•Capítulo 8•

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Me habia despertado, vaya golpe que me dieron esos malditos...salí de la pesada nieve para ver que aún nevava...que frío...me toqué mi pajarita a ver si estaba mi broche pero...no...

—no...-me lo busqué en mis ropas y nada- no, no, no, no, no...-me detuve al escuchar mi voz difere te pero no le dí mucha importancia, comenzé a buscarlo por la nieve, no estaba...o eso pensaba hasta que vi como algo sobresalía de esta...un pequeño punto rojo, suspiré aliviado para acercarme y sacar el broche...pero era algo pesado como para ser un broche...así que desenterré esa cosa y saqué un micrófono rojo, confundido lo miré y examiné...toqué en donde se situaba el micrófono y este abrió un ojo-

—¡hola maestro! -dijo energético-

—¡wa! -lo tiré lejos de mi- ¿que fue eso? Espera...¿esa es mi voz? ¡¿esa es...mi voz?! -me toque la garganta un porsiacaso me pasaba algo-

—Maestro que malo es...-dijo ese micrófono tras mío, grité para comenzar a correr en círculos seguido del micrófono- ¡espere!

—¡dejame! -me trepé a un árbol aferrándome a una rama-

—maestro, se va a hacer daño,baje de ahí

—¡no! ¡no bajaré hasta que tu te vayas! Cosa del diablo...

—señor, por favor baje...-me desprendió de la rama con poderes...¿telequinéticos? Para tirarme de nuevo a la nieve- mire en primer lugar, gusto en conocerlo, en segundo: ¿esto es lo que busca? -hizo aparecer el broche-

—¡si! -grité agarrando en broche para mirar la foto y calmarme un poco...me levante de nuevo para ponerlo en mi pajarita y ver mi traje, que raro...no tenía puesto esto cuando salí de casería...- este...¿me puedes dar un espejo? -el micrófono obedeció para darme uno, lo tomé y me mire, mi piel pasó a ser gris...mis ojos completamente rojos...cabello rojizo con puntas negras y unas ¿orejas y cuernos? Me las toqué y eran suaves...tenia unos dientes amarillos afilados...y la ropa creo que ya lo dije...me quité un poco una parte de aquella gran saco rojizo sangre para ver una cola de ¿ciervo?...ok...no dije nada más para estrellar mi rostro contra el espejo- ¿¡que demonios soy?!

—tranquilicece amo, solo una pregunta, ¿cual es su nombre?

—Alastor...

—no, no hablo de tu nombre de demonio, algo asi como ¡Cuidado ahí viene...!

—Alastor...

—Aaalastor...wow, me asuste solito, mejor ya vayamonos

—¿pero a donde?, mi cabaña seguramente ha de estar destruida por esos cazadores...espera, ¿por que tengo esta apariencia tan extraña?

—¿encerio no te das cuenta? Este es tu espiritu con el que pasarás en el infierno -¡¿infierno!?- ahí esta tu prueba -comenzó a derretir nieve para ver el cuerpo de Alastor en estado de descomposición...- pero tranquilo, conmigo ahora será todo pan comido, hay que ir lo más rápido posible para que los ángeles no nos encuentren -dijo haciendo un pentagrama abriendo un portal-

—!¿que?! ¡Yo no quiero ir a ese lugar!

—Irás quieras o no -y él micrófono lo empujó hacia el portal que llevaba a un abismo- 1...

—¡No! ¡Espera!

—2...-lo seguia empujando-

—¡Que esperes!

—¡3! -y d eun golpe lo adentró ahí para él tambien entrar-

—¡AAAAAAAH! -mientras caía hasta que cayo sobre un montón de basura- auch...estoy...¡estoy vivo! -tocándose todo el cuerpo- jajaja ¡estoy vi- -se interrumpió a si mismo por que el micrófono cayó en su cabeza dejándolo ido-

"La Promesa" [Charlie X Alastor] [CHARLASTOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora