Una tormenta sin ti. [ Pausada ]

Otra vez a la maldita rutina.

Hope

Hace una semana que salimos de fiesta, me quedé a dormir en casa de Javi, y sus padres tan agradecidos como siempre. Hoy lunes hace una semana que tuve que volver a la rutina, y lo último que me apetece es tener que ir a la Universidad, tener que estudiar más y hacer más exámenes, pero es lo que hay, es lo que me ha tocado.

Cuando llego a clase, me siento en mi sitio, en esta clase no me toca con ningún amigo.Cuando pasan las dos horas primera voy ha la siguiente clase.

Hoy he llegado más pronto de lo normal a la tercera hora, así que me toca esperar a Anna y a Diego, ya que en esta clase solo me toca con ellos. Diego se sienta dos sitios delante mía y Anna delante mia.

Cuando llegan Diego y Anna los saludo. Cuando se sientan voy a la mesa de Diego.

–Diego, ¿Qué tal estás?–

–Bien, estas semanas no e venido porque tenía encargos que hacer. Sobre la pelea casi no me dejaron marca pero duele igualmente– Me enseña donde le dieron–

–Lo tienes un poco resentido, en dos días ya no lo tendrás, me alegro de que estés bien y espero que salieran bien los encargos– Le sonrió y me voy a mí sitio mirando en dirección a  Anna y ella se da la vuelta. –

–¿Y tú que tal estas An?–

–Bien, como siempre. Esta tarde quedamos para lo otro ¿no?–

Me quedo pensando en que cosa y al estar un rato me doy cuenta, dentro de poco (no sé si semanas o un mes o dos) será el torneo entre bandas y tendremos que  competir.

–Es verdad, si no quedamos esta tarde será mañana, te voy hablando sobre la marcha– Oigo que nos regañan y me doy la vuelta, me doy cuenta de que ya a llegado la profesora y la digo – Lo siento, ya está, ya he terminado de momento.

Al pasar la lista la profesora escucho un nombre extraño Kirk Morgan, supongo que será alguien nuevo, pero no tengo ni idea, por el nombre parece ser un chico majo y guapo.

Al rato de pasar la lista y empezar a dar clase alguien llama a la puerta, la profesora le permite pasar y él pasa. Esa persona por muy mal que me parezca es el chico con el que me tropezé en la discoteca.

–¿Cómo te llamas chico?– Le pregunta la profesora–

–Kirk, Kirk Morgan–

(Y yo que tenía la esperanza de que fuera majo y guapo y es el chico sin nombre de la discoteca, guapo pero un cascarrabias.)

–¿Sabes que llegas tarde no señorito?– Le pregunta con ironía–

–Perdón, soy nuevo y me perdí por los pasillos– Y con esto concluyó la conversación–

Cuando mira los sitios que hay vacíos solo ve que queda uno y es a mí derecha, cuando se da cuenta de que soy yo quien está a su izquierda sonrríe. Deja la mochila y su estuche en la mesa. Me mira y me pregunta.

–¿Ahora que pasa, me persigues para darme lo que me debes?–

–¿Perdona? Él que me persigue eres tu, llevo una semana en esta Universidad y hoy vienes tú, encima tarde y a tercera hora, y me dices que te persigo. Tú sueñas despierto.

–Igualmente me siges debiendo algo– Pongo los ojos blancos sin darme cuenta y el se ríe. Al menos tiene unos preciosos oyuelos que le salen al reírse –

De repente vuelvo al mundo y la profesora vuelve a repetir lo que nos ha dicho.

–Señorita Williams y el nuevo... eh Morgan al aula de castigados la hora restante y la siguiente.–

Me despido de An y la digo que en el recreo la veo donde siempre solíamos quedar en Bachillerato, en las gradas. Cuando salimos de clase voy en dirección al aula de castigados y él persigiendome. Justo un poco antes de llegar al aula me toca al hombro y lo miro, justo entonces me habla.

–¿Sabes acaso que quiero a cambio?–

–No, tampoco me lo has dicho pero no me interesa saberlo, por mucho que me sea fácil dartelo.–

Cuando voy a abrir la puerta del aula espero que al abrir la puerta haya algún profesor o cualquier otro alumno castigado, pero cuando la abro no hay nadie. Maldita yo y mi suerte...

Entramos y me siento en una silla, pero parece ser que no hay más sillas alrededor que se sienta al lado mía. Lo bueno es que estás sillas no son como las de clase, son como silloncitos.

Al ver que no hablo y que estoy en las musarañas se acerca y me da un beso, al principio va despacio, yo reaccionó y no lo paro, al contrario, sigo. Al ver que reaccionó empieza a abrirse paso entre mi lengua, y sabe igual que huele, es maravilloso. Después de estar un rato besándonos me aparto y le pregunto.

–¿Esto es lo que querías a cambio, un beso?–

–No exactamente, pero para empezar me vale.–

–Pero, ¿y si básicamente no quiero darte más? Ya te he dado algo a cambio. ¿Y por qué lo tendría que hacer?–

–Porque yo siempre consigo lo que quiero y porque as respondido a mi beso tú solita.–

Entonces me rindo y hago caso a mí impulso, cierro el aula de castigados con el pestillo me subo a horcajadas en él y le empiezo a besar, todo lo que comenzó con un simple beso acabó por ser un morreo.

Eso era espectacular, como el besa como gime cuando le muerdo el labio, como acaricia mi lengua con la suya pero a la vez me deja loca, como agarra el culo cada vez que hago algo que le vuelve loco, como noto su entrepierna apretada en su vaqueros bajo mi vientre. Pero lo que él no sabe es que me vuelve loca a mi.

Kirk

La semana pasada cuando se tropezó conmigo no pensé que iba a acabar así, cuando se tropezó conmigo y casi se cae por no ser que la cogí, hasta me cabree, solo recuerdo ver una melena color castaño oscuro y una falda blanca. Después cuando se peleó su amigo con Connor y digo que los separara lo hice, no se el porque pero hice caso a mí instinto. Allí ya la vi algo mejor.

Pero cuando menos esperaba verla era sentada en el mueble de mármol de al lado de la puerta del baño. Hiba vestida con una falda blanca, una camiseta de tirantes blanca con escote y unos tacones negros. Iba con el pelo suelto y liso, el pelo le llega hasta casi el culo y iba maquillada sencilla, con una raya y rímel. Cuando la vi no vamos a admitir que me puse cachondo, porque la tía tiene un cuerpo perfecto, no está súper delgada, tiene la suficiente carne, y tienes unas curvas de envidia para todas las mujeres y por último y no lo menos importante es que tiene culo y tetas. Es el estereotipo perfecto.

Cuando hoy fui a clase no esperaba verla, pero cuando la vi era mi hora, encima cuando nos echaron de clase me lo dejaron muy fácil. Hay que decir que ella no me lo a puesto fácil pero podría ponerlo más dificil.

Lo único que no sabe ella es que me vuelve más loco ella a mí, que yo a ella. Eso que hace con su lengua contra la mia y lo que hace con solo tirar un poco del pelo ya me vuelve loco, mas de lo que han logrado muchas chicas en meses lo ha logrado ella en cinco minutos.

Así estuvimos hasta que toco el timbre de recreo y ella se fue con sus amigos. Y no la he vuelto a ver.

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Pd: hay gente que no a leído el capítulo 3 "La fiesta (Parte 1)", os recomiendo que os la leáis porque si no os vais a perder como conoció a Kirk.

Muchos besos ♥️