas salir de ahí.

Déjenme les cuento un poco sobre mí. Mi nombre es Amy Rose, actualmente tengo 20 años, estudió la Universidad en la facultad de artes (aunque me voy más por el teatro) junto a uno de mis mejores amigos Silver. Así como él tengo más amigos en la misma Universidad pero en diferentes facultades.
Todo comenzó un día normal, hice mi rutina de mañana, la cual consistía en bañarme, cambiarme, desayunar, lavarme los dientes, cepillar mi cabello y un poco de maquillaje. Al finalizar me miré en el espejo... Definitivamente había algo que no me gustaba, ¡Claro! ¿Cómo no lo vi? Llevaba puesto una blusa de rayas con un pantalón de cuadros ¡Que tonta! Me cambié la blusa por una totalmente negra, la cual llegaba a la mitad de mi abdomen (obviamente era ajustada) para que dejará resaltar la figura de mi cuerpo, al igual que la blusa el pantalón también era ajustado, por último me dispuse a ponerme mis tenis negros con toques blancos.
Cuando acabé de cambiarme había escuchado el tono de llamada de mi teléfono el cual estaba en mi tocador, supuse que sería Silver quien me estaría llamando para avisar que ha llegado por mi. Si, Silver viene por mi. Desde que su novia lo corto ha estado más tiempo con nosotros e incluso se volvió uno de los mejores alumnos de nuestro grupo.
Tomó mi mochila, agarro mi teléfono, cierro la puerta de mi cuarto y en cuanto salgo de mi casa noto que Silver estaba afuera recargado en su carro esperándome; vestía un pantalón de mezclilla azul marino, junto con una camisa de botones negra de manga larga aunque esta la tiene doblada a la altura de sus codos... Para ser sincera no se veía mal, hacía un perfecto contraste con la camisa, esa camisa fue la prenda con la que lo conocí, cuando me había enamorado de él...

-Buenos días niña- Dijo con una sonrisa mientras abría la puerta del lado del copiloto.
-Buenos días niño- Le contesté mientras iba hacía él para saludarlo, después de eso me dispuse a entrar al carro, seguido de eso se escuchó como cerraba la puerta de mi lado.
-¿Estas lista?- Pregunto mientras se ponía el cinturón, yo sólo asentí con la cabeza, después de eso arrancó y nos fuimos.

Durante el camino ambos íbamos algo incómodos, pues claro, era de esperarse. ¿Cómo podíamos estar como si nada después de que le confesé mi amor por él? 

*FlashBack*
-Dime, ¿Qué querías decirme?- Preguntó mientras me mostraba una sonrisa... Lo estaba haciendo más difícil.
-Silver, te conozco desde hace mucho y sabes lo importante que eres para mí. Lo que trato de decir es que... Silver... Estoy... Enamorada de... Ti- Lo dije, Sentía un peso menos en mi, pero todo se iba borrando cuando miré su expresión.
-Amy... Tu también eres muy importante para mi, pero la verdad no te puedo ver de otra manera que no sea como una amiga- Me rompí cuando dijo aquellas palabras -Sabes que Blaze fue alguien muy especial para mi y honestamente no quiero utilizar tus sentimientos para tapar el dolor que siento  aún, pero tampoco quiero perder tu amistad, ¿Qué te parece si hacemos como que ninguno de los dos dijo nada?- Terminó preguntándome con una sonrisa.
-Si, no te preocupes- Me sentía como una tonta por haberle dicho.
-Te veo mañana, pasaré por ti- Se despidió con una abrazo. Cuando se fue de mi casa me heché a llorar, por un lado estaba triste, pero por el otro estaba alegre por que fue sincero conmigo.
*Fin del FlashBack*

Algo hizo que saliera de mis pensamientos, claro era la puerta del carro del lado del piloto... Ya habíamos llegado a la universidad. Me bajé del carro junto con mi mochila y sin mirarlo solté un suspiro.

-Te veo en el salón, iré a saludar a Rouge- Sólo escuché su típico "hmp" afirmando.

Rouge es mi mejor amiga, ella esta estudiando diseño gráfico, lo sé es algo que alguien como ella lo haga. Iba llegando a su facultad y fue ahí cuando la vi, fue muy fácil reconocerla; llevaba un traje de oberol de mezclilla oscuro, junto con una blusa blanca escotada haciendo que se notaran sus "grandes atributos" que a ella le gustaba presumir y unos tenis blancos. En ese momento caminé rápido hacía donde estaba ella haciendo que casi choqué con alguien, no lo reconocí , lo único que pude ver era algo rojo. Al fin llegue con ella.

-Hola Rouge- Dije saludándola de beso en la mejilla -¿Cómo has estado?
-Hola querida. Bien, gracias- Respondió a mis preguntas -Cariño, te noto algo hinchada de tus ojos, ¿Pasó algo con Silver?- Añadió algo preocupada-
-No te pre...- Me interrumpió, ya lo sabe.
-Amy Rose, no digas que no pasa nada te conozco, dime ¿Qué paso?- Suspiré y le conté con cada detalle lo que me dijo -Cariño... No pasa nada, aún eres joven, ya verás que llegará alguien que te quiera tal como eres.
-Gracias Rouge, aunque realmente creo que debería de enfocarme en mis notas...- Me interrumpe.
-Querida, no cierres las puertas. Eres una chica bastante encantadora como para que alguien no lo note- Después de eso Rouge me abrazo, nos despedimos y quedamos para salir a comer.  

Me dirigí a mi edificio, tenía 10 minutos para llegar. Iba rumbo a la facultad cuando vi algo rojo que había llamado mi atención cuando iba hacía Rouge. Me acerqué y vi que era una pluma negra con detalles rojos, se  veía muy linda, pero tenía que devolverla, así que la guardé y fui hacía mi salón al último piso, fácil, era cosa de nada. Ya me encontraba  fuera de mi salón, iba a entrar cuando oí que alguien grito mi nombre.

-Srita. Amy, que bueno que la veo- El profesor era quién me había llamado -Quería pedirle un favor.
-Si, claro- Acepté con tranquilidad, aunque esta se fue en cuestión de segundos al notar a alguien detrás de él.

CONTINUARA
Es mejor llorar todos los días, ha estar viviendo una mentira por el resto de la vida.


Hola, espero que les haya gustado mucho el primer capítulo. Y espero que me puedan apoyar con este nuevo proyecto. Los quiero mucho, abrazos y besos.

Un Beso En La FrenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora