Jihyo pov
Ha pasado un poco más de una semana y mi vida ha mejorado en todo sentido, tengo claro que le gusto a sana pero aún no me atrevo a avanzar, no me lo ha dicho pero ambas sabemos que hay amor entre nosotras, mi empresa se ha disparado con la popularidad de los ice cream rolls, estoy ganando lo que ganaba cuando empecé en la empresa, somi, dahyun y yo empezamos a arreglar el jardín, quitamos las malas hierbas y lavamos la piscina, hoy es sábado, invité a sana a quedarse todo el fin de semana en mi casa ya que el sábado le tocaba el turno de la mañana, el domingo descansa y el lunes entra en la noche, prácticamente tiene todo el fin de semana libre y un poco más, además hoy dahyun y somi conocerían a sana, aunque para ellas es una sorpresa ya que se que saldrán y llegaran anocheciendo cuando sana ya este aquí, estoy saliendo de mi cita con la psicóloga ya que la culpa aún me carcome, pero con las terapias estoy mejorando mucho, compre todo lo necesario para aprovechar la parrilla que recién restaure, compre salchichas, carnes de hamburguesa y algunos cortes de carne, además de un galón de helado y panes, será la cena perfecta, aproveché y compre un cenador para el jardín y algunas series de luces queria decorar un poco al menos para que la noche sea muy linda para las 4, pasé la mañana armando el cenador y poniéndole luces hasta que sonó mi alarma, eran la 1, por lo que fui a bañarme ya que sana saldría a las 2 y tenía que ir a buscarla
Y así dieron las 2 y yo ya estaba ahí y salió con su linda sonrisa y al llegar nos dimos un beso en nuestras mejillas y un abrazo no pudo faltar, subimos a mi auto y pasamos rápidamente a comprar algunas hamburguesas para el almuerzo,
-wow, vives en un lugar muy lindo jihyo- dijo admirando las casas
-llegamos, esta es mi casa- dije mientras estacionaba
-wow, es muy linda-
Entramos a la casa y al estar ya en la sala vi como sana quedo en un shock y yo me altere bastante al ver que su cara estaba estática
-ese sillón- dijo apuntandolo- con el me tropecé y me caí, puedo recordarlo perfectamente- dijo algo conmocionada- osea que tu...- me dijo señalandome y note como una sonrisa se dibujó en su rostro y sus ojos se empezaron a cristalizar, se dirigió hacia mi y me abrazó acercándose a mi oido- gracias, enserio muchas gracias- dijo sin soltarme, yo estaba aún procesando lo que estaba ocurriendo, que hice? Porque me agradece? En ese momento recordé la historia que me contó de como quería ser paramedica, y unos vagos recuerdos llegaron a mi mente de cuando era una niña, pero más importante aún, recordé sus ojos llenos de lágrimas y como fue fuerte al momenton en que la cure, así como ella me curó, nos sentamos en ese sillón y ella se levantó su pantalón hasta la altura de la rodilla mostrándome una pequeña cicatriz- este es de ese día, nunca le puse nombre, pero creo que lo llamaré jihyo- respondió sonriendo- ese nombre nunca lo olvidaré, así como a mi amada perrita Kimi, solo me hubiese gustado darle el último adios- justo en ese momento muchos recuerdos llegaron a mi mente, será acaso la misma Kimi de la que hablamos?
- espera, de casualidad a tu perrita le faltaba la patita delantera izquierda y..-
- la oreja derecha...-
No lo pensé dos veces y fui a la antigua habitación de mis padres donde que ahora era un almacén de recuerdos y busqué mi álbum de fotos de mascotas, una vez lo encontramos bajé rápidamente y empecé a buscar la foto hasta que la encontré y se la mostré a sana
-si... es ella.. y esa misma pequeña fue la que me curo- .
Le tomé la mano, agarré las llaves y nos dirigimos al cementerio de mascotas, sana parecía alucinada mirando al rededor de mi casa, abrí las rejas y la dirigi hasta el lugar donde estaba una lápida con el nombre de Kimi
- aquí está ella- respondió y se arrodilló sin poder creer que de alguna manera la volvió a encontrar, ahora podría despedirse
-mi pequeña Kimi- su voz se empezó a quebrar- te estuve buscando mucho tiempo, no he tenido a nadie más después de ti, siempre fuiste tu, sufri mucho cuando desapareciese sin dejar rastro, pero al menos ahora se que pasaste el resto de tu vida con unas personas maravillosas y disfrutando lo que yo nunca te habría podido dar- en ese momento sus lagrimas empezaron a caer de sus ojos y su voz se quebró totalmente- pero al menos se que ahora estás jugando con mami y papi quienes te extrañaron apesar de que en un principio no te querían, te amaron mucho y también sufrieron cuando te fuiste, ahora debes estar jugando a la pelota con papá o sentada en en regazo de mamá mientras te acaricia y ya debisteste haber conocido al pequeño yuta, pero al menos se donde venir a verte y no dudes que siempre te ame- se levanto y la abracé, ella se limpiaba las lágrimas y una pequeña brisa se sintió, lo que por alguna razón nos hizo sonreír a ambas, en ese momento nos miramos de frente, y nos fuimos acercando, en ese momento todo era paz, no había nada de ruido, el espacio entre nosotras se fue acortando, las midas entre nosotras se cortaron cuando sana cerro los ojos, yo copié su ejemplo y también los cerré, hasta que la distancia entre nosotras se acabó, en el momento justo que nuestros labios se hicieron uno, la brisa se hizo presente haciendo que se sintiera magia en ese momento, perdimos la noción del tiempo, no supimos cuánto tiempo estuvimos así, pero al separarnos vi como su cara transmitía paz, en ese momento sellamos nuestro amor, ese simple beso me demostró que ninguna otra chica se puede comparar con ella, con ella quiero pasar mi vida, ella es mi paramedica
Fin
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