Cuando te encontré

Capítulo 3 " Flores"

Naruto

Llego a la casa entrando por la puerta tracera, da directo a la cocina. Allí estaba la abuela cocinando algo delicioso, lo podía oler, mi nariz nunca me engaña.

_ Hola abuela- dije tomando una manzana y dándole una enorme mordida.

_ No me digas abuela!- me regaña, me encantaba molestarla un poco, además si tenía edad para serlo, aunque no lo parecía- como te fué en tu primer día?- me preguntó.

_ Pusm bem, q temdigo.

_ Puedes tragar?!, no hables con la boca llena, q mal educado!
_...- trago- perdón jeje, te decía q bien, todos fueron muy amables- sonreí, era verdad, especialmente ella.

_ Hiciste algún amigo?

_ Bueno, pues así como amigos, no tanto, pero si me agradó mucho una persona- dije rescandome la mejilla, sin poder evitar mi nerviosismo.

_ Sabes q estás rojo?- me dijo, me puse más nervioso aún, a ella no podía ocultarle nada, siempre me descubría.

_ Es q es...- miré hacia un lado.

_ Tráela un día y la conozco, si?- me sonrió, y se giró a seguir cocinando- La cena estará lista en una hora pero esperaremos a Jiraiya.

_ Ero Sennin  viene?- pregunté contento.

_ Si

_ Mmmm, por eso te estás esmerando?

_ No fastidies muchacho, anda y báñate, ya empiezas a apestar mi cocina.
_ Como ordenes!!- siempre se pone nerviosa cuando llega mi padrino, a pesar de llevar tantos años de casados, se siguen queriendo mucho.

Subo a mi habitación, tiro mi mochila y voy a darme una ducha rápida, me pongo ropa cómoda.
Busco el lápiz q ella me regaló, todavía recuerdo su expresión cuando Kurama la asustó jajaja, se veía tan tierna.

_ Es realmente linda- dije en voz alta- Hi na ta, hasta su nombre me gusta.

No era un chico de esos q andan coqueteando con todas, de hecho, creo q nunca me gustó nadie realmente, pero a ella, mierda, no me la puedo sacar de la cabeza desde q la ví.
Me siento en mi mesa de dibujo, una hoja blanca y un lápiz 4B, perfectos para un boceto, comencé, intentaba sacar de mi mente su imagen y plasmarla en la hoja. Sus ojos grises, su blanca piel, esos labios tan delineados, su hermoso cabello negro, pero nada.
_ Aahh, esto no sirve- arrugo el papel- de nuevo!

Empiezo otra vez, nada, otra y otra y otra.

_ Maldita sea!!- me recosté en el espaldar de la silla frustrado.
No puedo, no me sale, su rostro es tan perfecto, q dibujarlo con mi nivel es una ofensa. Si tan solo lograra sus ojos, esa mirada tan encantadora. No sé porqué estoy tan ansioso, quizás pienso demasiado en ella.

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Me desperté entusiasmado, me alisto para ir a la escuela y bajo a desayunar deslizándome por la baranda de la escalera.

_ Un día te vas a caer y te golpearás la cabeza, aunque pensándolo bien, tal vez te arregle un poco el golpe- dijo mi padrino.

_ Siempre tan gracioso!- digo con sarcasmo- y la abuela?

_ Sigue durmiendo- se rió- está cansada.

Cómo no va a estarlo si los gritos se oían hasta mi habitación. Tuve q poner algo de música para no escuchar y poder dormir.

_ Desayuna algo rápido, no sé, una fruta o algo- dice.

_ Está bien, oye Ero Sennin, como está la isla?

_ Bien muchacho, pero tus padres dicen q llames más seguido, especialmente Kushina, no paraba de repetirme q te diera el recado.

_ Si, tienen razón, es q me olvido- justifiqué, la verdad es q siempre q llamaba mi madre lloraba pidiéndome q volviera y yo decidí pasar la universidad aquí en Japón, aunque me doliera estar lejos de ellos necesitaba hacer mi vida y agradecía mucho a mis padrinos por dejarme vivir con ellos.

_ No olvidas tu cabeza porque la tienes pegada al cuello muchacho jajaja- se burló de mí y me despeinó un poco- anda apresúrate o llegarás tarde a la escuela.

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En el aula solo habían como mucho cinco alumnos, un chico castaño, Kiva me dijoayer q se llamaba, dos chicas, una rubia y la otra pelirrosa muy bonita. Un chico de cabello largo q charlaba con otro gordo y al final uno trigueño q leía un libro. Ella aún no llegaba. Me siento en mi lugar un poco ansioso mirando hacía la puerta.

_ Oye- una voz q no conozco y me giro para ver quién era- no nos presentamos ayer- me dice el pelinegro q antes leía.

_ Parece q no- sonrio- Yo soy Naruto, pero creo q ya lo sabes, me presenté delante de todos.

_ Si, te ví- dice serio- soy Sasuke Uchiha- me teinde una mano y yo correspondo.

_ Sasuke, por qué no me esperaste? ya van dos días q tengo q caminar sola hasta la escuela- ella había llegado, solprendiendome, pero q era eso de esperar? Me tenso cuando le toca el hombro al pelinegro con total confianza.

_ Es q demoras mucho, no me gusta perder el tiempo- le contesta él, siempre serio.

_ Eres un amargado, cuándo necesitas q te espere siempre lo hago, y tú no puedes hacer lo mismo por mi- ya en este punto me sentía totalmente ignorado e incómodo, miro hacia el frente tratando de disimular mi molestia, esos dos seguían animados la conversación.

Se notaba q eran cercanos, mi pecho se apretó un poco, estaba celoso, lo admito, ese pelinegro era bien parecido y Hinata lo trataba diferente a los demás por lo que pude notar. Quisiera q tuviéramos esa confianza también ella y yo.

_ Buenos días Naruto- me dice Hinata sacándome de mis pensamientos, me obligo a sonreír.
_ Buenos sean para ti también- ella se sienta y yo me armó un poco de valor aprochando q el pelinegro nos había dejado solos- te hice algo para agradecerte por el lápiz q me regalaste- ella me mira con intriga.

_ En serio? No tenías q hacerlo, es una pequeñez- me dijo con una sonrisa dulce- no pude evitar mirarle los labios con deseo, pero no, tengo q pensar en otra cosa.

_ Sin el lápiz no hubiera podido hacer el examen, aunque no escribí mucho- rayos q vergüenza, debí quedar como un tonto, me duermo en clase y encima  ella cree q soy un analfabeto.
Ella solo sigue sonriendo y yo saco el dibujo q hice de mi carpeta, no pude hacer su rostro y aunque así fuera no me atrevería a mostrarselo, en lugar de eso,  bocetee algunas de las flores del jardín de la abuela creyendo q le gustaría.
Ella mira el dibujo solprendida, sé q soy bueno, y estoy acostumbrado a esa reacción, pero viniendo de ella, me alegra muchísimo más.

_ Lo hiciste tú?- me pregunta, yo asiento y me rasco la nuca, cosa q hago para calmar mi ansiedad- es increíble, nunca me habían... digo...en verdad es para mí?- claro q es para tí.

_ Sí, te dije q era para darte las gracias- le contesto.

_ Eres muy talentoso, el dibujo es perfecto, casi puedo sentir la textura de las flores- acarisia la hoja y yo todo rojo del nerviosismo.

_ No es para tanto jajaja- sigo restándole importancia.

_ Muchas gracias Naruto, lo colgaré en mi cuarto- ya estaba eufórico, lo va a colgar!!

Continuará...