Girls ;; vmin fem!

08

—Amor, voy a llegar unos minutos tarde, perdón. Es que necesito entregar las postulaciones de las becas hoy mismo o sino puede que no quede— Escuchó una cadena de "sí, sí, sí" con "tranquila yo estoy afuera del café de siempre, ahora entro y reservo una mesa. Te amo, suerte" —Está bien, también te amo— Mandó un beso a través del móvil y colgó. Necesitaba dejar los papeles en la ultima de las universidades que iba a postular, y como ella necesitaba beca para no quedar eternamente endeudada, los papeles se multiplicaban, carpetas y carpetas de papeles que Taehyung pensaba que realmente no iban a leer. 

Apenas terminó de hablar con la secretaria del lugar, se fue directo a la parada de buses, debía tomar uno y quedaría solo a una cuadra de donde se encontraba Jimin. Cuando llegó a la cafetería divisó a su novia a través de la ventana del lugar, estaba sentada en una mesa para dos, su mochila sobre la mesa, donde descansaban sus codos. Se había hecho flequillo hace un par de semanas, el cual caía sobre sus ojos al estar mirando algo en su móvil. Rostro apoyado en una de sus manos, haciendo que sus labios se abultaran aun más, brillantes y rosados. Jimin vestía unos pantalones de jean claros y una blusa blanca con dos botones deshechos, mangas remangadas y Taehyung podía jurar que nuca se cansaría de verla. 

Hace unos días Jimin había terminado su primer año de carrera en danza, terminado  un año mas, e iniciado sus vacaciones, Taehyung se decidió a tomar un año sabático con el fin de fue ahorrar dinero para lo materiales que le pedirían en la carrera que siempre había soñado, Bellas Artes.  Al igual que hace una semana habían cumplido dos años y tres meses de noviazgo. Como habían estado completamente abrumadas y ocupadas con los exámenes finales, proyectos y los papeleos, no habían podido celebrar absolutamente nada, por ello habían decidido que hoy iban a tener una cita, de esas que no tenían hace meses. 

Taehyung decidió entrar, ya había hecho esperar a Jimin demasiado.—Corazón, lo lamento— Dijo sentándose frente a ella, la besó cuando Jimin levantó su vista y sonrió hacia ella. 

—Está bien, Tae. A demás ya estas aquí— Dijo sosteniendo la mano de la aludida sobre la mesa. —¿Pudiste entregar todos los papeles?— Preguntó luego de que tomaran su orden.

—Sí, por fin— Respondió sonriendo —Esperemos que me acepten en la que quiero, la puse como principal pero— Hizo una pausa moviendo su cabeza en forma de negación —No tengo idea

Habían solo dos mesas más ocupadas, por tanto las ordenes llegaban bastante rápido —Te fue super bien en el colegio, además— Vio a la chica que había tomado su orden ir en dirección a su mesa con sus ordenes, sonrieron y agradecieron a la chica cuando tuvieron sus ordenes en su mesa— presentaste todos tus trabajos ¿no?— Taehyung asintió tomando un poco de su té —Entonces, lo más probable es que te acepten, todos tus trabajos son sorprendentes y— Añadió comiendo de sus sandwich —Yo te ayudé, fui tu modelo— Guiñó hace Tae, y rieron juntas después de ello.

Luego de comer fueron al parque, como ya era tarde cuando Tae llegó a la cafetería, a mitad del trayecto comenzó a anochecer. 

A mitad del año decidieron irse a vivir juntas a un departamento más pequeño que la casa de Jimin, pero mucho más grande que el anterior departamento de Taehyung. Muchas personas les dijeron que era demasiado pronto para vivir juntas, pero ¿realmente lo era? No es como que se conocían de hace 3 años y luego habían comenzado su relación luego de meses de estar saliendo, ellas eran mejores amigas se conocían de prácticamente toda la vida, conocían la mayoría de sus hábitos, tenían una muy buena comunicación, lo cual Taehyung y Jimin encontraban algo indispensable para el funcionamiento de una relación. así que, a pesar de todas las advertencias ellas tomaron la decisión y ahora tienen un pequeño y cálido hogar juntas. Para sorpresa de ambas, las cosas estaban lleno bastante bien, era obvio que existían cosas que aun no conocían de la otra, pero esa era la gracia de comenzar a vivir juntas. Ver despertar a Jimin con su cabello todo desordenado y un rastro de saliva junto a sus labios, cara hinchada y ojos mas pequeños, era era algo que hacia sentir a Taehyung bendecida, era gracioso y tierno. Dormir con pequeños y tiernos ronquidos de parte de Taehyung, tranquilizaba y hacia reír a Jimin, a pesar de que su novia negara que roncaba. 

