Monster

Y un monstruo.

Bien, llevaba ya un par de días en la escuela sin que nada hubiera sucedido...Bueno, nada referente a lo del vídeo, el tonto estaba cumpliendo su promesa, eso era bueno, supuso, significaba que no pensaba romper las reglas si, efectivamente, obedecía. Y a decir verdad esperaba más de ese idiota, pero hasta ahora no es que le hubiera pedido algo fuera de lo común.

"Trae esto" "Trae aquello" "Cómprame esto" "Dame tus deberes"

Era...Bastante más común de lo que esperaba...Realmente no parecía ser tan malo, no es como si el otro hubiera pedido que se suicidara...Aunque no es como si fuera a hacer algo así, prefería cambiarse de país antes que morir por orden de ese tonto. Además, aun siendo Izaya, estaba seguro que no le pediría algo así...A Izaya le gustaría verle sufrir antes de que muriera, y claro, no le daría ese placer.

"Hoy tráeme los deberes de matemáticas. Cómprame tres sándwiches de queso y de paso sáltate esta clase, estoy cansado y quiero que escribas lo de ayer en mi cuaderno"

Miró el mensaje con el ceño fruncido, gruñendo antes de suspirar pesadamente, provocando que los de su alrededor se alejaran con algo de miedo, recomponiéndose por lo mismo, hizo una pequeña mueca algo nerviosa...No quería provocar esa reacción, aunque ya daba igual, fue a su aula para tomar sus cosas, avisando a Kadota que se saltaría esa clase, después copiaría de su cuaderno, era un poco molesto tener que faltar...Aunque solo sería un mes, no es que le molestara tanto.

Caminó sin prisa al casino, compró lo necesario y luego se dirigió a la parte trasera de la escuela, desde allí podría ir a la zona del gimnasio sin ser visto, justo detrás era un lugar perfecto para saltarse las clases, con pasto, sombra de los árboles...En fin, ahí solía pasar su tiempo con Shinra curándole después de una pelea.

-Hasta que llegaste, tardaste mucho -Escuchó a Izaya quejarse, suspirando antes de sentarse y entregarle su bolso y la bolsa con "su pedido" a lo cual el pelinegro no tardó en revisarlo, como si fuera a confundir dos sándwiches de queso...- Bien hecho, perro...De todas formas, ¿Están revisados los ejercicios? -Preguntó sacando rápidamente su cuaderno del interior de su bolso, aunque pareció algo extrañado al abrirlo- Vaya...

- ¿Qué? -Preguntó el rubio, acomodándose en el pasto con tranquilidad, mirando su cuaderno algo extrañado, no había nada raro en su cuaderno

-Nada, solo no pensé que te fuera tan bien en matemáticas, después de todo eres un cabeza hueca - >>PELEA, ESTE TIPO QUIERE PELEA<< Pensó el rubio con un pequeño tic en su ojo, acabando por rodar los ojos antes de asentir con molestia

-Me gustan las matemáticas, además son fáciles, aunque en general prefiero historia, es interesante, más de lo que podría pensar cualquiera, quiero decir, pasamos de 300 prefecturas a 47, aunque también me gusta mucho inglés y...-Volviendo a mirar al ojirojo, tragó saliva al notar que este le miraba con burla, como si se riera de él, rápidamente bajó la cabeza algo avergonzado, riendo un poco-...Eso fue raro, ¿Verdad?

-...Seh, fue sumamente raro, aunque me sorprende viniendo de una bestia como tú, digo...Pensé que eras un total analfabeto, pero si, como supuse te va bien después de todo, si no, no sé cómo hubieras pasado si al final te la pasas peleando -Casi regañó con diversión, frunciendo el ceño al notar que incluso él se había equivocado en un par de cosas algo tontas, odiaba la ley de los signos, aunque en un par de cosas pudo comprobar que efectivamente su profesor había errado al revisar su cuaderno- Lo sabía, maldito tonto...

Murmuraba entre dientes, dejando de lado el cuaderno antes de tomar la bolsa con los sándwiches, comenzando a comer uno con rapidez, mirando de reojo al rubio a su lado, pensando un momento sobre algo, parecía concentrado.