Cap 8.

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En una cabaña alejada de las 5 grandes naciones se encontraba un pelinegro cocinando, tenía un pantalón negro ajustado y sus botas ninjas.

Al terminar el desayuno lo coloco en una bandeja, apreciaba su gran obra maestra.

Con una sonrisa subió las escaleras que lo llevaban a una recamara, donde abrió la puerta, observando a esa persona recostada en la cama

En ese cuarto se encontraba un rubio amamantando a su pequeña y enfrente de la cama estaba un zorro con 9 colas acostado en el suelo.

Te traje el desayuno naru -  dejo la bandeja a un lado en la repisa a lado de la cama

Gracias, madara sama - sonrió nervioso

El zorro gruñó pues el azabache se sentó a lado de naruto, madara sólo lo observó con el sharingan activado

¡Madara sama! -

Si, naru - volteo a ver al rubio desactivando el sharingan

Por favor, no lo hagas - sus ojos brillaban por las lágrimas que deseaba salir, esto a la vista del azabache le causaba dolor en su corazón pero a la vez excitacion, bueno imaginando si esas lágrimas fueran por otra cosa.

Te prometi que me comportaria y eso haré pero tendrás que ponerle correa - señaló al zorro

Yo no soy ningun perro- se levanto dejando ver sus 9 colas alzadas con sus colmillos afuera, decidido a lanzarse contra el azabache.

Madra iba a activar su sharingan, pero sintió como las manos suaves y cálidas del rubio acariciaban sus mejillas.

Suspiro- me tranquilizare, tengo algunos asuntos que arreglar a sí que me voy - le dio un beso en los labio al rubio para después dejar un beso en la cabeza de la bebé - obito se quedará, llamalo por cualquier cosa que necesites

Después de que el azabache saliera del lugar, naruto logró relajarse

Me sigue dando miedo -

Pues es normal, te violo y ahora te secuestro -

Flasback

Naruto, naruto resiste - decía una rubia de ojos miel

El cuerpo de naruto fue envuelto en un chakra rojo, esto exaltó a los presentes, jiraiya vio el sello buscando alguna anomalía, pero todo estaba bien.

No entendía lo que pasaba

El chakra rojo se desvaneció logrando que naruto comenzara a despertar.

No... Nozomi - susurró con mucho esfuerzo.

Se sentía débil, cansado, todo su cuerpo le dolía, pero estaba preocupado por su pequeña.

Está bien, la tienes en tus brazos - Tsunade señaló el lugar donde nozomi se encontraba dormida.

Naruto vio a su pequeña quien dormía en sus brazos acurrucada en su pecho.

Casi te perdemos, - la ojimiel le sonrio con ternura, pero cambió drásticamente su expresión por una de seriedad al igual que los presentes

Una pequeña explosión se dio dentro del cuarto, dejando ver a un azabache de cabellera negra larga, vestía un kimono azul fuerte con el logo de su clan en su espalda

La hija de madara-madara x narutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora