Jimin había salido de trabajar noche, sólo faltaban treinta minutos para que fueran las diez en punto de la noche, en cada mano, tenía un paquete; uno de arena y otro de comida para gato. A pesar de tener dos gatos, el costeo de la arena y de la comida era barato, no tenía problema en ello.
Antes de cruzar la calle, bajo la mirada al suelo, junto a una llanta de un auto, pudo observar un gato, estaba asustado por los autos que pasaban y los aullidos de los perros de los vecinos. No podía dejarlo ahí, se miraba tan indefenso.
—¿El señor Min Ki quiere comer un trozo de carne?—preguntó Yoongi sosteniendo el trozo por encima de la cabeza del gato—¡Oye Jimin!—giro la mirada a quien había llegado—¿Puedo darle carne?—como respuesta obtuvo un azote de la puerta. Jimin se había regresado a las calles.
—Ven pequeño—le ofreció sus manos. El gatito dudo demasiado en ir hacia él.
Se dio la vuelta y se adentro a una alcantarilla. Jimin suspiró, el gato lo había ignorado.Y no es como sí quisiera tener otro gato, Yoongi lo sacaría con todo y cada gato.
Antes de levantarse, el gato había regresado. Pero para sorpresa de él, venía acompañado de otros tres gatos más; todos bañados de agua sucia.
Está vez, Yoongi lo aventaría junto a todos sus gatos.—Jimin, ¿qué pasa?—al notar un bulto en sus estomago por debajo de su chamarra, a Yoongi casi se le cruza la idea de salir por pañales para el futuro bebé que tendrían—¿Jimin?
—Lo siento mucho Yoongi—el bulto comenzó a moverse extraño y el mayor no dudo ni un segundo en tomar a los dos gatos que se encontraban acostados en el sillón y huir hacia la esquina de la sala
Asustado por lo que se movía dentro de su novio, tomó el palo de escoba que había roto el día anterior; su grandiosa acción de matar a una cucaracha que terminó en desastre.
—Eso que tienes en el estomago no es mi hijo—aclaró tratando de que sus gatos no se resbalaran de sus brazos. Jimin sonrió y se puso en cuclillas para dejar salir al supuesto bebé—¡Jimin, no tendrás a mi hijo aquí!—se quejó mientras zangoloteaba a los dos gatos
—Quieres guardar silencio—los maullidos comenzaron, por un segundo, Yoongi sintió desmayarse. Los dos gatos que estaban a su altura del estomago fueron liberados, corrieron para recibir a Jimin y a los nuevos.
Se olían las narices mientras Haru y el gato color gris comenzaban una pelea de juego.
—¿Más gatos?—fue lo único que pregunto Yoongi.
Sí, ahora la familia se había ampliado. Habían seis gatos en lugar de dos.
—Es tu turno de darles un nombre
Y antes de quejarse, comenzó a seleccionar las opciones de nombres en una libreta.
•••
—¡Y ahí estaba yo!—el tío de Yoongi contaba su (al parecer) única historia de cuando fue líder de una banda de música. Todo mundo estaba comiendo, su tío y su primo no eran los únicos invitados, también estaban algunos familiares de la pareja de su madre.
A Yoongi lo único que le importaba era vigilar a Taehyung todo el tiempo. El chico estaba tomando una lata de cerveza mientras le sonreía con una mirada juguetona.
—Muy buena historia tío—interrumpió el rubio—Pero quisiera escuchar como mi mamá conoció al hombre que está sentado aun lado de ella
—Claro, también quisiera escuchar esa historia
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Con 7 gatos
Short StoryMin Yoongi y Park Jimin son una pareja que residen en el centro de Seúl. Era un departamento de dos habitaciones, un baño completo, una cocina, y un recibidor. Ellos tendrían que ir a la lavandería que está en el sótano del edificio. Su departament...