PETRICOR ★ bbangnyu

II

Era el grandioso primer día de instituto, sonó la maldita alarma que no quería volver a escuchar nunca más en mi vida y simplemente atiné a levantarme al instante para así no perder tiempo en el celular y llegar tarde.

Necesitaba un largo baño para despejar todos mis pensamientos que llenaban cada vez más mi cabeza y odiaba tanto eso, demasiado y no quería llegar malhumorado a la clase de historia; mi materia favorita. Ya listo de mi ducha me vestí e intenté no verme demasiado llamativo pero a la vez bastante lindo, por lo que solo acomodé en mí pantalones negros con roturas en las rodillas y un suéter rojo con negro también, junto a mis botas negras, las cuáles eran lo esencial en cada una de mis tenidas.

La ida hacia el lugar fue tranquilo para mí, fuí escuchando música a cada momento y eso me hacía bastante feliz, me podría quitar la tristeza fácilmente y pensaba que los ritmos, bajos y todo lo que completaba una canción; eran simplemente increíbles y amaba saber que mi futuro era la música, lo que más me podía gustar en el mundo. Pero el color de rosas de eso desaparecía en una milésima de segundos, por todas mis condiciones mentales me era difícil conseguir mi propia confianza y en los demás para mostrar mi talento, aborrecía cada parte de mi y de mis inseguridades, quería hacerlas desaparecer tan rápido como aparecieron.

Después de aquella oleada de sentimientos, logre ver la entrada principal a lo lejos y el cansancio se apodero de mi tan solo observar esa imagen, pero no podía hacer nada más que aceptarlo, era el ciclo de la vida.

Sonó el timbre tan pronto entre por aquella puerta y sin preámbulos corrí hacia el lugar indicado para la unión general del primer día, gracias a eso logre ver a mi mejor amigo y me llené de emoción al verlo, definitivamente era mi persona favorita en todo el mundo. La chillona voz de la directora resonó en el lugar alarmándonos a mi y a Changmin tanto como a cualquiera en el campus haciendo que se  formaran las filas por cada año instantáneamente preparándonos mentalmente para 1 hora llena de advertencias y regaños para lo largo del año, aburrido.

Al escuchar ya que todos los alumnos debían ingresar a su aula, me lancé a la espalda de mi mejor amigo y le golpeo el trasero, tal caballo danzante fuimos juntos al salón, entrando y recibiendo la mirada de todos sin remordimientos que me analizaban a mi y a Changmin sin cuidado, recordando aquellos rumores de ellos dos que yacían fulminantes para cualquier caminante en el instituto.

Aveces nosotros mismos pensábamos, ¿cómo la gente podía pensar esas cosas sobre mi y el? ademas las miradas de asco del 40% ignorante de esa maldita institución eran repugnantes, si bien era mas o menos la minoría y ademas todo era una mentira, una mentira ficciosa que de donde quizás sacaron, del país de las maravillas probablemente.

El silencio reino el lugar ante el golpe de los libros de la profesora en el mesón, la amaba rotundamente, porque no tan solo era su profesora de historia, si no también era su psicóloga y amaba conversar con ella sin problema alguno, aunque su mal genio sea gigante.

La escucho atentamente como de sus labios salia alumno nuevo y la curiosidad, murmureos y desinterés de sus compañeros era increíble, el estaba en los desinteresados pero Ji no, se veía en una emoción exasperante por saber quien era. La profesora volvió a hablar anunciando su nombre: Kim Younghoon.

Ese nombre, algo tenia ese nombre que lo dejaba pensando y eso le provocaba miedo, un miedo gigante pero no indago mas en el tema a causa de su mejor amigo alardeando de lo guapo y refinado que era ese tal Younghoon, vestía lindo, debía admitirlo. Ademas de lo bien que le quedaba esa cadena de cruz adornando su cuello, pero no podía pensar eso, no, no, no. Simplemente no, volver a eso no podía permitirlo, aquellos temblores que recibió cuando le gusto alguien que casi le hacia caer nuevamente, no.

Arregle mi cabello anaranjado con delicadeza, saciando cada mal pensar, también notando que estaba aún ligeramente humedo y recordé los regaños de mi madre ante las cosas humedas. Reí ligeramente y puse mi vista con total atención en la profesora, también apuntando cada cosa necesaria que ella nos hacia saber.

Después de unas dos horas, sonó el timbre comunicando el receso, pero la profesora se adelantó para detener a todos estos cabezas huecas queriendo anunciar algo.

─ Como sabrán, este año se implementaran talleres sociológicos para todos los alumnos entre sus últimos años en la institución, está el taller de danza, ciencias, psicología, nutrición, arte, diseño de vestuario y por ultimo pero no menos importante, música.─  Abrí mis ojos como platos, deleitando cada palabra que ella decía, y sin dudarlo dos veces me acerque a ella siendo el primero en apuntarme, estaba "amando" el regreso a clases solo por eso.

Corrí a buscar a mi mejor amigo, el cual estaba conversando con quien parecía Juyeon, el famoso chico de ultima clase que hacia babear a cada chico y chica, tan cliché.

─ Changmin, Changmin, pequeña cerecita kyu. ─ Hable al llegar y con tan solo mi presencia Juyeon se marcho,"gracias a dios" dije para mis adentros dejándonos solos con mi especial amigo. ─ ¿Que hacían juntos? ─ Puse cara misteriosa y coqueta, viendo su cara nerviosa al instante haciéndome carcajear recibiendo un golpe para nada delicado de su parte.

─ No sé, solo hablábamos, ya estaba aquí cuando llegue. ─ Replico, relajando sus músculos, comenzando a caminar hacia el aula nuevamente a dejar su libro recién sacado de la biblioteca.

─ Me inscribí al taller de música, ¿ya pensaste a cual te inscribirás tu?─ Pregunte curioso, Changmin no era mucho de talleres y cosas relacionadas a que haya gente a su alrededor, pero me sorprendió escucharlo responder sin problema alguno. 

─ Si, me inscribiré al de diseño y te haré ropa colorida para que cambies esos colores aburridos de siempre. ─ Golpee delicadamente su cabeza recibiendo un chillido de su parte, haciéndome sonreír sin cuidado, simplemente: Mi mejor amigo señoras y señores.

Llegamos al aula y solo logre ver un pequeño papel enredado en algo que parecía un listón rojo, en mi asiento y dude en si leerlo o no, pero me guié en la primera opción deslizando en un ligero tirón el listón sacando aquel papel de color café, que se estiraba a medida se zafaba de este.

Hola, lindo. :) 

Ten un bonito día y come saludablemente, estaré viendo eso. 

─ xoxo.

¿Qué?

Me causo gracia y lo arrugue, adentrándolo en el bolsillo de mi pantalón, restandole importancia. Pero, ¿Quién era "xoxo"? debía descubrirlo.

Si, eso debía hacer para cuando vio el chico nuevo entrar al salón mientras el salia.

Debía saber quien era el de la nota y quien era Kim Younghoon.