02

11.1K 1K 248
                                    

—¿Podemos hacer una parada? —Le pregunte una vez que había salido de la escuela

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Podemos hacer una parada? —Le pregunte una vez que había salido de la escuela.

Quería llevarle algo de comer a mi padre, ya que desde que ambos no cocinamos, al menos llevarle algo de nuestro restaurante favorito Nancy's. También porque mi papá siempre se esta quejando de la comida de hospital y como es que el doctor Cullen podía no comer en todo el día.

Mmm sospechoso.

—Por supuesto. —Edward giró estrepitosamente, por suerte ya habia aprendido mi lección, cuando hay un vampiro al volante nunca olvides el cinturón de seguridad.

—Recuerda que tienes a una humana de copiloto. —Bromeé. Edward me sonrió burlón y simplemente aceleró mucho más.

Sólo lo volteé a ver con falso enojo.

—¿Qué es esa expresión? —Se burló mientras acariciaba mi pierna.

—Eh, eh, la vista en frente. —Le dije mientras movía su cabeza para que mirara la carretera y no me viera a mí.

Cuando finalmente llegamos al hospital, llegué a recepción solo para comprobar si es que mi padre está en su descanso.

—Hola, disculpa, ¿El doctor Martin esta en su descanso?

—Sí, al igual que el doctor Cullen, Edward. — Nadie te preguntó, idiota.

Alce una ceja al escuchar a la recepcionista intentar coquetear con mi novio.

Edward simplemente se rió entredientes y tomó mi mano para caminar a la oficina de mi padre.

—¿Desde cuando la recepcionista es tan cercana a ti?

—Llegué aquí hace dos años, y Carlisle trabaja aquí de alguna forma debía aprenderse nuestros nombres.

—Si claro...—Rodé los ojos.

—¿Acaso son celos?

—Tal vez... —Vacilé, pero por suerte llegamos a la oficina de mi padre. Abrí la puerta dramáticamente.

—¡Deja esa horrible ensalada! —Le dije cuando lo vi a punto de llevarse la comida a la boca. —Te traje una hamburguesa grasosa.

—Eres mi salvadora Letha. —Mi padre me sonrió mientras abría el paquete de comida.

—Hola Carlisle. —Saludé al otro doctor quien me recibió con una sonrisa.— De haber sabido que ibas a estar aquí también te hubiese traído una extra grasosa.

—No te preocupes Letha, estoy en una estricta dieta. —Me encogí de hombros restándole importancia.

Nos despedimos de ambos. —Los veo hoy en la noche. —Le dije haciendo referencia al partido de hoy.






☀️☀️☀️






Habíamos ensayado tanto tiempo, todo el equipo estaba completamente emocionado, y mientras estábamos en los vestidores, se podía sentir los nervios del equipo de futbol americano de la escuela.

Rise |Edward Cullen|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora