Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 9

522 57 0
                                    

Día 7
𝐀𝐝𝐢𝐨𝐬
____________

*POV LEVI*

Me levanté ese día temprano, estaba angustiado, con un sentimiento como si mi estómago se comprimiera hasta hacerme sentir un revoltijo de fluidos y dolor en el pecho. No quise seguir pensando entonces salí de la cama.

Busqué y busqué, en cada lugar, cada cajón, cada rincón y cualquier sitio de la casa donde pudiese estar la carta de Psyche pero no hubo resultado, por más que revisara una y otra vez en los mismos lugares, en los mismos cajones y en los mismos rincones... No encontraba ninguna carta. Siquiera el maletín, como si ella nunca hubiese estado aquí.

La desesperación que tenía se había convertido en dolor ¿Había hecho todo para que terminase así?

—En verdad...la perdí...—Dije mientras me derrumbaba de rodillas, la presión en mi pecho solo se hacía mas grande, dificultándome respirar.

—Levi, sé que duele. Pero debemos terminar esto, no solo por ti o por mí, si no por ellos.—Dijo Hange refiriéndose a los fallecidos, hizo una pausa como si no supiera como proceder. —Ya te recuerdo...— Dijo poniendo su mano sobre mi hombro dándome un abrazo de lado. —Se lo importante que era Psyche para ti, a la vez que se lo mucho que le importabas, ella querría que siguieras adelante, debemos terminar con esto. —Un par de lágrimas escaparon de sus ojos, no había perdido a una amiga, había perdido a una hermana que recién había vuelto a encontrar y no había tenido tiempo de despedirse.

Mi dolor comenzó a convertirse en ira, haciendo que tomara mis cosas y mirase a Hange decidido.
Sin más vacilación, fuimos a la puerta de la cabaña dispuestos a acabar con ellos. La rabia, frustración y enojo que sentía era como si me consumiera, solo quería acabar con todo esto, por su culpa la había perdido, ellos la habían asesinado, y haría que se arrepientan, les haría ver lo que era perder a la gente que te importa una y otra vez.

—Hol- —Armin apareció en la puerta del edificio, estaba demasiado enojado. No lo dejé hablar. Dos golpes aterrizaron en su cara y de una patada lo hice besar el suelo, cuando cayó lo apunté con mi pistola dispuesto a terminar con su vida, su cara solo reflejó terror.

—Levi espera, por favor.

—¿Qué quieres?—dije sin prestar atención a Hange la cual a pesar de todo, parecía aún dispuesta a escucharlos.

—Solo... toma...— Revolvió sus bolsillos con nerviosismo, para luego extender una carta. En ese momento me desorienté de la impresión, la mire por unos segundos rezándole a todos los dioses que en algún momento tuve que venerar en el orfanato que por favor no me hicieran una mala jugada.
La tomé con rapidez, me le quede mirando, un sobre blanco con un sello de color azul el cual tenía el símbolo de un cuervo y debajo decía su nombre, Psyche, estaba perplejo, era suya, lo había logrado.

Hange asintió dándole a entender al rubio que podía irse, salió disparado por el mismo lugar por el que había venido, cojeando del pie que le había pateado.
Sin mas abrí la carta con desesperación, leyendo meticulosamente cada palabra.

"Querido Levi

Deseo tanto mi nombre en tu mente.
Te quise a mi lado desde el día que apareciste como un gatito rabioso en el orfanato.
Te quiero, y te amo.
Con cada latido de mi corazón Levi.
Siempre estaré cuando tú corazón sienta ese vacío devorarte, cuando te sientas solo o cuando no sepas que hacer.

Lucha por mí.
Termina el juego.
Y aunque se que no es fácil, debo pedírtelo,
por favor, Perdónalos.

Te esperaré donde quiera que esté.

Atentamente Psyche."

Sonreí llorando. Ella lo había logrado, estaba bien, o eso quería pensar, aún no se había confirmado el plan, pero no le preste importancia con la esperanza de que este tuviera resultados.
Nos adentramos en el edificio, sin nada planeado, no tenía tiempo para pensar, solo de actuar. Esta pelea se había pospuesto lo suficiente, pero el lugar estaba completamente vacío.

¿Quizá estos habían ido a la cabaña?  Imposible, los habríamos topado, siguen aquí, pensé mientras miraba una silla del comedor.

—Tardaste mucho en darte cuenta.—Dijo Eren en mi oído, se me hizo repugnante, ganándose una patada en la cara y haciéndolo caer. Armin estaba del otro lado siendo apuntado con el arma de Hange.

—Están acabados, no den más lucha, todo será en vano.—Dije con rabia en mis ojos.

—Tienes la razón, supongo que este es el final. Cuida de Psyche. —Dijo Eren con una sonrisa. Puse el dedo en el gatillo, dispuesto a disparar y justo antes de que lo hiciera pude escuchar un susurro tan furtivo que apenas lo había oído.

"Lo siento"

Dijo Eren mientras una lágrima caía a la par de su sonrisa. Disparé viendo cómo su cuerpo se desmoronaba en el suelo con una mirada pacífica, como si todo esto nunca hubiese pasado, eso solo hacía que me doliera más hacer esto.
Armin tomo la boca de el rifle de Hange y la puso en su frente con una sonrisa y sus ojos cerrados, ¿Por qué les daba felicidad morir? Me hacía sentir mal, me dolía, me hacía sentir como un sanguinario, incluso al final esta tortura seguía presente...Pero ellos se lo habían buscado, ¿No?
La sangre exploto por toda la sala, llegando a mis mejillas y dándome ganas de vomitar.

—Bueno...Supongo que este es el adiós...—Dije apuntando con mi pistola mi propio cráneo.

—No por mucho...—Dijo la peli marrón mientras veía caer mi cuerpo con un estallido de sangre. —No por mucho...—Repitió en un susurro con una sonrisa mínima.

𝗦𝗲𝘃𝗲𝗻 𝗱𝗮𝘆𝘀 𝘁𝗼 𝗱𝗶𝗲 | Levi Ackerman x OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora