Dioses (Nombre Provisional)

04

El reino de Iradia, el más pequeño de los cinco reinos ubicado en la parte sur de un continente comercial en el hemisferio norte, que también es el continente más pequeño de cuatro continentes y en el que solo se habla un idioma, además de ser el único reino en el que casi toda la población son solo humanos, en comparación de los demás reinos donde su población es una mezcla de humanos, demihumanos y otras razas, aquí solo el uno por ciento serían demihumanos.
Mientras se acercaban podían ver a los lejos Frey, la capital principal de Iradia, una enorme ciudad que llegaba cerca de los cinco kilómetros de extensión, en su centro estaba el castillo del rey y todos los demás nobles, esta zona que era cerca de unos 800 metros de diámetros, estaba amurallada con unos muros que superaban los 30 metros de altura, con un grupo de guardias que vigilaban las entradas. Se empezaron a topar con otros carruajes que salían y entraban de allí, cada uno para sus negocios, hombres o grupos que se dirigían a sus aventuras y gente que solo salia a pasear. Rosaline y su madre yacían dormidas, la noche había sido larga, por lo cual no conciliaron bien el sueño, y cayeron rendidas apenas todo terminó, John se encontraba en su pose habitual con las rodillas al pecho y ojos cerrados, pero no estaba dormido, Kevin se hallaba sentado a la par de Raul y veía como los demás carruajes pasaban, y como grupos de personas iban en sus caballos para ir a explorar las mazmorras, laberintos o que solo cazarían monstruos para obtener sus pieles o carnes, pero casi la mayoría de ellos se notaban preocupados, grupos de aventureros salían como si fuesen a buscar algo, pero no prestaron atención a eso.

—Estoy tan cansado.—Dijo Raul mientras bostezaba.
—Si quieres te ayudo en lo que queda del camino.—Se ofreció Kevin.
—No, esta bien, ya descansare apenas lleguemos donde mis suegros.—Respondió Raul.
—¿Se dirigen donde tus suegros?—Preguntó Kevin.
—Así es. La razón por la que hicimos este viaje es para inscribir a Rosy a la Academia mágica del reino de Iradia. Y como ellos viven aquí, nos facilitaron la estancia.
—¿La piensan inscribir en una academia mágica?
—Mágica solo de nombre, ahí aunque estudian magia, también se especializa en otras áreas como filosofía, matemáticas, arte, literatura entre otras. También es conocida como la academia mas prestigiosa e importante de todo el reino.
—¿Y en que piensa Rosy en inscribirse?
—Aun no lo decide.
—¿Aun no sabe? ¿Y como se inscribirá?
—La academia tiene un sistema de exámenes que miden sus aptitudes y habilidades. Son 5 exámenes, uno de conocimiento general del reino, su historia, su cultura y fundación el cual es obligatorio, dos son para medir sus capacidades físicas, uno para las habilidades mágicas y otros para la fuerza física, y los últimos dos son para las intelectuales, igualmente uno es de conocimiento mágico general y el otros es de ciencias generales.—Explicó Raul.
—Oh! ya veo.
—Por supuesto que dependiendo de lo que se elija se realizara uno u otro examen, si elije se elije ser mago, solo los exámenes relacionados se le aplicará, si elije ser filosofo solo los intelectuales y si se elije ser aventurero solo los de aptitudes físicas, pero al final se tiene que tomar un mínimo de 3 exámenes. Si no saben que elegir, solo escogen los intelectuales o aptitudes físicas y dependiendo del resultado se les dará las opciones a escoger. Estoy seguro que ella escogerá alguna área intelectual. Ademas, otra razón es que sus amigas están en esa academia.
—Jajaja, entonces se siente sola sin sus amigas. Seguro le irá bien, ella es sensible.
—Disculpe, pero ¿que quiere decir con sensible?—Preguntó Raul
—Ella tiene una gran afinidad con el mundo espiritual, es capaz de percibir las sutilezas del plano no físico. Es por eso que desde el principio ella sospecho que no eramos normales, y gracias a eso ella descubrió quienes eramos.
—¿En serio?
—Sí, gracias a eso ella podría convertirse en una excelente maga, alquimista, vidente o incluso oráculo,
y desarrollar otros tipos de habilidades.
—Vaya, es sorprendente.

La idea de una academia no le desagradaba, de hecho le parecía interesante, aunque no estaba en sus planes el entrar a una, sería una buena experiencia, después de todo, solo eran dos dioses que estaban aburridos y habían llegado para experimentar y sobretodo divertirse.