Una Dionaea apodada Paul

El Dibujo de Will

Las imágenes eran borrosas, las voces eran zumbidos y el movimiento un poco brusco le reconfortaba, estaba agotado y su cuerpo seguía adolorido. Su cabeza comenzó a ladearse hacia la izquierda, el hombre corpulento sentado a su lado en el autobús movió el hombro empujándolo. Will parpadeo e intento mantener los ojos abiertos, pero prontamente el sueño volvía a apoderarse de el, y su cabeza volvía a ladearse hacia la izquierda recostándose en el hombre que molesto repitió el acto anterior.

Sentado en un autobús, rumbo a un lugar incierto, tenía un revoltijo en lugar de pensamientos, provocándose dolorosas punzadas en las cienes y ganas de vomitar.

El sheriff le había ordenado subirse al autobús. ¿Sabría ya su padre que estaba escapando? No tardaría en aparecer y bajarlo tomado por los cabellos.

"No te duermas, no te duermas, va a golpearte si te le recuestas otra vez".

No te duermas...

La imagen del Sheriff Harris intentando darle de beber agua a la fuerza en el baño publico de la estación donde lo dejo hace unas horas.

No te duermas...

Se ve a si mismo escondido debajo de la cama y la cara roja de su padre furioso intentando sacarlo de ahí, su mano era como una garra intentando alcanzarle.

No te duermas... Will...

La voz agradable llego por fin entre sus recuerdos turbios.

Si vas a dormir, hazlo en tu cama no aquí.

Paul...

Susurro entre sueños. Su cabeza estaba inclinada hacia adelante, medio dormido, el sujeto a su lado se levanto fastidiado para cambiarse de asiento. Con el ojo bueno miro en el asiento que ahora debería estar desocupado, pero ahí estaba sentado, palmo su regazo y el se acostó en este complacido.

Paul... estoy tan cansado.

¿Desvelándote otra vez?

Las manos de su hermosa aparición se posaron sobre su cabeza y le acariciaron con suavidad como en aquel entonces.

¿Cómo planeas aprender si cuando vengo solo quieres dormir, pequeño conejito?

Abrió los ojos lentamente. Lo único que vio a primeras fue oscuridad, ya que una de las manos que acariciaba su cabello le había cubierto los ojos. Cuando fue retirada su mirada se clavo directamente con el rostro joven y sonriente que lo mantenía acostado a su regazo. Ya no tenia 16, tenia 10 años y sus sueños lo llevaron esta vez a un bonito recuerdo de hace años cuando aun palpaba su tierna infancia y tenia una figura que representaba la felicidad.

¿Y bien, Seguirás durmiendo "Bunny-Will"?

Will sonrió amplia mente mostrando una dentadura casi adulta en totalidad, aun tenia uno de sus caninos de leche, pero no tardaría en estar flojo y deseaba que esto pasara pronto ya que estaba muy apresurado por crecer y estudiar en el mismo lugar donde lo hacia su tutor, claro no había contemplado la idea de que para cuando fuese su turno, el ya no estaría estudiando en esa universidad, pero Will guardaba así sus sueños de un futuro brillante como dibujante.

Este le dio unos empujoncitos para que se levantara y volviera a tomar su libreta de dibujo.

Creo que ya hemos descansado lo suficiente, ahora, déjame ver que tanto haz avanzado con ese tazón.

Se refería al tazón de frutas de cera que estaba sobre una mesa y con la que practicaban.

Will apretó la libreta a su pecho.