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-Gracias por contarme de ese problema querida- Hablo una mujer a través del teléfono, -Pronto me encargaré de ese "pequeño problema".

-Okey, bueno me tengo que ir, me esta esperando para cenar. - Salió del baño y se dirigió al comedor, dónde se esperaba para  cenar.

Todo era muy callado  no se dirigían ni una sola palabra, solo se escuchaban los ecos de los cubiertos chocar con los platos, las respiraciones lentas y los dientes triturando la comida, y así era todos los días hasta que pasaron semanas y esas semanas pasaron meses y esos meses formaron los años.

Ya estaba harta, quería una familia, hijos es lo único de anhelaba pero el contrario no quería.

-Javier - llamo la mujer - ¿Por qué no me has dado hijos? - hizo una voz de tristeza casi al punto de sollozar - Llevamos años casados, todas mis amigas ya tienes 2 hijos o 3, y soy la única que no tiene NADA!.- Exclamó ella ya enojada y alzando la voz hacia su esposo, el solo la miro y volvió la mirada hacia su plato, ella solo decepcionada se dirigió toda su atención hacia el plato de comida que le quedaba.

-Muchas gracias por la cena - dijo seco y se dirigió hacia el sótano, dónde está su preciado baúl, llegando ahí, lo abrió y empezó a ver las fotos que tenía con Mike y todo el grupo, pero solo sus ojos azules se enfocaban en ese castaño de ojos grises que lo tenía loco, después de tanto tiempo sigue enamorado de la misma persona, -Tengo que hacer algo- Musitó para ella no escuchará, -Tengo que encontrarte Mike, tengo que cumplir lo que habíamos prometido hace tiempo Maikel, espero que no sea tarde para ello.-

El azabache cerró el baúl con llave y por un momento lo contempló.

Pasando unos minutos, subió arriba y se encerró en su oficina, como todos los días ya sea que por trabajo o para no tener la mínima conversación con su esposa.

Y bueno que les puedo decir, en estos años siempre era así, nada de comunicación o tan solo un "hola" entre la pareja.

Ella siempre ha Sido de las personas del "¿Que dirán?" El no la culpaba ya que así le plantaron esa idea su familia desde niña, se casó por obligación de sus padres, arreglaron el "feliz matrimonio" junto con la familia de Ela, querían que su nombre estuviera en todos los periódicos, el solo lo hizo por sus padres, para darles el gusto, pero no, el no la amaba, nunca lo hizo, cabe de reconocer que si era una chica amigable y simpática pero su defecto era de que ella dependía mucho de las persona y de sus comentarios.

-Oye chaval, ¿Cómo estás? Hace semanas que no sabemos nada de ti... Espero que estés bien y bueno, que día nos juntamos otra vez todos en el bar de siempre...- era un mensaje de voz por parte del peliazul hacia el azabache, -Luego me pongo de acuerdo con ellos, aunque me sorprende que el con hijos tenga tiempo para bares, típico de Timba-  dejo su teléfono en el escritorio.

Se levantó de la silla y se acomodo en su cama, tenía un viaje de pensamientos y uno de ellos el porque no quiere hijos con Ela y así cayó en brazos de Morfeo lentamente.

El solo tenía una sola razón por la cual no quería formar una familia con su esposa, esa razón era Mike, el amor de su vida.

Bye bye. ✨

Ojos color oceano /MIKELLINO/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora