Capitulo 4 | ¿Podia ser de ayuda?

125 17 7
                                    

''¿Alguna vez te has enamorado?''

La pregunta que había tomado por sorpresa a Marcarita.


No podía decirle que era a ella a quien amaba, que era a ella a quien le pertenecía, así que fingí una sonrisa.

-No me dirás que estas enamorada.. ¿Verdad?

Vados: N-no, esta fuera de mi alcance..

Dijo con un suspiro, no sabia por que de repente me preguntaba eso, por que me preguntaba eso a mi..

No podía seguir escuchándola, esas palabras me rompían, ella hablaba de Cus todo el tiempo, siempre había sido ella, y yo no pertenecía en esa historia, era solo de ellas dos..

Vados: dime, ¿te has enamorado?

Marcarita: Si preguntas eso de pronto, y yo.. No sabría que decir, solo una vez lo sentí..

Me veía sorprendida, era como si no se esperara esa respuesta de mi, y por unos segundos reímos, disfrutaba estar con ella en ese lugar, eramos solo ella y yo, quería que nunca terminara, perdimos la noción del tiempo, me había perdido en ella, entre su mirada.

Marcarita: Supongo, que ella.. -me miro -esa persona, también tiene miedo de perderte

Vados me miro una vez más para luego envolverme en sus brazos, era un cálido abrazo, que me llenaba de sentimientos, mis mejillas comenzaron a arder, había tanto dentro de mi, no quería separarme de ella nunca más, quería escuchar su corazón latir, pero el mio interrumpía con esos golpes, sentía que de pronto se saldría de mi pecho, era algo que no podía controlar, me sentía avergonzada, pensando que podría escucharlo..

Después de eso ambas entramos a la casa, nos miramos para luego sonreír. Supe que valía la pena luchar por su amor, quería ser egoísta por un momento y pensar que era ella mi felicidad, todo lo que necesitaba para mi estaba ahí, y no podía dejarla ir tan fácilmente.

Fui a mi habitación luego de que ella se fuera a la suya, me tumbe a la cama pensando en lo que había pasado en el jardín, Habíamos hablado toda la tarde, podía hablar con tanta naturalidad, después de todo podía mirarla, y podía hablarle sobre mis sentimientos, tenia suficiente confianza en mi.. junte el suficiente coraje para ir hasta donde estaba ella, y abrí la puerta de golpe.

Marcarita: Vados, no sabía que había una parte tan desagradable muy en el fondo de mi.. -pero hablé muy pronto, cuando abrí los ojos ella no estaba ahí. -¡Maldición!

¿Por que ahora?, ¡¿Por que cuando por fin me había decidido a gritar mi amor por ella!?, ¿Porque?

Siento, que si no lo digo ahora, jamás lo podre decir. ¡Tengo que buscarla, y decirle que es ella y siempre sera esa persona!

Sin pensarlo tanto fui a la habitación de Cus, donde pensé que estaría pero al no encontrarla, empecé a ver su habitación y analizarla, nunca antes había estado dentro, estaba presente su aroma en cada rincón, era cálido y estaba repleto de ellas dos, por un momento aprecie las paredes que escuchaban todo el tiempo sus conversaciones, que sabían sobre sus risas, sus temores y su amor. Cada paso que daba me detenía a apreciar algo a detalle, como los peluches sobre su cama estaban posicionados, cada uno de ellos tenía su lugar, todo estaba perfectamente ordenado, no quería que se diera cuenta de que estuve ahí, pensé que se molestaría si me descubría, por eso me dirigí a la puerta dispuesta a irme lo antes posible, cuando escucho detrás de la puerta que intentan abrir, reconocí de inmediato esas risitas que provenían de fuera.

¿Enserio?, No puede estar pasado me esto... Piensa Marcarita, piensa...

Pude haber salido por la ventana, pude haberme quedado ahí y inventar me una excusa, pero en vez de eso preferí esconderme, quería saber por que estaban molestas, ¿Podía ser de ayuda?

Lo único que vino a mi mente fue correr bajo la cama, no podía dejar que me vieran de lo contrario, se molestaría conmigo, ella no me perdonaría jamás, pero esto esta mal, ¡Basta!, detente, Marcarita..

¿Pero que, cara jo pasa por mi mente, que se supone que estoy haciendo?

Vados se acercaba a Cus y por unos segundos se miraron, sus rostros estaban a casi nada del otro, ellas no decían nada, nadie decía nada, solo había silencio, mientras que un pequeño rubor aparecía en ellas

-Vamos..cariño, ¿aun sigues molesta conmigo? -decia Vados mientras tomaba con ambas manos su rostro -Eres una niña muy traviesa y yo.. -plantaba un beso en los labios de Cus -tenia que darte un castigo.

Ese beso había acabado con los sentimientos de Marcarita 💔

Dulce Locura  | DragonballDonde viven las historias. Descúbrelo ahora