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Decir que su trasero no estaba entumecido después de llevar más de tres horas en esa lata con ruedas era poco, sabía que Kirishima le había dado un buen motivo para irse de "viaje de relajación" como le había llamado, ya que, sabía a ciencia cierta que su mal humor estaba sobrepasando los límites permitidos por sus trabajadores "son unos malditos miedicas" se aseguró a sí mismo, porque vamos él no quería tirarle su café hirviendo a la cara del estúpido Kaminari el ingeniero a cargo de construir el conjunto departamental de Tokio, pero el muy idiota sólo tenía un trabajo el cuál era solo realizar el plano de un cuarto simple, sin muchos detalles, algo sencillo había aclarado su cliente.

Pero no, el idiota se había quedado dormido y a penas llegar a la empresa había realizado el plano de manera rápida resultando un plano mediocre el cual luego debía enviárselo a Bakugo y cuando este lo vio fue enseguida a pedir explicaciones, el afectado aseguró que había hecho su mayor esfuerzo, pero eso no le basto a nuestro gruñón le pareció una excusa barata además que podía notar el rastro de baba que tenía Kaminari en su cara por estar dormido.

-Dime, ¿Qué prefieres para despertar? - le sonrió  de manera"amable" al confundido ingeniero se sorprendió por la pregunta de su jefe, sonriendo aliviado le contesto.

-Creó que un poco de café no estaría mal, Bakugo.

Y así fue como el café que Bakugo llevaba en su mano término en la cara de Kaminari, el afectado quedó sorprendido para luego comenzar a chillar como un bebé mientras Bakugo se regocijaba con el dolor de Kaminari, claro que, su diversión se terminó cuando llego el correcto de Kirishima el cuál corrió a socorrer al victimado de Kaminari levantándolo para llevarle al baño no sin antes decirle que le esperará en la oficina.

Bakugo sin entender que había hecho mal camino sin preocupación hacía la oficina de su mano derecha, al ingresar le recibió la patética decoración de Kirishima consistiendo en diferentes póster y figuras del héroe de la infancia de Kirishima,  Crimson Riot; Bufando por lo bajo se sentó y espero durante unos lentos quince minutos. Al llegar Kirishima le miró enojado pidiéndole explicaciones del porque había hecho eso, Bakugo calmado como nunca le comenzó a relatar todo lo que había sucedido al finalizar miró a kirishima el cual estaba tan molesta al grado de mimetizarse con su cabello rojo y sin preámbulos habló...

-Necesitas un viaje de relajación, amigo- le aseguró para luego afirmar sus brazos en el escritorio dándole una postura más segura- y antes que digas algo –le detuvo antes de siquiera poder abrir la boca- yo me encargaré de tus trabajos pendientes y velaré porque Kaminari no arruine otro trato.

-Sabes que es imposible que me largue, así como si nada, pelos de mierda – le bramó a su amigo- Además, no puedo confiar en ese estúpido...

-Por favor, Bakugo. Sabes que estás peor que nunca con tu humor insufrible.

Bakugo le miró de hito a hito para solo decir.

-No, Kirishima.

Así de simple no lo haría la empresa necesitaba de él para cerrar ese trato tan importante como era el de Tokio, comenzó a levantarse con intención de irse no sin antes escuchar como Kirishima se reía tenso para luego decirle.

-Sabes que no te dejare en paz hasta que lo hagas, Blasty.

Luego de ese día y durante casi un mes Kirishima estuvo detrás de Bakugo interviniendo cada vez que llegaba un nuevo proyecto, planos, etcétera pasarán directamente a él y no a su amigo, sabía perfectamente que Bakugo no soportaría estar en la oficina sin tener nada que hacer y así fue como un día lunes mientras Kirishima estaba leyendo el contrato para un proyecto en Ecuador, Bakugo interrumpió maldiciendo en su oficina.

-Lo lograste, maldito pelos de mierda- le gritó severamente para luego girarse en dirección a la puerta- Iré a ese "viaje de relajación".

Kirishima sonrió tan deslumbrante que podría perfectamente dar luz a todo Nueva York, sin miramientos le respondió.

-Claro amigo, te deseo suerte y vete el tiempo que quieras.

Ahora es cuando llegamos a como nuestro querido Katsuki tiene su trasero entumecido, el estómago vacío y sin tener donde dormir porque ningún hospedaje estaba disponible para poder dejar su preciado bebé, ósea, su vehículo.

Estando ya bastante furioso se recargo en el vehículo intentando buscar por Internet un lugar donde quedarse sin tener resultados alguno comenzó a desesperarse hasta que un leve golpeteo en su hombro le trajo a la realidad, al girarse totalmente enfurecido se encontró con el rostro más singular que jamás había visto, un chico un poco más bajo que él le miraba amablemente, pero confundido pero el sólo podía fijarse en lo hermoso que le parecían los ojos de aquel chico.

- ¿Necesitas algo? -preguntó el hermoso ser delante de él.

Aclarando su voz prosiguió a responder.

- Necesito dónde quedarme, pero este maldito pueblo no tiene ningún hospedaje dónde pueda guardar mi vehículo.

El chico asintió como comprendiendo su aflicción para después decirle.

-Vivo a dos calles de aquí y arriendo una habitación, tengo estacionamiento y obviamente tendrías comida y todos los servicios necesarios para que tu estadía sea de lo mejor- le sonrió levemente alcanzando a ver el destello de esas pequeñas perlas blanquecinas que se encontraban escondida tras sus labios.

Bakugo le miró bien, haciendo un escaneo completo de su cuerpo hasta luego llegar a esos ojos que en tan poco tiempo le tenían el corazón un tanto acelerado, decidió confiar en él.

-No me queda de otra, soy Bakugo Katsuki- dijo alzando su mano para estrecharle la mano al chico-

-Todoroki Shoto, bienvenido a Cold Spring. 



Aquí esta el primer capítulo, gracias por leer <3

Life Saver [BakuTodo] PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora