dark place

Sammie

Estacione la camioneta de mi difunto padre entre las malezas, el motor había empezado a apagarse y me ví obligada a hacerlo.
Baje de la camioneta y me dirigí al capot,
El medidor de gasolina estaba bien y no encontraba el problema. Volví a entrar y encendí el motor una vez más... No podía hacerlo funcionar, el motor rugía pero no encendía, volví a intentarlo pero esta vez el rugido vino acompañado de una explosión, había humo saliendo de la parte delantera del auto, carajo. Me dirigí rápidamente hacia el humo y espere a que se disipe para ver el orígen del problema, la batería estaba quemada y sin ella no podría continuar mi viaje... Vi una casa mientras venía hacia aquí tal vez alli haya una batería o al menos un lugar para estar antes de que caiga la noche, una pequeña voz pronunciando mi nombré interrumpió mis pensamientos.

-no encuentro a pollito-Dijo la pequeña Evie mientras hacia un puchero, mi pequeña hermana y mi nueva responsabilidad tenía tan solo 6 años y era lo mas preciado que tenía.
Me dirigí hacia la parte trasera de la camioneta y empezé a buscar a su osito de peluche amarillo con el peculiar nombre de "pollito" bajo una frazada alcanse a ver algo amarillo, estire la mano y le mostré su peluche con una sonrisa, me devolvió la sonrisa y me arranco de las manos el peluche para luego abrazarlo con fuerza y pronunciar un "gracias" agarre su pequeña mochila y coloque su libro de colorear y su cartuchera dentro para luego dársela y agacharme para estar a su altura.

-okey cariño, vamos a tener que caminar hasta una casa que vi por aquí cerca, toma mi mano y todo estará bien-evie asintió con la cabeza y yo coloqueun pequeño beso en su frente, me pare y nos dirigimos en dirección a esa casa de la mano.

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No estaba tan lejos después de todo, la casa era una cabaña bastante pintoresca rodeada por una cerca fácil de saltar y mucha vegetación. Luego de saltar la cerca me dirigí a la puerta principal, obviamente cerrada, y observé por la ventana, parecía estar vacío. Observé la casa y Vi una ventana de las que no tienen postigo en el piso de arriba. Solté la mano de Evie y le ordene que se quedará cerca, me dirigí hacia el cobertizo que había a un costado y para mí sorpresa estaba abierto, al menos tuve una victoria en el día.
Dentro habían botes de pintura, algunos químicos, una podadora, un machete y mi objetivo principal, la escalera, tome el machete lo puse en mi cinturon y agarre la escalera para llevarla con difícultad hacia la ventana que había visto.
Mire a Evie y estaba recolectando unas flores y guardandolas en su mochila.

-Evie quiero que te quedes aquí, voy a entrar a la casa y te abriré desde adentro no te muevas y presta mucha atención.-dije con mirada sería. Ella levantó sus ojitos hacia mi y luego los dirigió hacia la escalera ya colocada para luego asentir con el ceño fruncido como si le hubiera encargado una misión secreta, le sonreí y subí las escaleras con algo de apuro, no me gustaba dejar sola a Evie. Abrí la ventana y entre con cuidado de no caerme observé el oscuro lugar lista para usar mi machete, abrí la puerta y salí de la habitación, la luz abajo era menos escasa así que baje las escaleras sin bajar la guardia. Casi corriendo fui a abrir la puerta, las llaves estaban colgadas al lado de esta.
Apenas abrí la puerta de madera Evie entro con pose de espía y se coloco en mi espalda.
Cerré la puerta y le ordene a Evie que se quedará ahí. Procedí a inspeccionar la casa y buscar el generador de luz. Entre a muchas habitaciónes hasta encontrar lo que parecía ser el garage, dentro de este había una lancha tapada por una lona y al lado estaba la caja de luz. Me dirigí hacia ella y la abri, ví los interruptores hacia abajo y los subí haciendo sonar un pitido acompañado de la luz. Caminé de nuevo hasta donde deje a Evie pero ella no estaba.

-¿Evie?-Dije preocupada y casi gritando mi llamado fue respondído con un gritó que casi me saco el corazón de su lugar.

Corrí hacia la dirección del grito, escaleras arriba, Evie estaba sosteniendo una puerta con fuerza pero está se abrió con brusquedad lanzandola al piso y dejándola más indefensa de lo que ya estaba, una de esas cosas salió de la habitación rugiendo acompañado de los gritos de mi pequeña hermanita, la bestia con forma humana salto hacia ella pero yo le encaje un machetazo en el hombro parando el ataque, Evie salió corriendo y se quedó a un costado a observar en llanto. La bestia me rasguño la cara con fuerza, separé el machete de su hombro con una patada y me prepare para atacarlo de nuevo, pero el fue más rápido, me embistió atravesando mi machete y empujándome hacia atrás, caímos por las escaleras y en la caída me golpee la cabeza con fuerza.

Estaba tirada en el piso a un lado de la ya sin vida bestia, mi cabeza había empezado a sangrar y todo se volvió más oscuro, lo único que podía escuchar eran los gritos de Evie, mis ojos se cerraron.