Parte 4

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El tiempo que le tomó a la Reina para romper el hechizo fue menos del esperado, gracias a los esfuerzos puestos en ello, sin embargo no fue poco. 10 largas horas , y cada minuto, cada segundo, contaba para quien estaba en el interior de la prisión magica. Las emociones e inquietudes de todos los presentes estaban a flor de piel. Todos estaban en un estado de tensión tal, que se podía sentir en el aire.

El agotamiento se veía claramente en el rostro de la mujer mayor, no se había despegado de la puerta de hielo desde que llegase, y no paró ni un segundo para descansar.

Thor permaneció al lado de su madre desde el primer momento y en un punto dado, fue necesario que su hermana Hela - la cual había estado atendiendo los deberes del trono hasta la vuelta de sus padres - viniese para apoyarla. Por su lado, su padre había vuelto a Asgard para retomar su tarea como gobernante y protector de los 9 reinos. Siempre procuraban que algún miembro de la familia real estuviese en Asgard, para cuidar la paz y la tranquilidad.

El poder divino de Hela, muy contrario al suyo el cual era la luz, era la oscuridad. Mientras Thor era la encarnación de la vida y la fertilidad, su hermana mayor era la representación de la desesperanza y la muerte.

Hela se introdujo en la sombra de su madre al momento de llegar, compartiendo su fuerza vital con Frigga, alimentándose de su cansancio y fatiga. Eso le había dado a Frigga algo más de tiempo para trabajar sin que su cuerpo le pasase factura.

La gigante mayor, cuyo nombre era Lorna, se mantuvo todo el tiempo rezandole a las Nornas por la criatura encarcelada, y poco a poco otros sirviente que fueron enterándose se le unieron para pedir por su joven príncipe.

Finalmente se escuchó un ruido de quiebre y Thor se volvió para ver una grieta en la gruesa pared helada, la grieta comenzó a crecer hasta que la gran puerta se rompió en mil pedazos, dejando al descubierto la entrada a una oscura caverna.

Hela se manifestó en su forma corpórea y tomó en brazos a Frigga antes de caer al suelo inconsciente.

-Madre!!

Thor corre hasta su madre, pero su hermana lo detiene con una mano.

-Estará bien, solo necesita descansar y recargar su magia, se sobreesforzó demasiado.

Thor asiente más tranquilo al saber que no era nada grave y miró entonces hacia el frente, hacia la recién descubierta caverna, oscura y profunda como la boca del gigantesco lobo Fenrir .

De la misma solo salía un gélido aire, y el más absoluto silencio. El mutismo reinaba en todos los presentes, nadie movió ni un músculo en dirección de la entrada, todos estaban estáticos esperando las siguientes ordenes.

-Lleva a madre arriba a las habitaciones. Yo me encargaré de este asunto.

Hela asintió, tomó a su madre en brazos y antes de salir miró a su hermano.

-Ten cuidado, no sabemos con certeza que es lo que se esconde ahí- Mira a la gigante -Sin ofender, pero no nos podemos guiar ciegamente por suposiciones, podría no ser quien creían.

-Lo tendré. Sea quien sea, no tiene la fuerza para atacar ahora mismo. Solo hay una manera de averiguarlo. Frandal!-Llamó a su subordinado y amigo-, iré primero, comprobando que no haya ningún peligro o trampa, cuando de el aviso me sigues.

-Si, general.

Thor dió el primer paso al frente, tomó el Mjölnir en una mano, con la otra invocó pequeños relámpagos que salían de sus dedos proporcionando luz suficiente para evaluar el interior e iluminar su camino, y entonces cruzó el umbral.

A medida que avanza Thor nota que la caverna es más profunda que amplia, y no logra distinguir mucho a menos que entre más al interior. La temperatura es definitivamente varios grados más baja que en el ya helado exterior. Se acerca a una de las paredes a su lado, y nota que el hielo a su alrededor está cubierto de marcas oscuras.

Marcas de arañazos cual pinturas rupestres, hechas de sangre seca. Cuanta desesperación ha debido pasar esta criatura para dejar este rastro enfermizo, como el de un animal frenético.

Thor mueve su mano iluminando a otros rincones del espacio, intentando dislumbrar alguna señal de vida, pero no ve nada o a nadie.

¿Será que es demasiado tarde?

Thor quiebra algo bajo sus pies y ve en el suelo rastros de huesos de animales pequeños dejados hace ya algún tiempo. En una esquinas al fondo ve un hoyo destinado a las necesidades fisiológicas y una pequeña bañera, Thor se cuelga el mjolnir a la cintura, abre el grifo y hace una mueca. El agua está helada, incluso para los estándares de los jotuns.

Un gemido se escucha y Thor gira la mano iluminada hacia el área más alejada del lugar. Justo al fondo, se encuentra un camastro rústico, y la fuente del sonido parece venir desde detras de este.

Thor se apresura y al dar la vuelta al mueble incomodo se lo encuentra. En el suelo está un pequeño bulto desnudo, en posición fetal, abrazándose a sí mismo. Un chico por lo que parece. Por su tamaño podría pasar por un aesir adolescente si no fuese por la piel azul y cuernos característicos de un jotun. Thor cae arrodillado y comprueba rápidamente que aún respire. Revisa el pulso con cuidado de no lastimarlo y ve que sus latidos son débiles y distantes entre ellos.

-Frandal busca a un sanador ahora!!!Hey?- le habla a la criatura desaliñada- Todo está bien, te sacaremos de aquí.

No obtiene respuesta y no sabe donde tocar. Su cuerpo está tan delgado, sus costillas son visibles. Thor teme que se quiebre si lo mueve, ve sobre el camastro una fina y roida frazada, la toma para cubrir el cuerpo y apenas logra cubrir algo de tan pequeña que es.

Por dios que horror, las condiciones en que estuvo este pequeño ser han sido infrahumanas. Thor evalúa los tobillos y muñecas encadenados del chico, la perdida de músculo a hecho que estos le queden grandes, casi podría quitárselos solo pasándolos, pero tiene costras en los grilletes. Heridas abiertas he infectadas sobre cicatrices viejas . Thor se le oprime el corazón, el rostro está oculto tras su enmarañado y largo cabello, tan sucio que no se podría decir su color. No puede esperar más, se decide, con cuidado rompe las cadenas y toma suavemente el cuerpo en sus manos. El movimiento hace que el chico suelte un débil quejido.

-Lo siento.-Se disculpa Thor,-pero debo sacarte de aquí, Le aparta suavemente el pelo del rostro y su respiración queda atrapada. Aún Bajo las capas de suciedad logra distinguir un rostro hermoso, cincelado, como si hubiese sido esculpido por el más talentoso de los artesanos, más bello que cualquier hombre o mujer que Thor ha conocido. Los ojos del chico se entreabren y lo miran fijamente, Thor se hunde en esa mirada, sus orbes son tan rojos como todos sus congéneres jotun, color que siempre inquieto a Thor . Pero lo que en otros gigantes le resulto a Thor indiferente, lo encuentra atrayente en esta criatura, hechizante. El chico vuelve a cerrar sus ojos desmayándose contra su pecho y Thor aceleró el paso al exterior.

Salió de ese lugar repitiéndose vas a estar mejor, vas a estar mejor. Apretando fuertemente a la frágil criatura en sus brazos y con el corazón acelerado de un irracional miedo a perderlo.

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⏰ Última actualización: Feb 11, 2020 ⏰

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