Lo que el silencio se llevó

Tu olvido

Han pasado varios meses desde la última vez que supe de ti y todavía me encuentro buscando motivos de porqué te alejaste de mi.

Sin razón. 
Sin explicación. 
Sin motivo alguno.

Quiero creer que la única razón por la cual te alejarías sería por miedo.
Por miedo a sufrir.
Por miedo a amar.
Pero sobre todo, por miedo a sentir.

Y sí, por miedo a sentirte perdido con lo nuestro.

Pero creo que al final la que terminó perdida fui yo.
Perdida en ti.
Perdida en lo nuestro.
Y ahora, perdida sin ti.

Hoy que no estás solamente puedo recordar todas esas veces que me decías que te costaba expresar tus sentimientos, que los ocultabas porque era la mejor manera de estar bien.
De sentirte a salvo.

Y quizás por esa razón te alejaste.
Para no sufrir.
Para salvarte.

Pero te olvidaste de salvarme a mi.
Te olvidaste de mi...

"¿Será que me recuerdas?
¿Será que volverás?
Yo aún sigo esperando por ti
Yo aún sigo esperando que vuelvas
Que vengas a salvarme porque yo no puedo"

Ese fue el mensaje que escribí el día que me sentía perdida sin ti y quería que estuvieras conmigo.
Que estuvieras a mi lado.

Pero también fue ese mensaje que nunca te envié por miedo a que no vinieras y que no me salvarás.

En ese momento entendí que de la única persona que necesitaba salvarme era de ti.

Y que la única manera de salvarme era dejándote ir para siempre.
Olvidándome de ti.

Ya han pasado varios días desde que escribí ese mensaje que no te envíe.
Y aquí sigo.
Todavía sigo perdida sin ti.

Y todavía sigo esperando que me salves...