En mi cumpleaños 14 la madre superiora me regalo algo especial, después de la escuela podía recorrer el pueblo. La verdad no es que fuera un gran pueblo.
Una tarde salí con James J.P,un amigo al qué de verdad admiraba, tenían una enorme casa y lo que mas deseaba una familia.
-Enserio Jace, deberías pensarlo, es muy fácil, solo entregas aquí y aya, y ya tienes una gran cantidad.
-La madre Tania dice que esas cosas dios no las perdona.
-¿De verdad crees en dios? - me cuestionó.
-Vamos - dije accediendo, no me pondría a explicarle mi falta de fé.
Llegamos a una bodega, donde James me conducio hasta la parte trasera.
El señor Brown, parecía muy contento con mi llegada al negocio.
-¿Quien desconfiara de un huérfano?
Al principio empecé con pequeña mercancía, James tenia razón, fue muy fácil hacer dinero, pero por las noches me costaba hacer mis oraciones, la culpa me atacaba en las noches. Después como un método de enmendar mis culpas, done la mayoría de mi dinero al orfanato de forma anónima, lo último que quería era qué la madre Tania me reprochara algo.
Por otro lado, y algo asustado comencé a pagar un terreno en medio de la nada del bosque. Yo sabía que mi tiempo en el orfanato pronto terminaría.
.........
Para cuando cumplí 17 años ya tenía una casa a medio construir, la madre Tania tenia nuevos almacenes, nuevas camas, un jardín con mayor color, y la fachada estaba siendo restaurada.
-Qué dios bendiga a la generosa persona que nos ayuda a solventarnos.
-Amén - encoramos ,todos comemos oyendo la lectura de la madre Eleonor.
Al termino de nuestra cena, la madre se dirige a mi.
-Jace, puedo hablar contigo - avanza por el pasillo y yo la sigo hasta detenerse- como sabes tenemos un alma generosa qué nos está ayudando, pero gracias al señor, hoy a venido la familia Adler, son funda... - le interrumpi.
-Se quienes son, no hace falta. - Sus ojos brillan al mirarme, me va a pedir algo.
-Solo me gustaría que te comportarás como el joven afortunado qué eres-Aquí vamos de nuevo - Eres muy afortunado al poder asistir a esa escuela, no todos aquí tiene esa oportunidad...
-Le prometo que me voy a comportar.
-El sábado, habrá una fiesta en conmemoración a los fundadores de este orfanato, y es muy importante que vistas para la ocasión, iremos a comprarte un traje-suspira - Quiero que te veas como el honorable hijo qué nunca tuve.
Y así de fácil mis barreras se desvanecen, caigo en el dulce enredo de su voz, de sus ojos cálidos, y la rodeo con mis brazos. Suave como el abrazo de una madre.
-Tu eres todo lo que hubiera querido en un hijo, Jace. - me permito soltar unas lagrimas, la abrazo con más fuerza.
Las mentiras duelen cuando las decimos a quienes solo tratan de cuidarnos, la traición, la deshonra...
Esa mujer se a esmerado con la única intención de criarme como es debido. Y yo solo he creado razones para algún día ser una deshonra ante sus ojos.
Dios perdoname porque he pecado...
