Jihyo pov
Estaba nerviosa, pensé en dejar rápidamente el lugar, pero decidí esperar, 10 segundos que parecieron horas pasaron sin respuesta, en ese momento pensé que todo estaba jodido y estaba trabajando, no creo que tendría la valentía suficiente para regresar otra vez, justo antes de girar para irme de ahí la puerta se abrió, y ahí estaba ella con un gorro de los que parecía ser aluminio en su cabeza, sus ojos eran imperdibles y justo me di cuenta de lo hermosa que era si rostro, sip, estoy fechada
-ho..hola- dije muy apenas
-amm hola, en que te puedo ayudar?- respondio con su dulce y hermosa voz
-ehhh tuuu, amm, esteeee- mierda, no que que decir
-tranquila, tomate tu tiempo- respondio y se río, mierda que hermosa es
-emm, tu..., amm- mierda estaba balbuceando otra vez, ya me empezaba a desesperar, mi corazón estaba a mil por hora
-tranquila, puedo esperar, no todos los días una chica linda toca a mi puerta- QUEEE!?!? ME LLAMO LINDA, AHHH!!!, esta bien jihyo, controlarte, mierda estoy sonrojada,
Aclare mi garganta antes de hablar- tu me salvaste y.. quería agradecerte por salvar mi vida- una sonrisa se dibujó en su cara, esa simple sonrisa se sentía tan cálida de solo verla
-wow, realmente nadie me había agradecido por salvarle, llevo 7 años salvando vidas y es la primera vez- se notaba en su voz lo feliz y emocionada que estaba- disculpa como te llamas? Y por cierto, como conseguiste mi dirección?- mierda, ahora que digo?
- pues... ammm-
-no se si tengas tiempo, podríamos hablar a dentro-
-claro!!- respondi entusiasmada
Pase y mire el lindo y acogedor departamento que tenía, no era muy grande pero era lo suficiente para que no te sientas encerrado, además de dos puertas más que asumía que eran el baño y recamara, además de una pequeña cocina, pude notar algunas cajas en la sala junto al televisor y varios reconocimientos sobre la pared
-disculpa un poco el desorden, no esperaba más de una visita, pero me alegro de tenerla- eso.. quisas quiere decir que le gusto?!?!
- no te preocupes-
Nos sentamos en el sofá y pude notar foto sobre una mesa con alguien que me parecía conocoda, solo que no recuerdo de donde, era sana y la otra chica con un lunar bajo la la boca, se veían felices estando abrazadas
- y bueno, generalmente no te dejaría pasar a mi casa, pero tengo una corazonada y por eso te deje pasar, además que aún me debes la respuesta de como llegaste aquí?-
- pues le pregunte al doctor shingdong después de mi accidente pero el me dijo que no podía decirme, por lo que me recomendó la cafetería del señor heechul y le hice un favor y me ayudo dándome esta dirección - respondi apenada
- interesante, hiciste todo eso por mi?- esa pregunta me dejo helada
- pues..- vamos jihyo, improvisa algo bonito y parcialmente cierto- realmente, tenía una mentalidad diferente antes de mi accidente y cuando choque algo me invadió y me dieron ganas de vivir, cosa que no tenía antes, siento que algo en mi cambio, no se como explicarlo, algo cambio para mejor y gracias a ti puedo seguir viva para disfrutar la vida que estaba desperdiciando antes de mi accidente, no se si me explico- realmente ni yo entendí que dije, pero sonaba bien
- creo que te entiendo-
- y quería ver si....- vamos jihyo, puedes hacerlo- te gustaría ir a cenar hoy? Podríamos ir a donde más te guste-
- me encantaría pero tengo que rechazarlo, hoy tengo turno nocturno- mi corazón se frenó casi en seco y sentí como mis mejillas se relajaba de la sonrisa tensa que tenía
- esta bien, no te preocupes- respondi desanimada
- aunque si no tienes nada que hacer mañana en la noche podría aceptar- mi sonrisa volvió a mi rostro en ese momento- no se si te gustaría quedarte a mi maraton de películas? Termina a las 7 por que me tengo que arreglar para ir al trabajo y estrenar mi cabello rubio-
- claro que me encantaria- dije sonriendo- por cierto no pude evitar ver esa foto- dije señalando la de ella con alguien mas- quien es?, digo, si no te molesta-
- no te preocupes, ella se llama chaeyoung, es mi mejor amiga y también mi ex- wow- afortunadamente terminamos en buenos términos, ella es como una planta de fresas, tienes que cuidarla muy bien y estar atenta de ella, pero por mi trabajo no podíamos estar juntas mucho tiempo apesar que vivía aquí, ella trabaja en su galería y yo siendo paramedica llegaba muy cansada, trataba de darle amor pero estaba muy agotada y me dormia- wow, me contó su historia sin pedírselo, creo que confía en mi
Justo después se escucharon unos golpes en la puerta, sana fue a abrir y dejó pasar a quien tocó, conectamos miradas y en ese momento la reconocí inmediatamente, era aquella chica que besé en el club, me tense y ella también - se conocen?- pregunto sana, ella creo que noto mi cara de preocupación esperando que no diga nada solo negó, tomo sus cajas y después de hablar un poco con sana se fue, es ese momento me sentí muy aliviada- discúlpame un momento- ento a una puerta que me pareció ver que era el baño, después de un rato salió con su cabello rubio hermoso que húmedo, como si se lo hubiese lavado, se sentó junto a mi en el sillón y empezamos a mirar películas, ocasionalmente decíamos algo de las películas y el ambiente se sentía agradable, hasta que una alarma sonó
-wow, no me di cuenta de que tan rápido pasa el tiempo, bien dicen que el tiempo vuela cuando la pasas bien, tengo que arreglarme para mi trabajo-
-no te preocupes, mañana nos vemos- respondi sonriente y me acompaño a la puerta, después de intercambiar números baje por las escaleras y cuando salí del complejo me sentí la más feliz del mundo, pare el primer taxi y le di mi dirección para ir a mi casa, estaba muy feliz, bajé la ventana y me apoyé sobre ella a contemplar la escasa luz del sol que quedaba y la iluminación de la ciudad, no podría estar más feliz