Cuando llegaron a su hogar, Jimin pasó directo al baño a lavar su cara y hacer su rutina para luego ponerse cómoda sobre la cama y encender la televisión esperando a Tae que terminara de hacer su rutina e ir a preparar palomitas. 

—Amor— La llamó desde la cocina —¿Qué vamos a ver?— Terminó de servir las palomitas en el tazón y lo ubicó en la bandeja junto a los vasos con té. 

—¿Seguimos con la serie?— Preguntó Jimin cuando la más alta llegó al cuarto.

—Sí, está bien— Se ubicó junto a su novia y
Se echó un puñado de papitas a la boca.

Llevaban la mitad del segundo capítulo cuando Tae se encontró observando a Jimin  —¿Y si nos hacemos mascarillas? Compré unas nuevas y se ven geniales— Le preguntó con una sonrisa poniéndose de rodillas. Jimin dejó de ver la pantalla y sonrió hacia la dirección de Tae cuando la vió correr hacia el baño luego de que le dijera que sí.

—¿Me ayudas?— Pidió Jimin para poder ponerse de manera correcta la mascarilla, recibiendo un beso de parte de Tae cuando terminó. La más alta la quedó mirando con una sonrisa, sus manos delgadas sujetando los costados de la cabeza de Jimin —¿Qué?— Preguntó la más baja.

—Te amo— Respondió en un susurro —Gracias por estar todo este tiempo a mi lado— Y a pesar de todo el tiempo que llevaban juntas, y escuchar te amos constantemente los ojos de Jimin se llenaron de lágrimas y aquel sentimiento de plenitud la llenó nuevamente. Había pasado gran parte de su adolescencia sintiendo que algo le faltaba, siempre tuvo a Tae, pero anteriormente eran solo amigas, luego mejores amigas y luego de meses de noviazgo el sentimiento de plenitud llegó como un balde de agua fría. Cuando Tae le incentivó a comenzar a desarrollar su baile, todas las tardes en que se quedaba hasta altas horas de la noche en la parte de atrás del gimnasio y podía sentir el apoyo de parte de Tae, que le llamaba y dejaba mensajes preguntando y escuchando todo lo que una feliz, preocupada y habladora Jimin tenía para contarle. La llegada de su relación con Tae significó un gran cambio espiritual para Jimin. —Amor, ¿Qué sucede?— Preguntó la más alta cuando se dió cuenta de que la rubia estaba llorando, besando su frente. Sintiéndola negar.

—Nada, es solo que te amo mucho— Dijo dejando que Tae retirara la mascarilla y secara sus lágrimas, observando como se hacia un puchero en las labios contrarios— Haz sido un gran apoyo para mi, siempre incentivándome, estando para mi incluso cuando discutimos y te necesito. Me ayudas a querer ser mejor persona, y por mí, no para gustarte más o para hacerte feliz, sino que por mi— Se señalo —Siento que eres como mi alma gemela— Sollozó. Sintió un pequeño susurro de lo sé lo sé, yo también lo creo, corazón. Mientras la más alta dejaba un beso un su frente. —Lo siento, arruiné una mascarilla nueva— Dijo riéndose.

—No importa, compré más— Respondió Tae. Cuando volvieron a ver la serie  que, por ese pequeño momento sentimental,  había quedado de lado, Jimin tenía nuevamente una mascarilla puesta y reía por alguna cosa que había sucedido en la serie. La luz del cuarto estaba apagada, por lo que la única iluminación que había era la de la televisión. Y al ver cómo esta luz caía sobre el rostro de su mejor amiga, viendo cómo esta reía echándose un puñado de palomitas del tazón del cual se había adueñado, igual que siempre. Taehyung se dio cuenta de que nunca había estado equivocada, ya lo sabía pero teniendo aquella imagen de Jimin, ella podía decir con certeza de que le gustaban las chicas, y estas eran la preciosas, aun más con sus camisas, pijama en el caso de Jimin, de botones. 

Fin.