EX'S | Imagina con Jimin |

SIETE

Maratón 5/7

-Eso no me importa. A mí me importa que tú estés bien- Dijo tomándome las manos

-Gracias Hoseok. Sonreí débil

-Me hubiese gustado poder hacer algo más, lamento que no pude hacer nada, yo llegue tarde.- Se lamentó

-No importa, igual no es tu culpa, yo debí defenderme.- Informé

-En serio perdón. Yo quería ayudarte pero cuando salí del baño ya todo había sucedido.- Volvió a disculparse

-Hobi, en serio no tienes porque lamentar nada, solo olvidemos lo sucedido hoy ¿Si?- Suplique sollozando

-¿Puedo llevarlas a casa?- Pidió

-Si, gracias. Por cierto me llamo Hwasa.- Saludó

-Oh, lo siento, soy Hoseok. Devolvió el saludo y partimos a casa.

Narra Jimin:

Después de la escenita que se había armado Seulgi, por un momento me sentí mal, cuando tn me miró con esos ojos llenos de dolor me sentí la peor persona del mundo, por eso quite mi mirada de la suya, si seguía viéndola así todo mi plan se iría a la mierda junto con mi reputación.

Cuando la ví salir por aquella puerta quince seguirla pero no pude, tenía los ojos de todos encima, solo me aleje y metí al baño, después de un rato salí y me fui directo a la puerta trasera, corrí para alcanzar a tn y entonces la vi ahí en medio de la calle destrozada, me dolió el pecho, iba a ir con ella pero ví salir a Hoseok llendo con ella, así que solo me di la vuelta y regrese a la fiesta.

Narra tn:

Creí que sería una noche buena pero todo salió mal, en verdad creí que podía olvidarme de todo por un momento pero solo se fue a la mierda, y todo por un maldito rumor sin sentido. Pero como no creerlo si el mismísimo Park Jimin lo había dicho.

-Maldito idiota. ¡Te odio Park Jimin, Te odio!- Grité con coraje mientras volvía a llorar.

Esa noche fue larga, me la pasé llorando toda la noche, los recuerdos invadían mi mente. Pero ¿Que puedo hacer? El corazón duele y se deshace, quisiera remontar está tristeza volar alto para poder escapar de esto que siento. Porque aunque quiero odiar a Jimin no puedo hacerlo, porque mi corazón aún le pertenece. Solamente él vive en mi corazón solo que ahora se convirtió en lluvia que cae a través de mis lágrimas interminables.

Al día siguiente...

Me desperté por la luz del sol que atravesaba mi ventana, mire el reloj las 10:17 am. Me levanté y desmaquille mi rostro pues ni siquiera recuerdo cuando me quedé dormida, saque ropa para cambiarme después de darme una ducha de 30 minutos, necesitaba una larga ducha.

Mientras preparaba el desayuno y esperaba a que Hwasa llegará tocaron el timbre, creí que sería Hwasa pues siempre olvida sus llaves, abrí la puerta pero no era ella.

-¡Oh! ¡Tn!, ¿Vives con Hwasa?- Pregunto sorprendido

-Si, ¿Quieres pasar?- Ofrecí

-No, gracias. Yo venía a dejarle esto a Hwasa- Dijo señalando un abrigo, mi abrigo. -Lo dejaste cuando te fuiste- Informó entregandomelo