La mea volaita [Yoonmin]

1 - La pelolais

─Así que le dije; mira wachita, si voh no me querí así, chaito no ma', total yo tengo minas haciendo fila

─Yaaa, él po. ─dije riéndome.

─Pero si es verda', hermano

─No si en realida' eso nadie lo discute

─¿Veí? ─subió y bajó las cejas. ─Y me buscan puras minas ricas po broda

─Pero que a ti te gusten to'as es algo muy distinto

─Ya si igual eso yo no lo discuto. ─se rió. ─No entiendo cómo a voh no te gustan las minas, Yoongi

─Nunca he dicho que no me gustan

─Es que no lo pescan. ─se metió el Tae mientras se reía, el Kris igual se rió.

─Voh cállate porque erí entero hueco. O sea, yo soy hueco, pero voh la cagai

─Pero ustedes pololeen po. ─nos dijo el Kris. ─Piensenlo, así no van a estar solitos

─Sale pa' allá, ya empezaste, culiao. ─le mandé una patá' entera fuerte a su silla.

─Oe más cuida'o, casi me botai de la silla

─Ojalá te hubiera botao y te hubierai hecho mierda el hocico, ahí ninguna mina te pescaría y no estaríai acá presumiendo

─Si eso hubiera pasao las minas se hubieran amontona'o pa' cuidarme, así que tampoco es mala idea. Y no es na mi culpa que ustede' no tengan a quién presumir po. Miren, la hueá no e' que ustede' sean feos, sino que no sa'en cómo agarrarse a las minas. O en su caso, a los minos. Cabros, les juro que les daría consejos, pero uste'es sa'en que yo sé de minas no ma', de minos no cacho mucho, pero igual si necesitan algo, acá está su socio pa' darles un consejo, de algo tendrá que servir po wachos

─Yo igual sé dar consejos. ─dijo el Tae.

─Ah, ¿sí? Como cuando me aconsejaste que me pusiera un pañal pa' que no se me parara la tula

─¿Que el Tae te dijo qué? ─dije riéndome. ─Supongo que no lo hiciste

─¡Obvio que no po! Ademá', ¡¿pa qué voy a querer que no se me pare la tula?! El Tae es el único ser humano que da consejos ahueonaos, es tan broca cochi

─¡Ya culiao, no te vuelvo a dar consejos! ─se quejó el Tae.

─Menos mal. ─dijo el Kris.

─Soh tan malagradeci'o. ─entrecerró los ojos.

Sonó el timbre, así que to'os los cabros empezaron a entrar a la sala. Estaba medio cagao 'e sueño porque ayer casi no había dormi'o por estar viendo una película culiá wena, pero igual iba a aguantar to'o el día despierto. Má' encima recién iba a empezar la primera hora.

La profe entró, nos saludó y empezó a hacer clase.

Iba a sacar el cuaderno cuando me di cuenta de que no había trai'o mochila.

Conchetumare...

─Ya, ahora les voy a dictar. ─dijo la profe. ─Min, ¿acaso hoy día vino de visita? Saque su cuaderno y anote. ─me habló.

─Profe, se me quedó la mochila en la casa

─¡¿Cómo se te iba a quedar la mochila!? Por Dios. Andate a inspectoría

─Profe, profe, si la está hueveando, acá tiene el cuaderno. ─le dijo el Kris tirándome un cuaderno suyo.

─¡Wu, cuida ese lenguaje! ─lo retó.