Tan Perfecto Como El Chocolate🍫

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Se podía ver a un pequeño nipon de ojos chocolates caminando por las calles de Rusia agarrado de la mano de su hermana mayor, era un paseo de familia, estaban de vacaciones. El pequeño miraba con emoción cada cosa que se le cruzaba por su campo de visión, esos hermoso ojos cafés con un brillo esplendido hacia que se robara unas cuantas miradas de las personas,. Yuuri era un niño de 6 años en ese entonces, era regordete y tenia grandes cachetes con un leve color carmin. Al caminar descuidadamente choco un un hombre de unos 27 años de cabellos plateados bien vestido, este vio al niño con una sonrisa y Yuuri se disculpo con una leve reverencia, sus padres le sonrieron al joven y se fueron, al pequeño azabache le latía el corazón muy fuerte al ver aquel joven de cabellos platinados y ojos azules.

-ACTUALIDAD-

Yuuri ahora cursaba se primer año de universidad tenia 18 años y la pubertad le dio un buen regalo haciéndolo aun mas lindo, Yuuri desde pequeño practico ballet el cual fue formando su cuerpo poco a poco, a sus 14 años unos fotógrafos lo vieron jugando en un parque cercano a su casa, estos se acercaron preguntándole al pequeño si quería ser modelo, y este le dijo a su madre y aceptaron, Yuuri comenzó a modelar a temprana edad, su pequeño y esbelto cuerpo hacia que toda la ropa le quedara espectacular y así comenzó a meterse en el mundo del modelaje haciendo que se decidiera el estudiar diseño de modas y sacar a la ves la carrera de modelaje.

El vivía en el universidad ya que esa tenia residencias, y para su suerte le toco compartir cuarto con su mejor amigo Pichit el cual estudiaba publicidad, por lo cual le pasaba tomando fotos cada que podía, Yuuri solo sonreí por tales actos dejando ser  a su amigo.

-nee Yuuri ya viste esto- menciono su amigo mientra leía una notificación de su celular sobre otra desaparición de personas.

Últimamente se daba el rumor de que seres de la noche raptaban personas para satisfacer su hambre, pero como todo solo eran rumores, rumores que al nipon le deban un poco de miedo.

-déjame ver- agarro el celular del moreno mirando aquella imagen con el encabezado de personas desaparecidas en los barrios mas bajos.

 Yuuri entrego al celular al dueño y salio al pequeño balcón de la habitación  lo que habia leido no le gusto,  las noticias le daban un poco de terror, pero el no podía hacer nada. Miro la luna que estaba llena iluminado todo a su alcance y sintió como si lo miraran , bajo su vista y por cuestiones de segundo miro uno hermosos cabellos platinados que levemente brillaban con la luz del astro desaparecieron de la vista del azabache dejándolo con curiosidad.

...

En otro lado se encontraba un hermoso ser de cabellos largos color plateado, ojos azulados y tez blanca cual nieve, este era un ser de la noche mejor dicho el líder de estos. Este viajaba por el mundo disfrutando de su juventud eterna hasta que alguien le robo el corazón, un pequeño de 6 años con lo ojos achocolatados que lo miraban sin miedo y con ternura, un leve sonrojo en sus cachetotes y una hermosa sonrisa. Desde ese momento comenzó a seguirlo, a procurar su protección y poder ver siempre su hermosa de sonrisa.

Habían pasado  12 años para ser exactos donde el nipon era observado por el peli plata sin darse cuenta  y si este no podía mandaba a uno de sus subordinados para vigilarlo. Cada día y noche que podía este lo miraba desde lejos, viendo como este algunas veces posaba en cada foto que su trabajo demandaba, algunas con ropas que ponían al peli plata celoso, y otras que lo llenaban de ternura, este vio por completo la evolución de aquel chico de cabellos oscuros. 

Le encantaba el poder ver que este por mas fama que hubiera ganado seguía siendo sencillo, amable y tierno, el quería tener a todo ese ser solo para el. Sufría de pequeños celos lo mataban por ver como muchos le coquetean y este solo les dedicaba un sonrisa nerviosa con un leve sonrojo, quería que estuviera con el y que nada los separara por la eternidad, que cada día lo pudiera enamorar mas  y que nunca se alejara de el sin importar que, ese era el loco amor que manejaba el oji azul.

Esa ves que miro a su amado debajo de la luz de la luna casi lo descubría, fue muy descuidado y como no si al ver a la persona que le gusta que era iluminada por la luz de la luna lo tenia embobado. Sonrió al ver la expresión de curiosidad del ojos chocolate prometiendo así que algún día iba a quietar esa duda de su cabecita.