"hogwarts au; Soojin está flechada y es simpática con Shuhua, y Shuhua es en general inteligente y soft, con patinaje sobre hielo en medio de la noche."
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El frío mordía su piel, sus dedos expuestos, enrojecidos por el clima extremo. Incluso dentro del castillo, aún podía ver su aliento cada vez que exhalaba.
Shuhua se aferró a su abrigo con fuerza con sus manos entumecidas mientras sus ojos miraban alrededor del pasillo vacío y oscuro. Había pinturas alrededor de las paredes, la mayoría de las personas dentro de los marcos estaban dormidas o bebiendo sus penas.
La pelinegra sonrió levemente cuando pasó por una gran ventana abierta, el lago negro a la vista. La vista era extraña, ya que el lago parecía siniestro por el hielo ennegrecido que lo cubría y, sin embargo, la nieve que lo rodeaba lo hacía parecer pintoresco y pacífico. Con una mirada curiosa más afuera, la Prefecta de Gryffindor continuó con su patrulla por la noche.
En el camino, Shuhua se encontró con otra Prefecta. Soojin, de Slytherin. Miró a la chica más alta, sus ojos castaños oscuros recorriendo su rostro mientras caminaba hacia ella, con un candelabro encendido en la mano.
Su rostro en blanco iluminado por la pequeña llama en cera, brillando ligeramente. Los ojos sin emociones se encontraron con orbes oscuros y expresivos, y en unos pocos segundos, la Slytherin miró hacia el gran corredor y comenzó a caminar, Shuhua a la zaga.
El silencio se apoderó de la atmósfera, con el viento ocasional que entraba por las ventanas y el suave sonido de pasos provenientes de sus zapatos de cuero. El frío se estaba volviendo helado, entumeciendo su piel aún más cada minuto.
—Tengo uno de repuesto. — Dijo Soojin, sus ojos aún miraban hacia adelante, pero definitivamente podía sentir los ojos de la chica más joven sobre ella.
ー¿Indulto?
ーGuantes.ー La bruja de cabello negro miró sus manos rojas, dudando un poco antes de volver a mirar. Estuvo a punto de responder, pero se detuvo cuando vio las manos enguantadas de Soojin sosteniendo un par de guantes rojos, del mismo color que los de Gryffindor.
Los ojos de Shuhua se entrecerraron, pero los tomó de todos modos y se los puso. Un suspiro de contenido escapó de sus labios rosados cuando el calor inmediatamente consumió sus manos. Era obvio que la Slytherin a su lado usó un hechizo para calentarle los guantes. Hizo que su corazón se hinche.
ーGracias.ー Shuhua murmuró, con una sonrisa en su rostro cuando vio que la cabeza de la mayor asentía un poco.
Soojin luego dobló una esquina, y antes de que la Gryffindor se diera cuenta, la otra Prefecta la empujó contra la pared. Jadeó, la sensación de la mano de la Slytherin en sus caderas envió una ola de calor a sus ya enrojecidas mejillas. Soojin la miró a los ojos, la vela entre las dos chicas era lo único que se encendía en el pasillo oscuro.
