Youmu, la espadachin mitad fantasma investigaba un incidente en Gensokyo. Sus manos danzaban mientras sus hombros se giraban con el avanzar de su pie y el doblar de su rodilla. Con el suave sonido de los cortes de la hoja su espada cantaba siguiendo la dirección del danmaku sin fallar una sola bala. Youmu y su hoja se movían como si bailaran al compás de una orquesta al mismo tiempo que la dirigen.Yuyuko exclamó: Qué alegría!, es maravilloso verte blandir la espada con tanta maestría!.
Youmu se detuvo un momento luego de haber derrotado al enemigo.
Todo lo que importa es la armonía de mi interior. La encuentro al blandir mi espada, eso es todo. Cuando participé en un danmaku por primera vez, lo único que veía eran un montón de balas sin sentido. Tarde 3 años en ver las spell cards como un todo. Ahora corto a mis enemigos con toda mi alma y no pienso en lo que ven mis ojos. Siento y sé cuando debo detenerme, me dejo guiar por mi espíritu, que sigue las curvas naturales revelando las grandes cavidades, guiando mi hitbox por los espacios vacíos, siguiendo la estructura de la spell card, pero sin tocar ni una bala, ni usar bombas, y menos aún perder una vida.
Un buen espadachín necesita afilar su hoja una vez al año, uno torpe la afila cada mes. He usado esta espada toda mi vida y de cortado diez millones de enemigos. Pero la hoja sigue tan afilada como el primer dia.
No obstante hay algunas spell cards difíciles, cuando las veo venir, mi corazón les ofrece mis más profundos respetos y me detengo para observarlas atentamente, moviendome junto a mi espada cada vez con más delicadeza, hasta que pum! he vencido al enemigo, entonces guardo mi espada y evaluó mi labor, hasta estar completamente satisfecha con ella.
Que bien! dijo Yuyuko. Me has mostrado el camino para vivir mi propia vida.
YOU ARE READING
Poemas y reflexiones sobre touhou
PoesiaUna serie de poemas y reflexiones que han venido a mi mente luego de jugar tanto tiempo este hermoso juego. El cual me ha enseñado muchas cosas. No es un libro terminado, iré agregando más escritos conforme lleguen a mi corazón durante el juego.