Dulce Locura | Dragonball

| Una Noche Fria

La muerte estaba por el lugar y podían sentirlo, el viento soplaba con fuerza, las nubes se tornaban grises y la obscuridad reinaba, parecía que habían hecho enfadar a los dioses.

La muerte era un alma que poseía brillo aun estando en las sombras que se pierden en la obscuridad, también era una sombra como todas las que vagan sin poder descansar pero esta era diferente, había algo que la hacia resaltar entre todas ellas, eran tan parecidas y tan diferentes a su vez, y es que conservaba aun en el fondo esperanza, estando perdida y vagando sin un destino.

Pero la muerte estaría buscando algo en particular o alguien..

Ella se Llevaba consigo todo aquello que le gustara, seria capaz de robarse la felicidad de otra persona como un capricho suyo.

La muerte se sentía tan sola y solo buscaba alguien que le acompañe por la eternidad. Alguien que compartiera tantos pecados como los de ella, siempre vagaba por todos los universos en busca de alguien...con la esperanza de encontrarla.

Entonces de pronto un día encontraría esa alma que no dudo en tomar. Un alma que se conservaba con vida después de las cosas que arrastraba y que el conservaría como una joya

Todas esas alamas vagantes que aun buscan algo en la tierra de los vivos, ellas tienen la oportunidad de tomar vidas como una venganza a lo que les hicieron, pero su venganza traería consecuencias, demonios de el otro mundo metidos en un trance del que nunca más podrán salir, en el que no pueden volver al mundo de los vivos o al de los muertos y están entre esa linea que los divide.

Esa sonrisa que soltó la muerte que llevaba en sus brazos a Cus.. seria la despedida a lo que conocía el ángel.

Mientras Vados sostenía el cuerpo sin vida de su hermana, no quería separarse de ella, y se aferreba a ella con todas sus fuerzas, pero ella ya se había ido, y no había nada que pudiera hacer, llena de impotencia, llena de sentimientos.

Y todo fue por un impulso suicida...

la muerte se había metido en su cabeza, y después de dañarla pensó que ella misma acabaría su trabajo.