Tu, Yo & Lo que fuimos

Capitulo III

Sebastián.

Después de diez años ver a este chico, recordar cada lunar de su cara y ver la sorpresa en su rostro al verme nunca pensé que entre tantos diseñadores me tenía que topar con el.

Miro sus ojos abiertos tan sorprendido como yo, solo estamos viendonos uno al otro como dos extraños. 

Se acerca una chica y dice -Señor Moretti el es Sebastián Arango. -Si, Fer lo conozco ¿Que rayos haces aquí? Me dice muy molesto, lo se no por su tono de voz si no porque conozco sus gestos.

-Yo solo vine por un diseño que me están haciendo para una gala, no tenía idea que tú eras el diseñador. -Por favor no me hagas reír, Fernanda me voy, atiende a este señor y que se vaya rápido. -Me mira, me alza una ceja  y se da la media vuelta, me saca una sonrisa porque es como lo recuerdo, con su orgullo y su carácter tan particular.

-Siganme por acá -Dice la chica, pasamos por un pasillo largo y en una oficina de cristal está él sentado viendo hacia la venta, frente a él está un rascacielos enorme y la vista es muy bella.

-Señorita, ¿El señor Moretti no entregará el diseñó? -Digo con curiosidad. 

-No, por lo regular los representantes pasan por aquí y llegan ustedes los artistas a ver bocetos y tomar medidas, son reglas que ponen sus repres. 

-¿Y si yo quisiera que él me entregué y esté presente en el proceso? - tendría que hablar con el señor Moretti y con su representante.

Dejó el saco y una chica me toma las medidas, me muestran un boceto con el diseño, y como lo recuerdo este hombre está lleno de talento.

Cuando la chica se retira para que le aprueben el boceto, me escapó de ahí y me escabulló en la oficina de Noha.

-¿No te es suficiente haberte metido en mi estudio? Si no que ahora vienes a mi oficina ¿Que quieres? - me mira levantando una ceja.

-Quería verte otra vez, comprobar que eras tú. -Ya lo hiciste ahora lárgate. -Por dios está muy molesto y lo entiendo los últimos días fueron muy amargos recuerdos.

-¿Sabes qué hora vivo aquí? -Le digo esperando su respuesta. -No, la verdad no me importa, tengo años que no se nada de ti, desde que me vine de México, tu y tu mundo salieron de mi vida, y así quiero que siga.

- Estás muy molesto conmigo, y te entiendo perfectamente pero quiero que sepas que nunca te olvide, como te dije aquel día tú siempre eres y serás  mi persona especial. -Desde la primera vez que me sincere con el siempre ha sido fácil decirle lo que siento 

-Salgamos, te invito un café.

-No quiero, vete de mi vista no quiero tus palabras románticas ni tus tonterías, el día que tenías que ser una persona valiente y defender lo que sentías te dejaste manipular y me destruyó. -Salio de su oficina con gran estruendo y sus palabras me atravesaron el corazón, tiene razón.

Me voy de ese estudio, y llegó a mi apartamento vacío.

Mi vida cambió desde que me separé de mi familia, mi papá estaba metido en muchos problemas, y quería manejar mi carrera, pero si dejaba que eso pasara me arrastraría junto con el. 

Y mi mamá hace mucho tiempo decidió no saber qué pasaba en mi vida, tardé unos años en darme cuenta del tipo de personas de las que me rodeaba, y  que me alejaron de el.

FlashBack…

Un día en una playa de Cancún…

-Sebastián ¿A dónde vas? No te lleves mi bici.