Poesía De Amor, Dolor Y Otros Cuentos Vol1

tardes

Fue un día poco común, retome el patinar, y no se pueden imaginar la felicidad que sentí frente a la sensación del viento en mi rostro y deslizándose entre mis dedos, la sensación de la velocidad y la adrenalina al hacer trucos, entre las ramplas estuve fluyendo como el agua.

Tu compañía siempre es cálida y propicia, siempre alentándome a arriesgarme e intentarlo, siempre sacándome de mi zona de confort de una manera divertida y retadora, me encanta eso de vos, siempre tan retador y confiado, inspiras confianza y cariño; siempre vos, al pendiente de si caigo para evitarlo o levantarme, después de unas risas, claro está.

Entre risas y palabras que se llevaba el viento fresco, veíamos formas en las nubes cuál niños pequeños, siempre divirtiéndonos hablando tonterías que nos hacían gracia, cosquillas y pequeños juegos llenaron una parte de la tarde calurosa de enero, la otra parte de la tarde la pasamos durmiendo, yo acariciándote la espalda mientras vos te relajabas y te sumias en un sueño largo y tranquilo, la música que salía de tu celular llenaba la habitación tanto como la luz del sol a través de la cortina,  esporádicamente abrías los ojos y nos mirábamos con tranquilidad y cierta diversión, para luego dejarnos pequeños besos cortos en las mejillas y uno que otro en los labios, y casi inmediatamente volver a caer dormidos.

No sé si era el calor del ambiente o si estábamos que ardíamos de pasión, pero era casi glorioso y divino el sentirte dentro, el ser uno contigo por unos minutos, el dejar a tu disposición mi cuerpo y darte todo el placer que quisieras, quería complacerte mientras me sentía en una nebula de placer y tranquilidad, esta vez fue diferente, o así lo sentí yo, no hubieron afanes, ni impedimentos y de cierta forma me atrevo, descaradamente, a decir que hubo más cariño, disfrute cada segundo estando en ese lapso de tiempo mientras teníamos sexo, fue tan exquisito y excitante todo, tu voz sensual diciéndome que era tu perra, que te complacía bien y la frase que más me fascina que salga de tu boca "me vas hacer venir, te mueves muy rico" para con mirada pícara y sonrisa juguetona mirarte y seguir el ritmo hasta que eyacules, me encantaría haber sentido como descargabas tu semen en mi, pero por seguridad mejor lo sacaste, disfrute cada beso y cada embestida, deguste cada segundo y siempre estaré para complacerte, porque me fascina que me sometas y tomes de mi todo lo que quieras.