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DISCLAIMER: capitulo contiene mención sobre violencia física, sólo es un poco

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DISCLAIMER: capitulo contiene mención sobre violencia física, sólo es un poco. Así que pido perdón con anticipación si produce alguna molesta.




Dos días pasaron desde esa salida en donde Bakugo descubrió que estaba cayendo totalmente rendido a los pies de Shoto, tan así, que ya no pensaba en tener que volver a su rutinaria de antes, rechazaba las llamadas de Kirishima con tal de no perderse algún gesto en el rostro de Todoroki queriendo grabarlo tan firmemente en su corazón.

Su estancia en ese pequeño pueblo estaban contados y es que, desde un principio había decidido solo estar fuera una semana y luego volver a la empresa pero...no podía dejar atrás a Shoto, no podía imaginarse una mañana sin ver las mejillas sonrojadas, junto con la adorable pancita y su voz adormecida diciendo un <<Buenos días, Katsuki>> porqué ya se trataban con sus nombres, en tan poco tiempo ambos habían obtenido una confianza absolutamente y es aquí cuando llegamos al "pero" de todo esto, porque el cenizo no había querido por miedo a lastimarlo preguntar que había pasado con el padre de su bebe, además, siempre que intentaba llegar a ese tema Shoto con una sonrisa mil veces fingida comentaba alguna idiotez y salía de la habitación.

Llevándolo este problema al presente, Katsuki estaba cortando algunos troncos en unos más pequeños para el horno a leña que poseía el bicolor y es que hoy habían decidido hacer pan y algo de carne en él. Todo iba bien hasta que un deportivo de un chillón color rojo entro en el camino estacionándose bajo el gran roble que poseía la propiedad, se irguió de su posición quitándose los guantes y dejando el hacha aun lado con los cuales anteriormente estaba cortando.

Del vehículo descendió un hombre calvo de aproximadamente 1,90 de altura con un estilo clásico de algún oficinista de Manhattan y es que, eran fácil de identificar. Cuando el hombre se acerco hasta el pórtico es cuando Bakugo decidió entrar en escena, con el ceño fruncido y cuadrando los hombros fue donde él.

- ¿Te perdiste en el camino? -preguntó en un tono seco y es que, no sabía el porqué, pero le causaba una mala espina terrible.

- ¿Quién eres? Y no es de tu incumbencia, vengo aquí por Shoto y mi hijo.

Ahí fue cuando Bakugo se le vino el mundo encima pero no lo demostró sonriendo hipócritamente, dijo.

-Shoto no está, así que puedes irte a la mierda. -con un tono totalmente venenoso respondió, aunque Shoto si estaba, pero tomando una ducha y sabía que por su actitud reacia a hablar sobre el tema era que entendía que este tipejo era un peso en sus hombros.

- ¿Qué dices? -totalmente contrariado se acerco a él con intenciones de intimidar al cenizo, pero solo logro que el otro con sus 1.80 le mirara sonriendo sádicamente y surtió efecto porque se alejo dos pasos- Soy Yoarashi Inasa, la pareja de Shoto y...

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