Sinopsis

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Era uno de esas noches calurosas en donde sentía el placer recorrer por cada uno de las esquinas de su cuerpo.

Jadeó y gimió en silencio mientras su mano subía y bajaba por su falo.

Su respiración era lenta y pesada más cuando escuchaba los gritos de placer provenientes del chico del video.

La piel dorada brillando por el sudor, cabellos pegados en su frente, su rostro rojo y su garganta devastada por gritar tanto de placer y por el oral que había hecho con anticipación.

Ese sin duda era el chico de sus sueños, con pezones rosados erectos pidiendo un poco de atención, con esos labios rojos e hinchados que daban ganas de morder, con ese cuello que daban ganas de lamer y morder, clavícula con ganas de ser marcadas, un trasero redondo y firme, unas piernas delgadas y doradas.

El chico del video no le estaba dando la suficientemente atención al castaño que se aferraba y arañaba la espalda del chico.

Eran gemidos demasiados exagerados y fingidos.

Aún así terminó acabando sobre su mano, tirando su cabeza hacia atrás e intentando regular su respiración.

Si ya de por sí pensar en que se estaba masturbando era algo que le causaba demasiada vergüenza.

Imagínense la cara que puso al ver al castaño culpable de sus orgasmos allí, en su salón.









N/A

Antes que nada voy a aclarar que esta no es una historia así como así... Más bien es una critica a las industrias pornográficas así que adelante.

Comenten si quieren que siga ❤️

Por cierto en esta historia Tony tiene 20 años y Steve 23.

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