una llegada y una despedida

Hola,soy una pequeña criatura perdida en el mundo. No sé a dónde puedo ir y adónde no pero sé que tengo que encontrar a alguien y que me ayude. Tengo apenas tres meses y mi madre murió por culpa de un cazador pero es una larga historia y no os quiero aburrir. Estoy en un sitio que parece el fin del mundo, no hay nadie ni nada solo flores  que cada vez se marchitan por culpa de la sequedad. Cuando se hizo de noche vi una luz. Parecía la luz que emite una lampara, me emocioné,y corrí hacia ella con la esperanza de que encontraria a alguien pero tropece con una gran piedra y caí en un foso. Me dolía mucho la pata y fue tal el dolor que me desmaye.
Cuando desperté vi a dos señoras mayores,parecían tener setenta años. Una de ellas no paraba de mirarme fijamente y la otra estaba leyendo y cuando giro la cabeza y me vio despertarme salto de la silla y corrió hacia mi y me abrazó con toda su fuerza. Una le decía a la otra
- porfin despertó tenía ganas de ver sus preciosos ojos.
- No te emociones Berta que creo que lo estás asustando.
Me pareció raro que se llamase Berta tiene cara de Tania pero me preguntaba cómo se llamaba la otra.
- Cariño te lo digo en serio déjalo en el suelo para que ande un poco
- vale
Creo que no hace falta decir que son pareja. Me dejaron en el suelo y cuando intenté andar me dolía la pata de atrás.
- Creo que a este perro le pasa algo no da andando.
- Es cierto mejor vamos al veterinario.

Una de ellas se subió a una moto y la otra me cogió y me metió en un trasportín. Cuando llegamos, había unos moteros, que le decían a la mujer de Berta
- Pero mira quién está aquí la payasa que me debe dinero.
- dejame en paz Emilio que no estoy de humor.
Entonces ese tal Emilio cogió el trasportín y me vio luego lo lanzó contra el suelo pero antes de que me estrellara me cogió Berta y me llevo rápidamente junto al veterinario luego entro su mujer y tenía una marca de bofetada en la cara, entonces, hay es cuando surgieron los problemas. Me dijeron que me había roto la pata y que no se me arreglaría hasta dentro de tres semanas luego nos fuimos otra vez para la granja pero estaban los moteros y pararon la moto y un señor bastante alto pego a mis dueñas y me saco del transportin para meterme en otro más pequeño y llevarme con el. Yo no sabía lo que estaba pasando pero sabía que nunca volvería con ellas. Entramos en un garaje muy viejo y sucio y estaba lleno de perros algunos no tenían orejas o tenían alguna parte del cuerpo dañada entonces me metieron en una jaula y el motero me dijo con voz misteriosa y que daba miedo.
- luego nos veremos.
Se marchó y cuando lo hizo uno de los perros me dijo
- ¿Que haces aquí? eres muy pequeño tienes que salir antes de que vuelva.
- ¿porque que pasa?. Respondía con miedo pero fue demasiado tarde y el motero volvió diciendo con la misma voz.
- Que empiece el espectáculo.
Me agarra de las orejas y antes de meterme en una jaula me pone un bozal. La jaula era diminuta y estaba tapada con un trapo y cuando quito el trapo estaba en una especie de terreno arenoso donde unos humanos apostaban y no sé porque. Luego me quitaron el bozal y entró un perro mucho más grande que yo. Tenía las orejas como si se las hubieran cortado y una gran cicatriz en la espalda. No paraba de decirme perdón y después de la quinta vez que me lo dice le inyectan una substancia azul. Se le ponen los ojos rosados y la baba se transforma en espuma, todo el mundo se puso loco, y empezó a sonar una voz familiar...
                        Continuará...