capitulo 2

37 3 0
                                    


-si Dylan eso fue lo que me paso- le comento a Dylan lo que me sucedió hace unos instantes, que apenas se lo contaba se quedaba con la boca abierta.

-y, ¿no sabes quién te metió el pie?

-no, lo único que sé es que me choque con él y el resto es lo que ya sabes- le digo alzando los hombros mientras pongo mi bolígrafo en mi cuaderno.

-pero te digo quien creo que fue- le digo a Dylan mientras entre cierro los ojos y alzo las cejas.

El asiente y yo le digo

-Pamela- le menciono mientras le toco el hombro seguro de mis palabras.

Pamela Anderson, es la típica chica picada, hija de papi y mami, tiene todo lo que se le da la regalada gana, incluyendo a todos los hombres detrás de ella, aunque valla de quinto grado (bachillerato) parece de más edad, ya que es la chica plástica, senos, culo, abdomen, nariz, y los ojos, si amigos es belleza plástica. Corren rumores que cuando era pequeña era muy fea y que nadie en la guardería la quería por lo fea y por la actitud de arrogante que siempre ha tenido, nadie la soporta excepto sus padres y sus tres amigas: Laura, Vanesa y Emily, las tres o mejor dicho las cuatro zorritas del instituto contándola a ella, es que tiene nombre de ser zorra y una bitch (perra) pero bueno, nadie se mete con ella ya que el papi puede sobornar al director y a ti sancionarte y a ella dejarle el expediente limpio, los padres son: Jackson Anderson, famoso multimillonario empresario, de la marca de autos más famosa del mundo, el Ferrari, así que él es de ese papa que te puede comprar hasta una isla solo para ti (cosa que ya ha hecho con su "hijita") y la mama es: la famosa modelo cuarentona, Blanca Anderson, es muy arrogante igual que su hija, así que todo le tapan a ella y por eso es como vive como una princesa

-Tierra llamando a Amelie-dice agitando su mano enfrente de mi cara.

-perdón- muevo mi cabeza para despertarme.-pero te aseguro que fue ella, ya que yo la vi mientras iba a comprar mi almuerzo y justo cuando estaba pasando por el lado de ella me mete el pie, además no sería raro, a ella le gusta hacerme la vida imposible desde que murieron mis papas- acuesto mi cabeza en mi cuaderno en dirección a la cara de mi amigo.

-yo digo que esta celosa que tu si eres más bonita que ella y que tú eres al natural, y cuando murieron tus papas como quedaste débil aprovecho para empezarte a torturar

-uy si como no yo siendo linda, ¡JA! Eso ni yo me lo creo- tuerzo los ojos y volteo la cara hacia la ventana y poco a poco cierro los ojos.-solo espero no volverme a topar con ese tal Thomas "Rinaldi"- le digo haciendo comillas con el apellido de Thomas.-por qué ya fueron demasiados errores en un solo día, y no quiero pensar en lo que el llegaría a hacerme si le llego a sacar el quicio otra vez- me volteo y lo miro a la cara con ojos llenos de temor.

-aish no creo que sea capaz de pegarte- con expresión que no está de acuerdo mientras espanta un mosco que está en su cara.

Yo me levanto de golpe y él se asusta un poco lo miro con cara de miedo

-si supieras lo que me dijo cuándo me acorralo y antes de irse- le digo con voz temblorosa recordando ese momento.

-¿qué te dijo ese bastardo?- dice con tono enojado mientras se acerca.

-después de decirme lo de que ya no le tenía que sacar el quicio otra vez me dijo, "por qué no quieres que valla al extremo, ¿verdad?"- le digo recordando justo ese momento, me pasa un escalofrío por todo el cuerpo.

-¡¿Qué, QUE?!- exclama enojado, mientras se pasa las manos por la cabeza desordenándose el pelo.

-shhhhh- le digo mirando por todo el salón comprobando si no hay nadie.

SOLO DOS  REGLASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora