Solo se ama una vez

Epilogo

7 AÑOS DESPUÉS

Siempre me cuestioné si mi decisión de seguir lo que quería y ahora estoy realmente convencida de que cada cosa valió la pena, yo fuí a Nueva York con mi madre y déjenme decirles que fue la mejor decisión. Ashton me odió por un tiempo pero después entendió que era lo que realmente me hacia feliz. Fuí la mejor de mi clase y me gradué con honores de la universidad, trabajé en un hospital muy grande y era feliz allí solo que algo me decía que tenía que volver a Australia.

El viaje de vuelta a Australia he hacía temblar, actualmente sigo en contacto con Ashton y al Igual que él, mi padre también me odió por un tiempo, más que odiarme fue enojo por ser mala persona y no haber hablado con la verdad, pero estamos bien solo que he tenido curiosidad de cómo puede estar pasándola Luke ya que con él no volví hablar en un largo tiempo.
Mi padre me contó que Luke dejó su casa y se fué a vivir a Queensland alejándose de su madre y que conctactó a mi padre (dejando de lado su temor a él) para pedir de su ayuda para conseguir una recomendación de algún psicólogo, por qué al igual que a mí, él desarrolló un problema de ansiedad a causa de su madre. Actualmente mi padre y él siguen en contacto y que está en Australia en estos momentos. Así que me reuniré con él

Me encontré con Luke en un café y ví que no estaba solo, una chica muy linda estaba enfrente de él, no quise interrumpir así que me senté en otra parte. La chica se fué y levanté mi vista del libro que traje conmigo y puede ver a Luke mirándome fijamente.

-¿No vienes a verme Harrison?-

-Casi 9 años y no dejas de ser el mismo Hemmings?- dije entono de burla solo para recordar viejos tiempos

-Sigues estando linda Lea- soltó su comentario cuando me acercaba a él para darle un abrazo

-Sigues siendo rubio Luke- contesté sonrojada tratando de que no se notara

Me soltó del abrazo y me senté dónde la chica había estado antes

-¿Cuánto tiempo estuviste viéndome?- preguntó mientras le daba un sorbo a su café

-Tengo 10 minutos desde que llegué, te ví ocupado y no quise interrumpir-

-Debiste, nosotros quedamos en vernos, ella solo me saludó-

Luke se veía más cambiado pues ya no era el mismo chico de 18 que había pasado mi vida entera, este Luke era más maduro, tenía su cabello más largo y se podía notar un poco de barba.

-Te ves bien Luke- solté sin más

-igual tú- sonrojado me comentó

Esa tarde me la pasé hablando con él, contándonos cosas que habíamos pasado durante estos 7 años que no nos habíamos visto, me contó sobre cómo se reveló ante su madre y que ahora está bien con ella pues ella vió el daño que estaba haciendole a su hijo y lo apoyó, era unas de las razones por las que él había vuelto a Sidney y hablamos de como él sanó completamente y como los dos pudimos vencer la ansiedad, él y yo no éramos diferentes y creo que es lo que más nos unía. Él se miraba bien y yo estaba bien; los dos tenemos las vidas que escogimos y aún que veiamos la felicidad lejana ahora la teníamos, no somos perfectos pero intentamos ser lo que queremos ser sin que nos importe las presiones solo éramos nosotros, no seguimos algún molde, solo éramos nosotros y nuestra felicidad.

-¿Sigues con Ashton?- preguntó sin verme a los ojos, solo jugaba con su taza vacía

-No, cortamos cuando me mudé con Lorena a Nueva York- dije sin más

-¿Tienes planeado casarte?- seguía sin verme

-Claro que sí, no ahora por qué no tengo con quien pero si planeo casarme, descubrí que casarme no arregla mis problemas si no complementa parte de mi felicidad-

-Entonces ¿no tienes con quien casarte?- volteó a verme ahora

-Nop- dije ahora yo sin verlo

-¿No hay estadounidenses guapos?-

-Claro que los hay pero prefiero Australianos-

Los dos nos vimos a los ojos y con una sonrisa, supimos que esos sentimientos que estaban escondidos desde siempre gracias a qué no éramos lo suficientemente maduros para entender era todo mutuo, nos dimos cuenta que solo era cuestión de que teníamos que sanar, cumplir nuestras metas y amarnos a nosotros mismos para darnos cuenta que somos uno para el otro.

Él me sonrió tomando mi mano viéndome fijamente dijo

-Estoy enamorado de tí Harrison y ahora no hay nada que me impida demostrártelo-

Fin.