¿Cinderella? 《Ae x Pete》

Capítulo 5

Me mire al espejo por quita vez. Fruncí mi ceño en señal de insatisfacción, nada de lo que tenía en mi closet me quedaba bien.

—Solo déjate eso y ya —Me dijo Can desde mi cama.

—¿Cómo crees? —Pregunte dándome la vuelta —¿Qué tal si no le gusta a..? —

—¿Quién? ¿Ae? —

Sentí mis mejillas calentarse, me aclare la garganta y me di vuelta de nuevo al espejo. ¿Por qué me habría de importar lo que piense ese idiota de mí?

—C-claro que no —Le dije haciéndome una coleta —A mi no me importa si a Ae le gusta o no —

—Aja si claro —Contesto levantándose y caminando hasta quedar junto a mí —Desde que regresaste el sábado de tu cita con él has estado actuando muy extraño —

—Estas loco Phi —

Fui a mi casa tomando mi mochila y metiendo los cuadernos de las materias que tendría este día.

—Vez...ni siquiera te molestaste al decir que tuviste una cita con Ae—

—¡Ya phi! —Dije caminando a la puerta — Llegaremos tarde...y no fue una maldita cita —Añadí saliendo de mi habitación, siendo seguido por él. Tome la copia de la llave del departamento, y ambos salimos. Llegamos a las escaleras, por que justamente hoy se le ocurrió al maldito elevador averiarse. Cuando al fin terminamos de bajar salimos del edificio y vaya sorpresa que me lleve al verlo.

—¿Ae? —

—Hola Dely —Saludo con una linda sonrisa. ¿Qué? ¿Linda? no, no, no. ¿Qué demonios te pasa Pete? Ae no tiene una linda sonrisa que muestra sus perfectas y rosadas encillas. Aish ya deja de pensar en él mejor, mejor concéntrate en otra cosa como...su ojos negros muy bonitos cuando brillan ¡no! Detente mejor no pienses.

—¿Qué haces aquí? —

—Bueno es obvio que no vine por tu amiguito ¿verdad? —Me dijo señalando a Can.

—Ay mira como me duele —Le dijo sarcástico tocando su pecho.

—Pues es una lástima para ti que no tenga tus mismas preferencias...-Ae le sonrió -—Pero créeme que nunca me fijaría en ti...ni en ningún hombre por supuesto —

Por alguna sus palabras me dolieron. Aparte la mirada, y mordí mi labio.

—Yo no estaría tan seguro de eso —

La voz de Can me hizo voltear a verlo, tenía una sonrisa en su rostro y estaba cruzado de brazos. Ae alzo la ceja.

—¿Por qué lo dices? —Pregunto -No soy gay —

—B-bueno —Interrumpí y mire a Ae —Yo me iré con P'Can —

—Pero...eres mí..—

—Te juro que si mencionas esa palabra te dejo sin descendencia para siempre —Amenace apuntándolo con mi dedo.

Ae alzo las manos y se quedo calladito, vaya es la primera vez.

—Idiota —Dije antes de empezar a caminar junto a Can.

—Entonces...—Su voz me hizo voltear—¿Por qué mejor no vienes conmigo? —Pregunto —Te ahorraras la caminata al instituto —

—¿Puede venir? —Señale a Can.

—No —Respondió —Él se puede ir caminando..la invitación en solo para ti—

—Muy bien—

—¿Aceptas? —Pregunto.

—No, idiota —Le dije mirándolo enojado -Prefiero irme mil veces caminando con P'Can, que irme con un idiota como tú —

— Eso le debe doler a tu ego..— Can se acerco a él con una sonrisa divertida — Mira que me prefiera a mi por encima de ti..—Puso una mano en su hombro — Pues suerte para la próxima —Coloco su brazo alrededor de mis hombros, y se despidió con la mano.

Empezamos a caminar, riendo por la cara que había puesto el idiota de Ae.

—Es un completo imbécil..—

—Un imbécil muy caliente hay que aceptarlo —Me dijo encogiéndose de hombros, negué con la cabeza divertido.

Llegamos al instituto, y las primeras horas de clases pasaron súper aburridas y largas. Sinceramente la profesora de Historia ya debería de jubilarse, estuve a punto de quedarme dormido igual que muchos de mis compañeros. Agradecí cuando el timbre de cambio de clases sonó.

—Dios..—Susurre estirándome —Creí que nunca terminaría —Le dije a mi compañero de asiento.

—Si —Me dijo removiéndose nerviosamente en su asiento.

—Oye... ¿estas bien? —Pregunte.

—¿Yo? Ah..si —Contesto mirando a otro lado -¿Puedo pedirte un favor? -

—Claro —

—No me hables —Sus palabras me dejaron confuso. ¿Qué le había hecho para que no quiera que le hable? El primer día estaba muy contento con tenerme de "compañera" y ahora me sale con esto.

—¿Por qué no? —Pregunte un poco enojado y confuso, pero sobretodo enojado.

—No quiero problemas —Me dijo viéndome —Tú eres la novia de Ae...y no quiero tener problemas con él por no obedecer la nueva regla —

—¿Nueva regla? —Pregunte —¿Qué nueva regla? ¿Quién demonios hizo esa regla? —

—Ae ha prohibido que los chicos hablemos contigo...así que por favor ya no me hables —Contesto levantándose y cambiando de asiento.

Ok. ¡Yo lo voy a matar! ¿¡Quién se cree que es para prohibirles que me hablen!? Ese idiota, me las va a pagar; juro que voy a cortarles las bolas y se las voy a meter por la boca.

Me levante de mi asiento y me dirigí a la puerta. Y fui hasta el campo de fútbol, sabía que lo iba a encontrar ahí. Entre llamando la atención de todos los que estaban ahí

—Dely...—Dijo con una sonrisa.

Me acerque a Ae y mi puño fue a su rostro. Llevo su mano a su mejilla y me miro confuso.

—¿Y esto porque fue? —

—¿¡Quien te crees para prohibir que me hablen!? — Pregunte furioso.

—Soy tu novio Dely...y no voy a permitir que alguien que no sea yo esté cerca de ti —

—¡Eres un imbécil! —Le grite golpeándolo en el pecho —Tú no eres nadie! ¡No soy tu maldita novia! Entiéndelo idiota...—Dije para luego golpear su entrepierna —¡No te me vuelvas a acercar imbécil! ¡No me hables de nuevo! —

Salí del campo de futbol, sin importarme los malditos murmullos, ni su voz llamándome. No puedo creer que llegue a pensar que era un poco diferente, pero claro que no. Yo tenía razón era un maldito idiota, descerebrado, tigre salvaje debí dejarlo que se tirara de la maldita azotea.

Soy un tonto, un verdadero tonto. Tenía que pensar con el corazón en lugar que con la cabeza.

—Vez corazón a veces..bueno no, muchas veces no tienes la razón —Dije hablándole a mi corazón —Tenias que salir y...auch —Me queje al sentir como chocaba con alguien.

—Lo siento —Dijo una voz masculina, abrí mis ojos encontrándome con los chocolates de él—¿Estas bien? —

—Si...estoy bien gracias —Dije con una leve sonrisa.

—¿Eres nueva? —

—Bueno llevo una semana aquí —Conteste —¿Y cómo es que no me había fijado en una persona tan bonita como tú? —Pregunto con una sonrisa —Por cierto ¿Cómo te llamas? —

—Me llamo Dely —contesté extendiendo de mi mano.

—Soy Trump—se presentó tomando mi mano —mucho gusto Dely...—