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Caminamos por la acera cogidos de la mano. South Park ya sabia que éramos una patena y ya se habían acostumbrado.
Gracias a Tweek y a craig, que nos habían aplanado el camino para salir del armario. Sentía pena por ellos a veces ya que seguían vendiendo sus cuadros y alabándolos como pareja.

Ayer Wendy se acercó a mi y me confesó que estaba enamorada de bebe, y que me agradecía por todo lo que había hecho. Yo no la entendía bien, pero simplemente acepté sus disculpas y quedamos en paz.

Pasábamos por delante de una guardería y admiramos a los bebés a través del cristal.
Una sonrisa se asomó a nuestros labios. Se veían tan felices las madres y padres recogiendo a sus niños que se trasmitía la alegría hasta nosotros.
Una de las mujeres que trabajaban ahí se nos acercó y se asomó por la puerta hacia fuera.
-¿Dudaís si dejar a vuestro pequeña con nosotros?- pregunto la mujer con una sonrisa.
En seguida entendi que nos quería decir y entre en pánico. Kyle al parecer no la había entendido.
-No! Ósea, solo mirábamos los bebés- dije alarmándole al oír que elevaba mucho el nivel de mi voz.
La mujer nos miró de arriba a abajo y le entró la risa.
-Lo siento muchísimo! Sois sólo unos chavales!- dijo la mujer al darse cuenta de nuestra edad.
Kyle observo a la mujer con una expresión perdida durante unos segundos y sonrió.
-No pasa nada- dijo kyle para mirar a través del cristal. ¿Son gran trabajo?- pregunto mirando a los bebés.

Me lleve una sorpresa al ver que kyle tenía cierto interés por los niños de esta forma. Su hermano pequeño ya no era tan pequeño.
La mujer se acercó a nosotros y los miro a través del cristal.
-A veces- dijo sin quitarle la mirada a los bebés. Pero siempre valdrá la pena- de giro hacia kyle y nos sonrió. Pero todavía os falta mucha vida por delante- kyle se giró y no pude ver su cara.
-Muchas gracias, nos iremos llendo- dije y empeze a caminar hacia dónde iba kyle.
Al llegar a su lado temí que estuviese incómodo sobre la situación y no quisiese hablar. Pero en cambio estaba sonriendo y miraba hacia el cielo.

-¿Crees que somos tan jóvenes?- pregunto.
-Qué...?-
-Nada-

Ella o el (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora