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-Ana, me cago en tu puta madre- bufó Martel mientras abotonaba su abrigo con prisa

-Deja de quejarte- habló Amaia rodando los ojos con pesadez

Era una fría mañana en La Laguna, el grupo de amigos podía jurar que la sensación térmica era de menos tres grados

Caminaban apresurados por las calles, Amaia iba medio dormida distraída con la pantalla de su móvil, Aitana iba dando pequeños saltitos para entrar en calor, Martel iba cubierta hasta el cuello con un abrigo tres tallas más que la suya y Ana y Roi iban abrazados tratando de traspasarse algo de calor el uno al otro

-¿Es eso?- preguntó Aitana tras un par de minutos andando

-Sí- afirmó Amaia

El grupo se apresuró a entrar en el local, era un sitio moderno con muchas luces y colores llamativos, había una pequeña recepción con sofás, una especie de mostrador y un pasillo a cada lado de este

-Hola- saludó amablemente la chica de la recepción dejando de mirar la pantalla del ordenador para mirarles a ellos

-Hola- se apresuró Ana –Veníamos a apuntarnos a clases de baile- habló con cierto nerviosismo

-¡Genial!- exclamó la chica –Tenéis una semana de prueba, si os gusta y os queréis quedar, dentro de una semana pasáis por aquí y hacemos el papeleo- informó

-Muchas gracias- agradeció la morena sonriente

-¿Qué clase de baile buscabais?- preguntó mientras revisaba unos papeles que seguramente, serían formularios

Ana miró a sus amigos buscando respuestas pero ellos se encogieron de hombros con bastante obviedad

-Bueno.... Es que veníamos a las clases de baile de una amiga... no sé qué baile hace realmente- habló avergonzada

-No pasa nada, dime su nombre y te digo- sonrió la recepcionista del lugar

-Miriam- habló Ana con rapidez, la chica la miró confusa -¿Mimi?- probó así con la esperanza de que la conociesen por su diminutivo y estuviesen en la academia correcta

-¡Ah, Mimi, su clase está a punto de comenzar!- el grupo de amigos se miraron aliviados, estaban en el sitio correcto –Por ese pasillo, en la sala 3- sonrió

-Gracias- hablaron al unísono

-Ana- Martel captó su atención cuando se dirigían a la sala –Tengo curiosidad en ver a esa tía tan cañón-

Ana iba a decir algo pero fue interrumpida por el sonido de la música saliendo de la sala, fue Aitana quién abrió la puerta de la sala adentrándose seguida de sus amigos

Y allí estaba ella, aquella rubia despampanante, abierta de piernas en el suelo, de un salto se puso en pie y comenzó a bailar con unos movimientos tan sensuales como sutiles y excitantes

-Hostia puta- murmuró Martel con la boca abierta

-Dios mío- habló Amaia –Yo no sé si voy a aguantar sin inundar esta sala-

-No mentía- aseguró Ana –Pero es para mí, zorras- habló chasqueando los dedos frente a sus amigas que se habían quedado empanadas mirando a Mimi

-¡Anda! Bienvenidos- exclamó la despampanante rubia al percatarse de la presencia del grupo de amigas –Pasad- les invitó

En ese momento Ana se giró encarando a la rubia y sonriendo pícara

-Qué casualidad- murmuró socarrona

-Ana- mustió Mimi

-Me recuerdas- sonrió la canaria con sorna

-Un poco- habló Mimi cortada

-Bueno, ¿Bailamos o qué? Necesito entrar en calor- se quejó Roi

-Eh, sí, a ver.... Soy Mimi... soy bailarina, vengo de Madrid, donde básicamente he estudiado con coreógrafos en grandes escuelas de baile y bueno... pues... no sé, presentaros si queréis-

-Yo soy Amaia, encantada- se apresuró la chica de cabello castaño empujando a sus amigos en el camino para abrazar a la rubia, que se quedó un poco cortada con su efusividad

-Yo soy Aitana- se presentó la menor del grupo una vez Amaia la había soltado

-Martel- habló esta quitándose el abrigo

-Yo soy Roi- dijo el único chico que en aquella sala se encontraba

-Veo que tienes mucho éxito- se burló Ana viendo la sala vacía, solo estaban ellos

-Sí, bueno... nos ha faltado hacer publicidad- habló Mimi con indiferencia

-Pon una foto tuya en los panfletos y seguro que llenas esto- rio Martel ganándose un codazo en las costillas, nada discreto, por parte de su mejor amiga –Auch- se quejó

-Bueno, pues... vamos a empezar calentando- Mimi obvió el comentario de la canaria y comenzó indicándoles los pasos que debían seguir para el calentamiento

-Creo que simplemente viéndola a ella moverse, ya me caliento- murmuró Ana al oído de Martel y esta rio asintiendo

-Y vamos en leggins... verás que risa cuando hagamos una piscina a causa de lo sexi que es la profe- continuó

-¿Decíais algo?- preguntó la rubia girándose para mirarlas

-No, nada, que hace calor aquí dentro- dijo Ana sin pensar haciendo que Martel riese a carcajadas, la morena al caer en la cuenta de lo que acababa de decir y relacionándolo con su conversación anterior, no pudo evitar reírse también

-Bueno, vamos a lo que nos interesa...- murmuró la rubia dando pie a las explicaciones sobre la coreografía que trabajarían

Y así, entre movimientos torpes y mucha paciencia, Miriam Doblas consiguió que aquel grupo de 5 adolescentes bailase de una manera al menos decente, la coreografía que había preparado

-Joder, verás mañana las agujetas- bufó Martel una vez sonó el último acorde de la melodía

-¿Mañana? Yo ya estoy hoy que no me puedo mover... me he partido como un cigarro- bufó Roi estirándose como podía

-Yo no he dado una... soy horrible...- se lamentaba Aitana

-Pues anda que yo... esto no es lo nuestro...- todos asintieron ante el comentario de Amaia

-Ey- Ana se acercó junto a Mimi, quién recogía sus cosas sonriente -¿Qué tal me has visto? ¿He estado bien?-

-Para ser tu primera clase de baile no has estado nada mal- susurró la rubia con una sonrisa pícara

-Bueno... pues yo quiero mejorar mucho... así que al igual podrías darme clases particulares- se apresuró con valentía

-¿Me estás tirando la caña?- Ana la miró sorprendida ante la pregunta

-¿A caso lo dudas después de que me haya recorrido La Laguna en busca de una escuela de baile para poder asistir a tus clases?- Ana parecía incuso ofendida, a lo que Mimi rio

-¿No crees que eres un poco pequeña para mí?- sonrió agradable siguiéndole el juego

-Dos años de diferencia no son tantos...- Mimi la miró sorprendida, jamás le había dicho su edad y había acertado -Por esa cara diría que he dado en el clavo... 20 añitos... ¿Te crees tan mayor como para no salir con una chica de casi 19?- Ahora estaba acorralada, tenía razón no era tanta la diferencia de edad

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⏰ Última actualización: Jan 12, 2020 ⏰

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