El Reflejo Misterioso

Parte 2

Había pasado una semana desde que trajeron los espejos a la tienda y todo iba bastante normal, a excepción de Santiago a quien no había día en que su maltratador no golpeara o al menos siguiera hasta mi tienda, Santiago es un chico muy dulce, puedes ver que en su mirada no existe maldad y solo ver ternura, tiene un gran corazón, lastima que eso no le sirva para defenderse de su "bully".

Una tarde mientras continuaba con la traducción del libro que venía junto con los ya mencionados espejos, me di cuenta de que ya tenía traducida, al menos como yo creía, una buena parte que, a como yo lo veía era suficiente para leer y darnos una idea de lo que dice, lo leí en voz alta y decía así:

"Te ordeno yo, oh reflejo que todo lo ves, cambiar esta Alma y  piel en lo que verdaderamente es" 

Lo estuve leyendo y tratando de hacer que sonara coherente, y al parecer lo conseguí, dos hechizos más acompañaban al primero y ambos decían lo mismo:

" A ti traerán almas a aprisionar, sin piedad a todas ellas tragaras"

Estaba fascinada, seguía traduciendo más y más, pero mientras estaba concentrada llego Santiago corriendo más agitado de lo normal y apenas pude preguntar que pasaba cuando el chico que molestaba a mi amigo, su nombre era Sam, entró corriendo tomo a Santiago por el cuello y antes de que pudiera hacer algo lo estrello contra el espejo mas grande, Mina y yo gritamos y cerramos los ojos en un reflejo por protegerlos de los vidrios que sabíamos iban a salir disparados por todas partes, pero después de unos cortos segundos, !NADA! Rápidamente dirigí mi vista y quede petrificada, al igual que las otras dos personas en la habitación, el espejo estaba intacto y de el pude ver como salia una especie de mano, pude ver dedos con uñas largas y puntiagudas color blanco, piel grisácea en la cual las venas moradas resaltaban demasiado, seguido de unos brazos largos y de huesos marcados, comenzó a salir de el espejo lentamente, primero con una mano, seguido de una pierna, cuando asomo el cuerpo estaba agachado pues su altura era tal que erguido no podría salir, el cabello largo y negro cubría su rostro y su cuerpo solo era cubierto por la tela desgarrada que llevaba puesta Santiago... Esa cosa era mi amigo; levanto la cara y nos miro a todos, a pesar de su rostro cambiado debo decir que su mirada seguía ahí, esa mirada tierna y dulce, aunque repentinamente cambio cuando miro a Sam quien lo observaba con pavor, escondido detrás de una columna. Santiago soltó un grito tan aterrador que solo pusimos tapar nuestros oídos, y corrió hacia el, lo tomo con su gran mano de la cabeza y lo arrojo con gran fuerza a uno de los espejos pequeños, el grito de Sam fue tan fuerte que me hizo sentir el temor que el tenia en ese momento, después de un segundo ya no estaba y no había mas rastros de el. Mire a santiago quien ahora se dirija hacia Mina , le grite con todas mis fuerzas que se detuviera y paro en seco, dio media vuelta, me miro y dijo algo en otra lengua, y cayo al suelo; Poco a poco fue desapareciendo esa horrible figura demoníaca dejando en el suelo a mi amigo totalmente inconsciente, en ese momento no tenia idea de que estaba pasando.