🕸||La Jaula Del Zoológico||🕸 💮||One-Shot||💮

⚜El Comienzo⚜

"Toda acción tiene su reacción" esa era la frase que el Joven Laiffe tenía en mente.

Habían pasado ya 10 años desde aquél obscuro recuerdo. Suspiro mirando a su alrededor, extrañaba a sus amigos, ahora tenía un trabajo estable... una Esposa digna de la belleza de Afrodita; una bella hija... no sabía cómo un pequeño error desencadenó toda una catástrofe... pero... el aroma a Café lo saco de sus pensamientos...

- ¡¡Papi!! - decía una pequeña - Mami dice que bajes ya.

- En fin ella no debería saber - Susurro para si mismo - ¡¡Ya voy Nena!!

Dicho esto bajo a la cocina, tomo a su esposa por detrás, que lo volvía loco y le dio un suave beso en el cuello.

Ella sólo sonrió y le ofreció Café con unos Macarrones.

- Cariño... - Dijo dudando - No... No crees qué...

- No - Dijo el joven cortando la conversación - Hoy no.

La cena fue muy silenciosa, ellos solo se miraban callados, interrumpiendo los pensamientos del otro mutuamente.

- Mami, hoy en el colegio... saqué una A+ la profesora me dijo que soy muy buena alumna... y... me encontré con Emma, y me pidió que fuera a su casa... - decía la pequeña con sus hermosos ojos ámbar como plato - ¿Puedo ir?.

Alya solo miro a su esposo y le dijo a su hermosa hija.

- Nina, claro que sí... al fin ella es tu mejor amiga, me saludas a sus Padres.

La pequeña solo asintió, abrazó a su Madre y fue a darle un tierno beso en la mejilla a su Padre que estaba muy distante, parecía cómo si su cuerpo estaba ahí, pero su mente estaba divagando en otro lugar distinto.

Nino solo abrazo a la pequeña y la llevó a su habitación para que durmiera, después de obligarle a tomar un baño, a que se cepille los dientes y a que se quedará en su cama; solo sonrió y le apagó la luz.

Mientras Alya recogía la mesa y lavaba los cunchos en el fregadero, Nino dejó en completo silencio el Cuarto de su hija.

- Buenas Noches... Descansa. - Y se fue a la sala donde lo estaba esperando su  esposa.

- Ya se durmió... - Se limitó a decir antes de que Alya se le abalanzara y lo callara con un delicioso y placentero beso.

- Ahora no nos va a interrumpir...- Decía con una voz lasciva - Vamos arriba, compré algo que te puede gustar.

Una tetera o un tomate se quedaban lejos al sonrojo del Moreno, a pesar de llevar 3 años casados esa faceta de su esposa lo llevaba a la gloria, y sabía en que iba a terminar.

- Solo deja le pongo el pasador a la puerta.

Subió y miró a su esposa con un sweter que no dejaba nada a la imaginación. La imagen perfecta y ya sentía cómo algo en su entrepierna empezaba a despertar.

- Tontito... - sonrió de forma ávara - No sabía que esto te pusiera así.

[...]

La tenue luz de la luna, y los gritos desgarradores le hicieron abrir los ojos, su escasa visión le hizo buscar sus anteojos y mirar alrededor.

Su novia completamente tirada en el suelo desmayada, su mejor amigo completamente muerto al igual que su prometida, y una imagen terrorífica que le hizo perder la conciencia...