Capitulo 2.

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—¿Estás seguro de que lo dices Midoriya?

—Sí, ¡No está, desapareció!— Exclamó desesperado.

—¿Buscaste entre tus cosas? tal vez ahí este.

—Y-ya lo hice como cinco veces y no esta, pero yo estaba seguro de que lo deje al lado del tuyo Todoroki-kun, ¿Qué hare? ¿Dónde dormiré?

—Midoriya…

—N-no creo que alguien lo haya sacado a propósito ¿o sí?.....— Exclamó el pecoso aun sin ponerle atención a Todoroki el cual lo siguió llamando sin éxito alguno.

—Midoriya….

—Pero yo estaba seguro de que lo deje aquí, tal vez deba decirle a Yaomomo para que me cree uno, si eso are, no es que quiera molestarla pero no se qué hacer y……

—¡Midoriya!— Todoroki no tuvo otro remedio que alzar la voz para llamar la atención del pecoso para que detenga los murmullos constantes que estaba empezando a tener el peliverde, cosa que y lo estaba empezando a marear.

—¿S-si Todoroki-kun? Lo-lo siento mucho es que es algo que no puedo controlar— Nervioso.

—No importa, solo te quería decir que puedes usar mi saco de dormir.

—N-no podría Todoroki-kun es tu saco de dormir yo me las arreglare g-gracias p-pero no te preocupes.

—Yo no tengo problema Midoriya.

—Yo no podría…

—Entiendo, entonces…. ¿Por qué no duermes conmigo?

—¿¡Q-queeeee!?— avergonzado.

—Yaoyorozu debe estar dormida y no deberíamos molestarla, mañana puedes pedirle que haga uno para ti— Explicó.

—E-está bien.

Ambos se metieron en el saco de dormir de Todoroki y se daban la espalada ya que es muy estrecho para dos personas, Midoriya estaba muy avergonzado al tener a Todoroki chocando espalda con él, podía sentir lo cálido que era Shoto.

—B-buenas noches T-Todoroki-kun— Mencionó nervioso.

—Buenas noches, Midoriya— Respondió de igual modo el bicolor.

Y así ambos cayeron el un sueño profundo, sin percatarse de que todo eso estaba siendo planeado por las chicas, las cuales deseaban que su pareja favorita se haga realidad.

Cerca de la laguna:

Un grupo de chicas lideradas por Ochaco se estaban encargando de desaherce del saco de dormir de Deku para que no sea encontrado nunca más por el nombrado.

—Ochaco-chan, no crees que te excediste un poco esta vez— exclamó una arrepentida Tsuyu mientras miraba la pequeña fogata donde se quemaba en saco de dormir.

—Tsuyu-chan, no es para tanto, a esos dos les faltaba un gran empujón, yo solo se lo estoy dando— Sonrió de manera macabra, cosa que asusto un poco a las chicas —Además, le regalarle a Deku-kun un saco de dormir luego del campamento, tal vez en su cumpleaños, le pondré una escusa para que no se de cuenta.

—Estoy segura de que es un delito esconder las cosas de los demás Uraraka-san.

—¿Tú también Momo?, no lo puedo creer, como dije solo le estamos dando un pequeño empujón ¡y ni se te ocurra crearle un saco de dormir nuevo!, porque eso sería una alta traición ¿cierto Mina?— miro a Yaoyorozu como si la quisiera extrangular y luego sonríe de manera dulce.

—Sí, yo estoy de acuerdo con esto, el Tododeku no avanzaran a menos que tomemos cartas en el asunto— Mencionó Ashido adoptando una pose de seriedad.

—Pero si dices que le vas a regalar un saco de dormir, entonces supongo que esta bien— Tsuyu asintió comprensivamente a Yaoyorozu y se dispuso a hablar.

—Solo espero que todo salga bien—Miro los restos de la fogata y se dispuso a hechar agua a los restos para que no se forme un incendio.

—No te preocupes Tsuyu, ¡yo Uraraka Ochaco me encargare de que todo salga bien!, lo prometo— Hagakure y Kyoka simplemente se limitaban a mirar a Ochaco y rogaban porque no se volviera loca.

A las 8:00am el delegado de la clase se encontraba despertando a todos sus compañeros para desayunar, algunos estaban intentando no quedarse dormidos al ser los primeros en despertarse con los gritos de Iida mientras el nombrado despertaba al resto de sus amigos. Ya había despertado a casi todo el mundo solo faltaban Todoroki y Midoriya, al abrir la tienda de sus amigos no podía creer lo que sus ojos veían, Todoroki estaba abrazando a Midoriya dormido profundamente al igual que el pecoso quien se acurrucaba en el pecho del bicolor.

—¡MIDORIYA-KUN, TODOROKI-KUN! ¿¡QUE SE SUPONEN QUE ESTAN HACIENDO!?

Iida grito tan fuertemente que los chicos se despertaron de golpe asustados separándose de golpe, el peliverde no daba más de lo sonrojado que se encontraba, en cambio el bicolor solo tenía un pequeño rubor al saber controlar bien sus emociones.

—E-ehh Iida-kun, ¡¡n-no es lo que crees!!

—Chicos, para hacer este tipo de cosas se debe hacer en un lugar privado y no en un campamento donde se quedaran con sus compañeros de clase, deben pensar con claridad antes de…..— Iida siguió divagando del tema dejando a Izuku más avergonzado de lo que ya se encontraba.

Todoroki opto por tomar cartas en el asunto explicándole a lida él porque el peliverde se durmió con él en su saco de dormir, Tenya tras escuchar la situación, le prometió a Midoriya que ayudaría con la búsqueda de su saco de dormir, les aviso que tenían que ir a desayunar, se disculpo por última vez, salió de la tienda dejando a sus dos amigos cambiarse con un incomodo silencio el cual ninguno se atrevía a romper. Luego de ese vergonzoso momento que pasaron con el de lentes se dirigieron a desayunar, pero como el universo los odia tanto Uraraka pregunto algo que dejo extremadamente nervioso a Midoriya.

—¿Cómo durmieron Todoroki-kun?— preguntó una sonriente Ochaco.

—¿P-por qué lo preguntas Uraraka-san?

—Le pedí a Todoroki que respondiera, Deku-kun— la castaña hablo tan seriamente que asusto a más de la mitad de sus compañeros, dejando a un pecoso muy asustado, lo que nadie sabía es que no quería que su amigo sospechara que ella tuvo la idea de esconder su saco de dormir.

—Uraraka— tras escuchar su nombre salir de los labios de Todoroki, Ochaco le prestó atención —Dormimos bien— tras escuchar eso de Shoto, la castaña volvió a sonreír.

El día transcurrió con tranquilidad exceptuando lo que ocurrió en el desayuno, los chicos inventaron algunos juegos, algunos pasaron el día en la laguna y se encontraron a la hora del almuerzo, Todoroki no sabía cómo declararse al chico pecoso que lo traía en las nubes, incluso por estar pensando en el choco contra Bakugo, el cual después de insultarlo se fue maldiciendo entre dientes, su mente estaba en Izukulandia porque ni siquiera le tomo importancia a Bakugo. El día había transcurrido con total normalidad,  Todoroki pensaba que tan solo le quedaban unos días para declararse, eso lo ponía un poco nervioso ya que no tenía idea de cómo hacerlo y su cabeza estaba hecha un lio, fue entonces que recordó las palabras que su amiga Yaoyorozu le había dicho por teléfono.

Continuara…   

Proyecto Todoroki Donde viven las historias. Descúbrelo ahora